Professor Layton y la Llamada del Espectro
El gran espectro de los anteriores Layton
Misthallery, una villa tranquila y tradicional, acoge el que en todo el mundo ha sido el misterio del Último Espectro. 170 nuevos puzles, más secretos por encontrar, y una historia inolvidable que ahora viaja al pasado, donde Layton y Luke se conocieron. Pero todo ello dentro de un cartucho que se ha visto recortado en su versión europea y que no acaba resultando tan sorprendente como sus predecesores.
A Nintendo DS no le quedan muchos grandes nombres en su catálogo. El protagonista profesor Hershel Layton, uno de los iconos que ha acabado marcando la segunda mitad de la vida de la exitosa portátil que introdujo la pantalla táctil en las videoconsolas, se despide de la máquina que lo vio nacer y tan bien le sacó partido para dar el salto a 3DS con The Mask of Miracle, la próxima entrega que llegará a España el año que viene en formato tridimensional. La Llamada del Espectro -o The Last Specter en el resto de continentes- es la entrega más grande en contenido de todas, aunque la versión europea llega con un inconcebible y enorme recorte en sus extras: el simulador de vida-RPG London Life, un extra que ha gustado muchísimo a los americanos, japoneses y australianos. 170 nuevos puzles, la historia del encuentro entre Layton y Luke, más retos que descargar a través de la Conexión Wi-Fi de Nintendo, o un mejor afinado sistema de ayudas y pistas son algunas de sus grandes bazas. Level 5 acaba de regalar a quienes nunca la hayan probado el mejor juego de la sobresaliente franquicia. Eso sí, una mera expansión y nuevo capítulo con no tantas sorpresas para los habituales.
"¡Es una situación Laytonesca!", exclama Emmy Altava, la ayudante de Layton, al poco de conocerla y comenzar este juego. Si familiar le resulta a la entusiasta estudiante la cantidad de situaciones, puzles y coleccionables que esta nueva entrega va disponiendo, más reconocible será el juego para los asiduos a la marca, que encontrarán en este cuarto episodio mecánicas y acertijos con peticiones y trucos rescatados de los anteriores. Esencia Layton intocable y mantenida hasta tal punto que algunos verán en este título un motivo de evaluación exigente a las laureadas historias y rompecabezas que sus desarrolladores siempre nos han regalado. La Llamada del Espectro puede hacer replantearse al fan de Layton cierto posible estancamiento a agotamiento de la formidable marca. Y eso que no falla, para nada, en ninguna de sus proposiciones, pero se ha arriesgado muy poco en innovación, nueva identidad o sorpresas, algo que los anteriores tres juegos sí nos brindaban a cada momento. Llega a repetir con frecuencia esquemas y hasta rompecabezas.
Sin lugar a dudas, esta nueva aventura gráfica es magnífica, con nada menos que 170 retos divididos en diferentes categorías de puzles más los que llegarán a través de internet semanalmente, muchos objetos a coleccionar, personajes muy bien diseñados en apariencia y personalidad, y un montón de extras y secretos para descubrir poco a poco. La pérdida del tradicional factor sorpresa es su gran handicap, lo que también se traduce en una pérdida del reto para los que vengan de las anteriores entregas, que ya conocerán muy bien los trucos a los que nos tienen acostumbrados sus genuinos creadores. Eso sí, todo jugador novel en esto de los acertijos y los misterios de la mano del detective con sombrero de copa, tiene ante sí un imprescindible absoluto de esta última hornada de joyas de DS, un juego muy inteligente y profundo que ahora también ha sabido regular mejor su curva de dificultad y ampliar su duración, con contenidos adicionales que van más allá de las 6 u 8 horas que nos puede llevar acabar la aventura central.
El principio de una amistad
Si en El Futuro Perdido nos encontrábamos con un Luke diez años más mayor, en La Llamada del Espectro se nos invita a retroceder en el tiempo, llegando hasta el momento en que el pequeño con boina azul y Layton se conocen. Esta entrega narra, flashforward y otros recursos creativos incluidos, su primera aventura juntos, y no olvida plagar de elegantes referencias a los anteriores juegos el devenir de una trama que, pese a ser algo más lenta que la sorprendente historia de La Villa Misteriosa o La Caja de Pandora, vuelve a saber cómo enganchar al jugador, que querrá descubrir el por qué de cada uno de los acontecimientos, se sentirá transportado a su soberbia ambientación y no tendrá pereza alguna para detenerse a charlar con los habituales extravagantes personajes, a cada cual más original. El argumento central esta vez nos cuenta cómo Misthallery, una imaginaria villa rural de estética centroeuropea, repleta de aldeanos supersticiosos, labores feudales y artesanas, niebla abundante, y canales y fuentes, es atacada por un extraño espectro gigantesco y negro que aparece ciertas noches al sonido de una flauta mágica. Alguien al que llaman el Oráculo tiene la capacidad de predecir cuándo atacará y un trágico destino que tiene aterrados a los aldeanos.
