100% vieja escuela

Item: PSYVARIAR Complete Edition
Rating: 7

Los fans del gatillo fácil están de enhorabuena. Aquellos deseosos de aniquilar interminables ejércitos de naves intergalácticas de todo tipo tienen ahora mismo una buena y económica excusa para volver a cabalgar entre láser y láser... PSYVARIAR.

Actualizado a 12 de marzo de 2012 05:28 CET

Los fans del gatillo fácil están de enhorabuena. Aquellos deseosos de aniquilar interminables ejércitos de naves intergalácticas de todo tipo tienen ahora mismo una buena y económica excusa para volver a cabalgar entre láser y láser... PSYVARIAR.

PSYVARIAR (PS2)

La historia de PSYVARIAR MEDIUM UNIT tiene su miga. No precisamente su argumento, que no deja de ser el típico y tópico de los matamarcianos de siempre, pero sí sus idas y venidas al mundo del videojuego doméstico. No en vano, precisamente ahora cuando su segunda parte está empezando a causar estragos entre los arcadeadictos nipones (e ilusionando a los nostálgicos poseedores de una Dreamcast), es cuando el PSYVARIAR original ve la luz en nuestro país dentro de los circuítos de la todopoderosa Playstation 2.

En formato CD-ROM y bajo la línea 'Explosive', con la cual el juego se vende a un precio que prácticamente lo convierte en imprescindible, este arcade que antaño triunfase en los salones recreativos viste sus mejores galas para la consola de Sony, en una edición que luce una 'revision' con sustanciosas aportaciones técnicas que lo hacen aún, si cabe, más actual y fácil de asimilar para los exigentes ojos de los jugones de hoy día.

PSYVARIAR (PS2)

Todo hay que decirlo, aún en su edición 'complete', con todas las mejoras que conlleva la versión arrange, PSYVARIAR se queda un tanto anticuado técnicamente, pareciendo más un juego de Ps-One que de la generación de los 128 bits. Aún así, el encanto de lo clásico es tan claro como encantador, a pesar de no llevar siquiera al nivel de un clásico de la anterior generación de Sony, como el gran RAYSTORM de Taito, y, evidentemente, quedándose muy atrás de esa gran joya del género que es IKARUGA.

Con todo, PSYVARIAR conserva virtudes como para obligar a todo buen aficionado al género de los matamarcianos el colocarlo en su estantería. Casi todas ellas, como no debe ser de otra forma, corresponden al apartado lúdico. Es excepcionalmente breve, es algo vetusto en sus roñosas 3D, pero divierte como pocos a ritmo de tecno machacón. Analicemos sus virtues y defectos...

g r á f i c o s
Lo primero que llama la atención en PSYVARIAR es la conservación del formato original de la recreativa, detalle siempre de agradecer en los shoot'em up de este tipo. A pesar de que el campo de visión vertical es muy amplio y bastante cómodo de cara a lo que viene con el scroll, siempre habrá quien se queje (y con razón) ante la nula posibilidad de plasmar a pantalla completa el juego, a no ser que giremos el televisor, cosa no siempre del todo recomendable...

Los gráficos poseen una resolución bastante baja, y no mucho detalle, ya que tanto las naves como los escenarios lucen un número muy parco en polígonos. Este matiz no sería muy de criticar ante un programa de este género, que muestra elementos extremadamente pequeños y moviéndose a gran velocidad, pero la verdad es que entrando en comparaciones con uno de los primeros CDs para Playstation 2, el genial shooter de Treasure SYLPHEED THE LOST PLANET, PSYVARIAR se queda muy, pero que muy atrás.

PSYVARIAR (PS2)

Tampoco las texturas salen muy bien paradas, quedándose todo el conjunto en una curiosa amalgama gráfica que se situa a medio camino de los 128 bits. De hecho, la sensación que produce PSYVARIAR a nivel visual es la de un juego de Playstation, la PsOne de toda la vida, sólo que con el añadido del suavizado de texturas. Como ya se dijo antes, el IKARUGA de Dreamcast o incluso el RAYSTORM de PsOne le da cien patadas en gráficos al presente matamarcianos, aunque al menos puede presumir de ser eficaz y tener algunos efectos de luces chulos.

PSYVARIAR (PS2)

Pero claro, también hay cosas buenas. No es desagradable a la vista, a pesar de que en ciertas fases la paleta de colores escogida es demasiado pastel. A decir verdad, destaca sobremanera la versión 'arrange' de la primera fase por sus bondades estéticas, con el planeta Tierra de fondo. El desarrollo es constantemente fluido, llegándose a mostrar decenas de elementos moviéndose sin producirse parón alguno. Por otro lado, el diseño de algunos enemigos no está nada mal, con la única pega de que el escaso bagaje poligonal y la resolución deterioran el conjunto.

A todo esto, hay que matizar que estamos hablando del resultado de la versión 'arrange', mejorada especialmente para la ocasión, porque si colocamos directamente la conversión directa de la recreativa, probablemente nos de un pasmo debido a la brutal simpleza de lo que tenemos en pantalla. En definitiva, se puede decir que PSYVARIAR casi aprueba, y que cuenta con la fortuna de que se encasilla en un género que, diversión aparte, no necesita demasiado más.

s o n i d o
Todo buen shoot'em up que se precie debe contar con un apartado musical vibrante, contundente, que sea capaz de poner al jugador a cien. Se debe definir por características tales como un rápido tempo que defina al oído la acción de cada stage y una reconocible sintonía para los imprescindibles jefes de fin de fase. Afortunadamente, PSYVARIAR cumple con todas estas premisas a la perfección. Las melodías son rápidas, música máquina que se fusiona en perfecta simbiosis con la frenética acción del juego. Del mismo modo, se han diferenciado cada una de las fases, poniendo especial énfasis en el imponente y cañero tema que da pie a los final bosses del juego.

