Si de caídas hablamos, al referirnos a este juego no tenemos más remedio que hablar también de la caída -algunos sospechan que con zancadilla de por medio-, del estudio que prácticamente lo desarrolló por completo, los hasta entonces bien considerados y aliterados Stainless Steel Studios. Apenas unas semanas antes de la finalización del programa saltó la noticia de la desaparición de la compañía, apresurándose Midway a anunciar la continuidad del proyecto, que finaliza ahora, unos meses después, convenientemente rematado por un equipo interno.
Pero como no estamos aquí para hablar de las continuas desgracias que se suceden en el sector, nos centramos en lo que verdaderamente nos ocupa. Rise & Fall es un juego de estrategia enmarcado en el más estricto clasicismo del género, del que pueden servir como ejemplos más que explicativos la saga Age of Empires o Empire Earth, este último de Stainless Steel también.
Con estas pocas líneas leídas seguro que ya tienes una idea clara de qué ofrece este título. Pues sí, la gestión de recursos, la creación y mejora de edificios y unidades militares y el ataque y defensa contra y del enemigo componen los engranajes que mueven la maquinaria.
Los recursos presentes son los típicos oro y madera y la no tan típica -de hecho novedosa- 'Gloria'. El oro lo obtenemos de las correspondientes vetas, la madera talando árboles, y ¿la Gloria? Pues haciendo cosas tales como matar y ser muerto en combate, producir unidades, explorar el mapa, o construyendo estatuas de gloria. Este recurso tan etéreo resulta especialmente necesario cuando se trata de mejorar nuestras construcciones, nuestros soldados, contratar consejeros, y, de forma particular, subir de nivel a nuestro héroe.
Vaya, casi sin querer hemos llegado a una de las palabras clave del juego, 'héroe'. En otros juegos de estrategia ya se ha podido disfrutar de una unidad especial dentro del conjunto. Recordemos por ejemplo Warcraft III o el más reciente El Imperio en Guerra. Pero su tratamiento en Rise & Fall cobra una nueva dimensión. Ahora es posible encarnar a ese héroe directamente, como si fuera un juego de acción, olvidándonos durante unos momentos del control directo sobre cualquier otra unidad, y repartir espadazos o flechazos como si se tratara de un hack'n slash al uso.
Este modo no está concebido para ser usado de manera discrecional, sino ante situaciones que de verdad lo exijan o en las que podría resultar determinante, por lo que los desarrolladores han limitado el tiempo que puedes permanecer en el llamado modo 'héroe al mando' estableciendo un nivel de energía que se agota progresivamente, y que puede ser rellenado con ánforas de vino. Con todo, bajo esta perspectiva no perdemos de manera absoluta el control sobre el resto de nuestras tropas, sino que podemos darles ciertas órdenes, como seguirnos, parar, o cargar contra el enemigo, incluso ordenar ataques de maquinaria pesada sobre objetivos concretos.
Subir de nivel al héroe significa incrementar su máximo de energía y desbloquear a nuevos consejeros que ofrezcan ciertas ventajas como un aumento de moral, curación de las tropas, o mejoras en el ataque. Por cierto, nuestro héroe nunca muere, bueno sí, pero resucita al poco tiempo en tu poblado.
Si el uso del héroe supone una de las novedades de entidad que acompañan a Rise & Fall, el tratamiento del aspecto naval dentro del juego es la otra. Ahora no sólo importa el tipo de nave que comandes ni cuántas de ellas; es cómo las armes el punto significativo. Así, no es lo mismo embarcar a un buen montón de arqueros y unos cuantos combatientes en cuerpo a cuerpo que lo contrario. Por ejemplo, si tenemos un buque atestado de lanceros que se ve atacado por otro buque enemigo, más nos vale intentar un abordaje rápidamente sobre él antes de que nos hundan desde la distancia. Del otro modo, si el potencial del enemigo para abordarnos es serio, mejor será tener un número suficiente de arqueros en cubierta para hacerlo astillas antes de que se nos acerque.