Layton se pondrá en camino al recibir una carta de su viejo amigo Clark Triton, habitante del pueblecito y padre de Luke. Al salir a toda prisa de Londres, una joven castaña con vestido amarillo y alegres facciones detiene su coche. Es la nueva ayudante y compañera del educado profesor, la señorita Emmy Altava, el tercer personaje central de esta tremenda aventura gráfica portátil. El jugador, como viene siendo habitual, deberá llevar al grupo protagonista a través de multitud de preciosas escenas estáticas que explorar tocando todo lo que le llame la atención, viajando por un mapa de Misthallery al completo que se desplegará en la pantalla superior y va creciendo a medida que avanzamos en el juego. La narrativa es bastante lineal, pero en La Llamada del Espectro se ha abierto un poco más y tendremos más momentos en los que tomar decisiones de caminos, puzles que marquen ciertos aspectos de la trama o personajes que nos expliquen acontecimientos desde diversas perspectivas. Como los autores de las buenas novelas de misterio, el equipo de Akira Tago, el artífice de la marca, sabrá atrapar al jugador y no soltarlo hasta que conozca el episodio final de este nuevo y peligroso enigma, contado una vez más con bastantes giros y detalles vibrantes.
Fórmula brillante pero bien conocida
Por supuesto, este factor adictivo del guión no se sustentaría sin una propuesta jugable a la altura. Entre exploración, diálogos, cinemáticas y más exploración, los personajes y algunas situaciones nos ofrecerán una vez más los rompecabezas, casi la mitad de ellos ya reconocibles de los títulos de Professor Layton anteriores. Tienen por ello un menor componente de originalidad, como los que nos piden que traspasemos animales en una barca de un lado a otro del río sin mezclar determinadas especies, los que se solucionan con juegos de palabras, los cálculos matemáticos, la colocación de vías de tren en su correcta posición, los que requieren observación concienzuda, los encajes de piezas o los laberintos. Los puzles nuevos juegan con mecánicas similares y tampoco suelen tener límite de tiempo para su resolución. Algunos sorprenden, otros no tanto. Pero son, por cuarto año consecutivo, brillantes y completamente táctiles. Sin duda, se hará trabajar nuestra mente de forma variada, muy interactiva y divertida, sobre todo en el último tercio del juego, donde la dificultad y diferenciación de los retos aumenta de forma considerable.
No obstante, Level 5 quiere que todo el mundo pueda disfrutar de esta experiencia y ha vuelto a incluir el sistema de pistas con monedas y los Picarats, puntos otorgados a cada acertijo según su dificultad y los intentos que gastemos en resolverlos. Las pistas ahora son mucho más coherentes y han perdido aquella inutilidad que tenían algunas, por ejemplo, en el primer juego. Si exploramos lo suficiente cada postal, podremos encontrar monedas suficientes como para resolver la mayoría de acertijos con alguna pista adquirida con moneda. Esto hace al juego bastante más fácil, pero no obtendermos la misma recompensa en contenidos ni la enorme sensación de satisfacción que consigue la obra a cada momento, una de las piezas clave de su éxito y brillantez. La Llamada del Espectro vuelve a ser un juego que reconforta al usuario, haciéndole sentir y contemplar el poder que tiene en su inteligencia, expresada en la astuta y tenaz personalidad de Layton, la intuición de Luke y la vitalidad de Emmy.