La otra cara de la moneda está en los fx, sonidos típicos y tópicos del género, que sin ser en absoluto malos, sí que podrían haberse trabajado más. No dejan de ser el usual pim pam pum, con alguna que otra voz digitalizada. Vaya, más o menos como si de un matamarcianos de finales de los ochenta se tratase. Simplemente a destacar el roce de los disparos con nuestra nave consigue ser el principal protagonista de estos fx...

PSYVARIAR (PS2)

j u g a b i l i d a d
Como no podía ser de otra manera, PSYVARIAR es todo un prodigio de jugabilidad, un claro exponente del que era el género más idolatrado allá por la edad de oro de los videojuegos. Un homenaje total a la diversión que, a lo largo de los años, han ido atesorando auténticos mitos como XEVIOUS, TERRA CRESTA o RAIDEN, y recogiendo de forma evidente el testigo de clásicos recientes como DONPACHI o ESP RA DE. La propia Succes, creadora de algunas recreativas del mismo género a finales de los noventa, conoce a la perfección los engranajes de lo que debe ser un buen juego de naves, siendo una compañía cien por cien experta en eso de desarrollar matamarcianos de scroll vertical.

Y creedme, PSYVARIAR puede parecer altamente vetusto en materia audiovisual, pero no ha perdido un ápice de calidad en términos lúdicos. Al contrario, estos juegos son como los buenos vinos, cuanto más tiempo pasa por ellos, mejor se conservan. La mecánica no hace falta ni explicarla, el scroll avanza y nosotros, pudiéndonos mover libremente por toda la pantalla, tendremos que esquivar y destruir a todo enemigo que se cruce en nuestro camino. Para ello no sólo debemos ser hábiles a la hora de eludir el fuego enemigo, sino que... ¡debemos aprovecharnos de los disparos rivales para aumentar nuestro poder, esquivando al límite!

PSYVARIAR (PS2)

Sí, esa importante premisa es, posiblemente, el factor más carismático de PSYVARIAR, ya que la única forma de progresar es aumentar el poder de nuestro fuego, lo cual conlleva el apurar peligrosamente nuestros movimientos para, literalmente, rozarnos con las balas que van y vienen en pos de destruirnos. Tan original como sorprendente a la hora de llevar a cabo dicho ejercicio, ya que es alucinante meternos entre dos ráfagas de ametralladoras y ver cómo saltan chispas de nuestras alas, toda una constante en el juego, y sin duda alguna, un detalle genial.

Más aún porque PSYVARIAR cae en cierta moda puesta en marcha en las últimas hornadas de matamarcianos nipones, esto es, cientos y cientos de balas volando por la pantalla y dejando pequeños huecos sólo aptos para expertos pilotos. Es por ello que la loca idea de rozarse con los disparos le viene como anillo al dedo, aparte de que potencia de una forma aparentemente ilógica la jugabilidad. Por lo demás, sólo queda criticar la escasa longitud de las fases, en ocasiones más cortas que lo que dura acabar con el jefe final de turno; y alabar el que en un principio podamos escoger el camino, lo cual otorga cierta falsa variedad al conjunto. Eso sí, como todo buen masacranaves que se precie, es cien por cien rejugable.

c o m p a r á n d o l o c o n
No cabe duda de que, al lado de SYLPHEED o IKARUGA, PSYVARIAR es el patito feo. Está muy, pero que muy atrás de los títulos anteriormente citados, pero no por ello deja de ser un correctísimo CD. Y la clave de ello está en que, sin tener en absoluto las pretensiones de las últimas obras maestras de este género tan galáctico, divierte y re-divierte, lo cual a estas alturas es un detalle ciertamente importante. Mientras tanto, aunque sea con coletazos pequeñitos, los matamarcianos siguen vivos. R-TYPE FINAL es toda una bomba, el futuro GRADIUS V me ha convertido en una persona impaciente, y en cartera está el lanzamiento de PSYVARIAR 2, que tiene una pinta estupenda. ¡Queremos más!

PSYVARIAR (PS2)

c o n c l u s i ó n
Poco más se puede decir de PSYVARIAR que no se haya dicho ya, o que no se haya leído en los mil y un análisis de todo buen shoot'em up de scroll vertical. La obra de Succes es un buen juego de naves, algo humilde en sus arcaicas pretensiones tecnológicas pero todo un buen exponente del género a nivel de jugabilidad. Y con ese precio, es inexcusable no hacerse con el.

l o m e j o r

La genial idea de rozarnos con los disparos enemigos.
Es muy divertido, y ciertamente rejugable.
Selector 50/60 Hz.
Su increíble precio.
La inclusión (aunque poco esforzada) del modo 'revision'.

l o p e o r

Su apartado técnico está muy desfasado.
Las fases son muy cortas.
No soporta la comparación con los últimos exponentes del género.
Excesivo espacio mínimo requerido en la memory card: ¡780KB!

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.