Nunca has visto la nieve as

Ski Resort Tycoon II salió a la venta en EEUU meses antes de que Planeta DeAgostini Interactive lo publicase en España a principios de diciembre, y ya entonces apareció en la serie económica Activision Value. También en España el juego cuesta unos asequibles 19,95 euros, pero estos detalles ya deberían ponernos sobre aviso de que este título no pretende, ni puede, competir con los pesos pesados de la estrategia y la construcción.

Teniendo presente este detalle, el mérito de este juego de Cat Daddy consiste en trasladar la mecánica de juegos con el consabido Tycoon en su título a las montañas, donde tendremos que construir y gestionar una estación de esquí.

Audio y vídeo

A pesar de que muchos títulos similares a Ski Resort Tycoon II aún se ponen a la venta hoy en día con gráficos en 2D, debemos reconocer el mérito a sus programadores de haber incorporado un motor gráfico en 3D. Así, y gracias a la versatilidad que proporciona un engine de este tipo, podremos observar nuestras creaciones de formas muy diferentes. El jugador dispone de tres tipos de zoom, desde uno que muestra prácticamente todo el mapa hasta otro, el que ofrece más detalle, que apenas permite ver unos pocos edificios, sin olvidar un zoom intermedio que será el que probablemente usemos más a menudo. Además, podremos rotar de 90º en 90º la vista para que siempre podamos encontrar al edificio o al personaje que busquemos y no quede escondido tras una montaña.

Por si estas opciones os parecen pocas, aún queda otra posibilidad: ponernos en la piel de cualquiera de los personajes que pueblan nuestra estación de esquí y ver la acción en primera persona. La utilidad de esta vista de cara a mejorar el funcionamiento de nuestra estación es dudosa, pero es una posibilidad que permite cambiar de tercio un rato y divertirnos explorando nuestra creación desde dentro. El menú de configuración nos deja elegir entre tres resoluciones: 640x480, 800x600 ó 1024x768.

En cuanto a las texturas del terreno y a los modelos de personajes, edificios y objetos podemos calificarlos de funcionales. Es decir, no ganarán ningún premio y cumplen el cometido que se espera de un juego de línea económica. Entrando en detalles, la textura de la nieve es de lo más simple, a pesar de que ocupará la mayor parte de los mapas, la variedad de árboles que crecen en ellos es muy limitada, las animaciones de los personajes son más descriptivas que realistas, y los edificios, a pesar de que tienen personalidad y colorido, son demasiado cuadrados y no disimulan que el motor gráfico los sitúa sobre una cuadrícula, que por cierto podremos activar y ver durante la partida.

Cat Daddy también han incluido algunos efectos adicionales como el paso del día a la noche, con lo que los edificios encienden sus luces y los esquiadores siguen a la suya aunque no tengan luz, o las nevadas, que teñirán los árboles y los edificios de blanco.

Pero de todo el apartado gráfico lo que más nos ha sorprendido, negativamente por cierto, es las ralentizaciones que sufre el juego en determinados momentos. Así, durante la transición entre el día y la noche, cuando rotamos la vista 90º o en la vista en primera persona los gráficos se actualizan a golpes, y no podemos echar la culpa al hardware porque es el mismo ordenador que nos permite jugar al NOLF2 a 1280x1024 y con el máximo detalle.

El apartado sonoro no da demasiado juego. Para empezar, en el juego sólo podremos escuchar unas pocas voces, en inglés, que corresponden a los sonidos asociados a ciertos edificios. La música se limita a cinco temas musicales, cada uno de un estilo diferente como country, rock, techno o jazz. Como acostumbra a ocurrir en estos casos, las melodías suenan bien la primera vez, pero tras pasarnos unas horas jugando, ya no querremos volverlas a escuchar nunca más. Y finalmente los sonidos son muy esporádicos y de baja calidad, es decir, están ahí para cumplir con un leve papel informativo y no para sorprendernos o dejarnos boquiabiertos.

Guión

Ski Resort Tycoon II no nos cuenta ninguna historia y, en todo caso, su mérito consiste en trasladar una fórmula ya consolidada y muy conocida por el gran público al mundo alpino. Quizás el único atisbo de historia lo encontramos en los desafíos, que nos proponen cumplir ciertos objetivos en un determinado tiempo.

Jugabilidad

Este juego se puede afrontar de dos formas. En primer lugar el jugador dispone del modo de juego libre, en el que empezará con un montaña virgen y deberá construir una estación de esquí con su propio estilo. En función del nivel de dificultad que escoja entre los tres disponibles, empezará con más o menos dinero. En cambio, la otra posibilidad es elegir uno de los desafíos preparados por Cat Daddy Games, que nos obligan a cumplir ciertos objetivos en un tiempo limitado y con las mismas restricciones económicas que en el modo libre.

El primer desafío es el tutorial, que servirá para que los usuarios menos atrevidos puedan aprender los fundamentos. El resto nos ofrecen ofertas como construir una estación de 2, 3 ó 5 estrellas, construir un telesilla de cuatro plazas hasta la cumbre de una montaña, ampliar una estación para albergar los Juegos Olímpicos, limpiar la montaña de basura tras los Juegos o construir una estación en un lugar muy propenso a las avalanchas.

