Rōnin

Gracias a las posibilidades táctiles de nuestros dispositivos iOS hemos podido ver como los endless runner han vuelto a la actualidad del videojuego con tanta fuerza como para convertirse en uno de los géneros más populares de la AppStore. Entre ellos podemos encontrar todo tipo de temáticas y propuestas, unas más equilibradas y atractivas que otras; con el objetivo de destacar sobre el resto, los franceses Bulwark Studios han llevado a nuestros iPhone, iPad e iPod touch un nuevo título llamado Rōnin, en el que la acción y el frenetismo se abren paso en un Japón feudal atemorizado por bandidos, arqueros y samuráis, con el fin de llegar hasta nuestro maestro para rendir cuentas. Veamos en nuestro análisis si Rōnin consigue destacar sobre el resto gracias a su trepidante jugabilidad y a un apartado gráfico colorista y vistoso.

Su propuesta es bien conocida por todos: nuestro protagonista correrá automáticamente de izquierda a derecha a través de diferentes escenarios con varias posibilidades para superar los diferentes enemigos que tratarán de impedir nuestro avance. Así, si queremos saltar sólo tendremos que deslizar el dedo hacia arriba o tocar la pantalla para atacar con nuestra katana; tan directo como intuitivo. A pesar de ello, descubriremos que no todos los endless runner están cortados por un mismo patrón; Rōnin ofrece una atractiva variedad en su jugabilidad que lo hace desmarcarse del resto, aunque adolece de otras carencias que empañan el resultado final. Tanto es así que mientras acompañamos a nuestro valiente samurái en su peligrosa carrera, deberemos aprender a combinar todos sus movimientos y técnicas con la recolección de fuegos fatuos para aumentar nuestro poder destructivo y convertirnos en el espíritu de un lobo feroz que acabará con todo lo que se le ponga por delante.

Ampliar

Los movimientos básicos de nuestro protagonista son dos; para saltar tendremos que deslizar el dedo hacia arriba y para deslizarnos por el suelo sólo tendremos que mover del dedo hacia abajo. Dichos movimientos ‒usados principalmente para evadir a nuestros enemigos‒ pueden combinarse con el uso de nuestra katana, que acabará con cualquier enemigo de un rápido y letal movimiento. Durante las carreras de nuestro Rōnin deberemos aprender a usar cada movimiento en el momento más adecuado; tanto es así que en lugar de presentar acción sin más, tendremos que planificar muy bien la estrategia a seguir combinando movimientos de evasión con feroces ataques de nuestra afilada espada. Es aquí donde reside el auténtico espíritu de un título desafiante que requiere de buenas dosis de habilidad y planificación, en la medida de lo posible, claro; y es que la elevada velocidad de nuestro samurái nos obligará a tomar decisiones en cuestión de segundos, o incluso menos.

Ampliar

Dichas misiones aumentarán la rejugabilidad del título y nos reportarán jugosos premios en forma de puntos de experiencia para subir de nivel y la adquisición de diferentes habilidades. Donde Rōnin se muestra menos brillante es en su acabado general, algo por debajo de lo que se esperaría de un título con un arte tan trabajado y que llama tanto la atención; el control táctil no termina de responder como debería, dando al traste con la mayor parte de la experiencia. Tanto es así que en muchas ocasiones nuestro samurái hará caso omiso de muchas de nuestras órdenes, haciéndonos perder valiosos fragmentos de vida. Por otro lado, una vez hayamos completado las primeras partidas, el juego no ofrecerá mucho más que la propia superación de nuestras marcas, ya que a partir de cierto punto se vuelve demasiado reiterativo y repetitivo. Aunque es una de las principales características del género; más allá de estas consideraciones, Rōnin llega a la AppStore como un título a tener en cuenta dentro del género, con un diseño artístico muy atractivo pero con demasiadas limitaciones, todo por un precio mas que asequible de 0,89 euros.