Otro año más Milestone nos sumerge en el Campeonato del Mundo de Superbikes con su principal baza en alza: la simulación. Además de diversión a raudales, esta obra nos muestra que sus desarrolladores no han perdido el tiempo y se han ocupado de mejorar algunos de los defectos que lastraron a su antecesor. ¿Habrá sido suficiente?
No estaremos descubriendo ningún secreto si apuntamos que, por desgracia, el Campeonato del Mundo de Superbikes en la actualidad no posee el mismo empuje mediático que la que debiera ser su hermana pequeña por cilindradas: la flamante MotoGP de Rossi y compañía. Sin embargo, los chicos de Milestone han estado apostando por él hasta el final; infatigablemente han insistido año tras año en la espectacularidad de las 'superbikes' y toda la parafernalia que le rodea, intentando hacerse un hueco sonado e importante en el mundo del ocio digital con esta semi-desconocida competición en nuestro país. Pero la consecución de este tipo de pretensiones depende únicamente del acierto o no que los desarrollares logren en la culminación de su obra, y en este caso el resultado obtenido por Milestone en cada una de sus entregas ha sido desigual, nunca alcanzando la excelencia tan ansiada en este universo.
Si por cualquier avatar del destino nos convertimos, a la larga, en un verdadero as de la conducción, siempre podremos personalizar las variables de simulación para hacérnoslo pasar aún peor, pues aunque a priori parezca casi imposible, tenemos un amplio margen de maniobra para empeorarnos las condiciones de la simulación. Entre otras cosas podremos activar un par de opciones para que tanto nuestro piloto como nuestra moto sufran daños cada vez que nos golpeemos y, en consecuencia, su rendimiento decaiga.
Es impresionante conducir bajo la lluvia, mientras la pista se inunda y sufrimos los primeros estragos de las condiciones ante las que nos hallamos. Nuestra pantalla se llenará de gotas que nos dificultarán la visibilidad en gran medida lo que provocará, junto a los resbalones que nos provoca el agua de la lluvia, que nuestros nervios lleguen a crisparse, asaltándonos cientos de dudas a la hora de tomar decisiones; pero no sólo se queda aquí esta impresionante experiencia sino que los efectos sonoros provenientes de la tormenta que acecha, así como el rugido del motor de las 'superbikes' nos sumergirá completamente en la recreación contextual de la carrera de forma absolutamente brillante. Al mismo tiempo la expectación aumenta en parte con la inclusión de cinco corredores más a los veintidós de 'SBK 08', por lo que ahora seremos veintisiete los que luchemos por el triunfo hasta la última curva, situándose el límite de vueltas en veintidós.
La sensación de velocidad que sentiremos a bordo de nuestra moto será tan complaciente como peligrosa puesto que equivocarnos en un mínimo movimiento de rueda o en el uso de uno de los dos frenos puede hacernos perder la carrera. Por eso mismo y porque esto es simulación tendremos que concentrarnos y medir cada movimiento desde que partamos de la línea de salida hasta que crucemos la meta para finalizar la carrera. Todo lo que no sea centrar los cincos sentidos en la pista no vale en los niveles de realismo más avanzados de 'SBK 09'.
En un principio es aconsejable ir conectando poco a poco con el juego, optando por embarcarnos en una carrera rápida, con las opciones que el mismo jugador configure, así como acudir a los entrenamientos. Este último modo de juego es algo más intenso, pues nos encontraremos en nuestro box, desde el cual podremos acometer ajustes técnicos siempre atendiendo a las condiciones de la carrera haciendo especial hincapié en dos factores decisivos: la pista y la meteorología. Al mismo tiempo podremos tomar decisiones técnicas respecto a nuestra moto, desde la elección de las ruedas al ajuste de la cadena, pasando por las marchas, la dirección, las suspensiones, los frenos
No obstante no será lo único que podamos hacer desde el modo de entrenamiento, los ingenieros estarán a nuestra entera disposición, y a ellos acudiremos para jugar con opciones como la telemetría, pedir consejos o celebrar improvisadas reuniones técnicas a través de las cuales serán los propios ingenieros los que nos preparen nuestra moto siguiendo las órdenes que nosotros mismos tendremos que dar. Uno de los ingenieros nos preguntará sobre cómo deseamos que prepare nuestra 'superbike', y una vez especificamos nuestro parecer, nos la preparará tal y como lo hemos decidido. Pese a esta útil opción, si somos capaces de hacer los ajustes manualmente (siempre y cuando sepamos lo suficiente sobre el tema) el resultado será más satisfactorio.
Asimismo, este flamante 'SBK 09' alberga algunos extras que sólo tendremos opción de desbloquear a través de nuestras hazañas. Por un lado tenemos imágenes y vídeos del Alfa MiTo, uno de los 'safety cars' oficiales, bloqueados mientras que la galería estará disponible como la primera pieza de nuestra colección digital. Por otro lado tendremos imágenes de carrera, chicas con sombrillas y vídeos de carrera encerrados tras un candado. También se registrarán, en este mismo menú, las copas que logremos en los distintos circuitos que nos ofrece 'SBK 09'.
Por otro lado, si somos los creadores de la partida nos ocuparemos de configurar todas las características relativas al nivel de realismo, al circuito y otras facetas relevantes. Nos decepciona que a pesar de que el número de competidores en el modo offline es de veintisiete, en línea nos limiten a doce jugadores, lo cual nos arrebata la oportunidad espectacular que supondría correr con veintiséis compañeros más. La encargada de potenciar las infraestructuras 'online' es GameSpy, de manera que con sólo registrarnos en su web accederemos a la experiencia en línea sin trabas.
7.5
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.