La mayoría de las veces tendremos que empezar a construir una estación de esquí desde cero, y el único edificio que tendremos es la entrada a la estación. Las posibilidades que tenemos a mano, y que lógicamente nos costarán dinero, están agrupadas en los iconos de la parte superior de la pantalla. Por un lado podremos talar o plantar árboles y edificios, que se encuentran agrupados según su función.

La variedad es muy amplia, y encontraremos desde varios tipos de generadores eléctricos hasta alojamientos de diferentes categorías, tiendas de alquiler, una agencia inmobiliaria, casetas de mantenimiento o limpieza, una emisora de radio, refugios, patrullas de esquí, lavabos y restaurantes. Pulsando con el botón derecho del ratón podremos consultar varios detalles sobre cada edificio para comprobar cómo van perdiendo valor con el paso del tiempo, sus costes de funcionamiento y los ingresos que nos han proporcionado, y en la mayoría de ellos podremos fijar el precio de sus servicios.

Para atraer el máximo de clientes tendremos que ofrecerles lo que buscan y a precios razonables, así que es muy importante ajustar bien los precios de cada edificio. A medida que construyamos más instalaciones, aumentaría la categoría de nuestra estación, cosa que podremos ver en todo momento en la parte superior de la pantalla con las estrellas que nos otorga el juego. Pero además de los edificios necesarios para el buen funcionamiento de la estación y el bienestar de los clientes y los trabajadores también podremos construir telesillas y remontes de varios tipos y pistas de esquí para usuarios de diferentes niveles.

Pero como ocurre en los juegos de este tipo, inicialmente no podremos construir todos los edificios ni todas las pistas. Cada elemento tiene ciertos prerrequisitos. Así, no podremos construir una pista de esquí azul si no tenemos instalada una barra, que no tiene nada que ver con un bar.

Otras herramientas que tendremos a mano nos permitirán modelar el terreno, subiéndolo, bajándolo o creando baches, por ejemplo, y hasta medir el desnivel y la distancia entre dos puntos. Todas estas opciones están disponibles en la propia interfaz del juego, pero además Ski Resort Tycoon II incluye un editor de terrenos, al cual accederemos desde el menú principal. Allí podremos usar un gráfico BMP como un mapa de altura, modelar el terreno a mano con las mismas herramientas del juego o recurrir al generador aleatorio.

Estrategia y trucos

Es muy importante ajustar el precio de cada edificio, y no se puede confiar en los valores por defecto porque nos arruinarán rápidamente. Así que inmediatamente después de crear un edificio, retocad el precio. Saldréis ganando.

Comparándolo con...

Debemos admitir que, a pesar de tratarse de una secuela, no conocemos la primera entrega, así que no podemos evaluar las mejoras y modificaciones que Cat Daddy han realizado en esta nueva entrega de la saga. Pero hace poco publicamos otro análisis en MeriStation de un título parecido, Val d'Isère: Ski Park Manager. Si el juego de Microïds nos permitía construir paso a paso las pistas esquiables, Ski Resort Tycoon II sólo nos permite situar un símbolo donde empieza la pista.

Después serán los propios esquiadores quienes elegirán por dónde descender. En cambio el juego que analizamos hoy incluye un motor gráfico 3D y no adolece tanto de los problemas de pixelación con el zoom al máximo que encontramos en Val d'Isère, y también marca una evolución de las partidas más progresiva al impedir construir cualquier objeto desde el principio, a través de prerrequisitos. Para terminar, Ski Resort Tycoon II es diez euros más barato...

Lo que está bien

La variedad de edificios y de vistas, la ambientación tan invernal y atractiva para los aficionados al esquí, el precio y la posibilidad de jugar por libre o afrontar desafíos.

Lo que no está tan bien

Los gráficos, más esquemáticos que espectaculares, la práctica ausencia de voces, los sonidos tan simples, la poca variedad musical, la falta de originalidad de la mecánica de juego, el manual, y la poca vida útil, ya que sin recurrir al editor, uno acaba cansándose bastante rápido del juego.

Enlaces

Manual

Parece que en la mayoría de juegos económicos los manuales en formato PDF o similares son ya una norma, pero eso no significa que estemos de acuerdo. Además, y a la vista del número de páginas del manual, no costaba tanto ofrecer una versión impresa. Desgraciadamente el manual está en inglés, aunque sí podemos alabar que repasa todas las opciones de los menús y hasta habla brevemente del editor.

Requisitos del sistema

Equipo mínimo

Pentium II 450 Mhz, 32 MB RAM, CD-ROM 4x, Tarjeta gráfica con 4 MB y de sonido compatibles DirectX, Windows 95, 98, Me o 2000

Equipo recomendado

Pentium II 600 Mhz, 64MB de RAM, CD-ROM 8x, Tarjeta gráfica con 8 MB

Equipo de pruebas

El juego se ha probado en un equipo con Windows XP Home y ha funcionado correctamente.