Por lo demás la mecánica del juego es la tan clásica que ya has podido disfrutar en títulos pasados, es decir, recoge recursos, construye edificios, entrena tropas, mejóralos, desbloquea nuevas opciones con cada mejora y, entre todo eso, defiéndete como puedas y ataca para ganar.
Para poner en práctica todo esto, Rise & Fall ofrece la posibilidad de jugar dos campañas, con egipcios y griegos, la posibilidad de jugar escenarios aislados, y un modo multijugador mediante red local o Internet. Las campañas son bastante poco desafiantes y no muy imaginativas, ni originales, ni a mi entender bien desarrolladas, con un pretendido carácter cinematográfico esto último que no me resulta demasiado verosímil. Los aficionados al género encontrarán la verdadera salsa en los escenario individuales y en el modo multijugador, donde están a nuestra disposición otras dos civilizaciones más romanos y persas-, auténtico reto del programa que exprime todo su potencial, aunque eso sí, el motor gráfico Titan se asfixia hasta llegar al cardiograma plano en cuanto el número de unidades en pantalla empieza a ser vistoso.
Otro elemento que no podía faltar es el editor de escenarios, suficientemente versátil como para poder crear desde un mapa aislado hasta para desarrollar una campaña entera.
No creo estar mintiendo si digo que éste es un buen juego, pero tampoco si digo que en su misma disciplina ha habido antes otros muchos y aún mejores, a los que no merman las novedades que aporta Rise & Fall, por no ser a fin de cuentas de gran peso, y de los que apenas se diferenciaría si no fuera por el nombre y el look.
Estamos ante un título recomendable para fans acérrimos que no se quieren perder ni un detalle del género, o para aquellos que lleven un tiempo sin acercarse a él y deseen retomarlo por la vía clásica y sencilla. Pero si eres un habitual de la estrategia que sin embargo no quiere estar siempre jugando a lo mismo, con lo último publicado por Midway no vas a encontrar ningún santo grial, ni las novedades que incorpora merecen el desembolso que supone.
Audio/Vídeo
En su faceta sonora, mención especial para la banda sonora musical, que si no está al nivel de una superproducción cinematográfica sí logra imprimir el carácter épico suficiente que el producto necesita. En cuanto al doblaje a nuestro idioma, pues simplemente correcto, sin demasiado fuerza dramática y con la apariencia de querer sencillamente cumplir de manera suficiente, pero no sobresaliente, el expediente. Ídem para los efectos de sonido, nada del otro mundo, pero tampoco malos o decepcionantes en modo alguno.
Gráficamente a un juego destinado a representar un gran número de elementos en movimiento sobre un mapa moderadamente grande, no se le pueden exigir florituras. Rise & Fall cumple bien en su aspecto visual, pero no en su rendimiento, que tiende a hundirse con un número alto de unidades, antes de que podamos hablar de exageradamente alto. Los modelos están bien detallados, así como los elementos del terreno, pero muchas de las construcciones ofrecen un aspecto muy plano y simple, que desmejora el conjunto, a lo que tampoco ayuda que las animaciones también sean bastante básicas. En cuanto a gráficos, la mención especial va para el agua, muy bien representada, incluso en su oleaje.
Guión
El guión que nos conduce por las campañas preparadas para el juego individual es bastante simple y poco interesante, mera excusa para servirnos una misión tras otra.
Jugabilidad
A pesar de las novedades vistas, Rise & Fall sigue a rajatabla los patrones clásicos del género. Todo comienza con la recolección de recursos, que usaremos en un primer momento en construir nuestros edificios más básicos. Gracias a ellos formaremos a las tropas o alcanzaremos ciertas mejoras tácticas, como mayor número de población o acumulación de Gloria.
Algunos edificios así como la mayoría de unidades militares son susceptibles de mejora. Esas mejoras requerirán el consumo de recursos y son sucesivas, es decir, que el realizar una de ellas te da acceso a la siguiente.
También podemos progresar, como ya he dicho, con nuestro héroe, subiéndolo de nivel a cambio de un determinado número de puntos de Gloria. Con cada nivel y hasta el quinto, obtenemos acceso a una serie de consejeros superior, con lo cual se hace necesario llevar a nuestro héroe al menos hasta ese nivel.
Por lo demás, y conjugando todos estos elementos, ya sabes, hazte de un buen ejército y abalánzate contra el enemigo hasta hacerlo sucumbir. Como digo, Rise & Fall está formulado con los ingredientes más tradicionales del género, que no le serán ajenos, y por desgracia tampoco novedosos, a nadie que haya tenido algún contacto con él, por leve o esporádico que haya podido ser.
Estrategia y Trucos
Casi todo lo que sabes de otros títulos similares, te servirá en éste. Si tuviera que quedarme con alguna peculiaridad respecto a los demás, es el enorme valor de los arqueros. En el ataque terrestre, una vez mejorados al máximo, pueden aniquilar en un santiamén un puesto de vigilancia, o una balista, o un nutrido grupo de infantería si se les proporciona el suficiente tiempo mediante las unidades de cuerpo a cuerpo pertinentes. Pero es que además si se les embarca en una nave en gran número, prácticamente no hay rival, puesto que podrían hundir la del enemigo mucho antes de que éste pueda intentar el abordaje. Por ello es mucho más útil y seguro navegar cargado de arqueros que de otro tipo de infantería.
Y hablando de navegar, las naves, puesto que algunos de sus tipos pueden equipar una catapulta, se convierten en un demoledor elemento de ataque a posiciones fortificadas en tierra desde sitios seguros en agua. De verdad que merece la pena recorrer el mapa por mar para ver qué puntos enemigos en tierra podemos alcanzar desde el agua.
Y por último, en cuanto al 'héroe al mando', la gran novedad, radica su eficacia en si sabemos acertar en qué momento usarlo. Si entramos en ese modo para cargarnos a placer unas pocas unidades enemigas dispersas que unos pocos de nuestros hombres aniquilarían sin bajas sensibles, quizá no podamos usarlo más tarde para devorar a ese grupo de arqueros rivales que están liquidando nuestra infantería cuando nos hemos quedado sin caballería o sin nuestras propias unidades arqueras.
Comparándolo con
Es un ejemplar de la misma especie que la saga Age of y similares -que no son pocos-. Eso por hablar de ejemplos que podríamos clasificar en la época 'moderna', porque lo cierto es que muchos de los elementos presentes en Rise & Fall ya estaban presentes en títulos que aparecieron en los albores de la estrategia en tiempo real, como Dune 2 o el propio Warcraft.
Sabedores de ello, los responsables de su creación han introducido algunos elementos frescos, y a buen seguro que el 'héroe al mando' y la buena interpretación del combate naval lo son, pero no lo suficiente como para encender la revolución y el cambio que seguramente se perseguía con ellos.Enlaces Site oficial Comunidad Editor Distribuidor
Manual
En blanco y negro y parco a pesar de sus 46 páginas, en las que se obvian cosas tan importantes como una descripción, aunque sea somera, de los tipos de construcciones disponibles y sus funcionalidades así como de los diferentes tipos de unidades militares.
El intento, bueno a medias, de re dibujar un género cuyos trazos clásicos son difícilmente alterables. El editor de escenarios y las partidas multijugador aseguran diversión prolongada. Inusualmente bien presentado, en doble caja, una exterior de cartón y en relieve, y otra interior de plástico.
Lo malo
Ya has jugado a esto miles de veces. Las campañas para un jugador son bastante aburridas y restringen el potencial del programa. El rendimiento sucumbe cuando la exigencia gráfica crece.