Estos puzles centrales nos los ofrecen los personajes descaradamente, sin pensárselo demasiado y de forma gratuita, con frases del tipo "te lo diré si primero resuelves este puzle". No todos están necesariamente vinculados a la situación que está teniendo lugar, aunque suelen guardar alguna pequeña relación como mínimo. Layton ofrece también rompecabezas cuando los recuerda ante algunos elementos, como un río o cajas de madera. Vuelve a no ser necesario superarlos y podremos almacenar todos los puzles no resueltos en el Baúl. Además, tendremos amigos, como el gatito negro que nos recoge los no activados, para poder ir organizando todos estos acertijos y pruebas y ordenarlos sin perdernos ninguno, pudiendo resolverlos una y otra vez en cualquier momento. Hay muy pocos que requieran habilidades centradas en los reflejos o la precisión, pero cuando aparecen, dan al juego cierto punto intensivo que le sienta de maravilla. Prácticamente todos son ejercicios de lógica y juegos simples donde la mirada atenta será nuestra principal llave para resolverlos. En las imágenes que acompañan a este Análisis se pueden ver algunos ejemplos.
Junto a todas estas pruebas, clave en el desarrollo de la aventura pero que podremos saltarnos la mayoría de las veces si no somos capaces de resolverlas, están los tres nuevos minijuegos que se colocarán en el Baúl y funcionan como contenido adicional coleccionable. El primero de ellos es el llamado Trenecito, un básico minijuego de construcción de vías en una cuadrícula para un tren que debe pasar por diversas estaciones, recoger combustible y acabar en la casilla roja de meta. El desafío va in crescendo a medida que recogemos más pistas de tren de algunos personajes y momentos clave. Por otro lado están los Acuarios, retos que nos piden que coloquemos burbujas de aire para hacer rebotar a un pez que debe recoger todas las monedas de cada tramo y siempre avanza en línea recta. El Teatro de Marionetas es el último gran puzle de los coleccionables y con varios niveles que obtendremos. Se basa en un sencillo minijuego de coleccionismo donde iremos obteniendo más acciones para nuestras marionetas y escenas, teniendo que elegir en cada momento qué acción deben realizar nuestras figuritas de trapo en función de los acontecimientos de las obras representadas.
Estos puzles "grandes" son algo más complejos y con reglas que los acertijos que encontraremos en el desarrollo de la trama, por ello tienen 10 niveles distintos los dos primeros y tres representaciones con otras 10 acciones el Teatro de Marionetas. Además de todo esto, en el Baúl no faltarán la habitual agenda con toda la historia resumida, los Descubrimientos, las Escenas Alternativas, el Bloc de Pistas -que sigue siendo tan pequeñito y sin dejar escribir demasiado- o el almacén de objetos interesantes, que dará cobijo a 24 items muy curiosos que buscar por los escenarios. Acabar cualquiera de las categorías de extras tiene recompensas verdaderamente importantes, teminando todas ellas en el acceso al Súper Secreto, una barrera solo al alcance de los mejores jugadores y los más pacientes, capaces de obtener el 100% de los coleccionables, puzles y retos. Además, los misterios de este Layton tampoco acaban aquí, en el Manual de Instrucciones del próximo juego (para 3DS) se incluirá un código que abrirá un acceso adicional a los mayores extras.
Pese a todo, lo comentábamos al principio, lo que no es admisible es que Level 5 haya eliminado una de las mejores y más grandes partes del Professor Layton: The Last Specter original, el modo London Life. En la versión europea, no aparece este juego a parte que nos permite crear un avatar e iniciar una vida con él en una Londres de estética pixelada, llena de personajes, trabajos, misiones y propiedades que decorar y mejorar. Muy al estilo Animal Crossing, este nuevo juego de Layton no se ha traído a nuestro continente aludiendo los problemas de localización idiomática, pues es una parte compuesta por muchas líneas de diálogo y situaciones. Podría haber venido incluido al menos en su versión original en inglés.
Más color, más suavidad, más Layton
En su escasa pérdida de señas de identidad, La Llamada del Espectro tampoco ha acabado evolucionando el precioso apartado gráfico en dibujo animado que llevó a su mejor punto El Futuro Perdido. Esta cuarta entrega mantiene el mismo estilo visual exactamente, dando un salto apreciable sobre el primer juego, pero cien por cien continuista respecto al tercero. Es una obra preciosa, un ejemplo pictórico memorable y con un gusto exquisito. La suavidad de todas las animaciones, las perfectas cinemáticas con soberbio doblaje al castellano, los detalladísimos escenarios 2D, los efectos... Todo el conjunto visual, apoyado por otro más que destacable aspecto sonoro dentro del catálogo de la portátil, es memorable. La labor de localización al castellano es intachable, con todos los textos llenos de juegos de palabras, refranes y expresiones españolas. Lo mismo con las pistas o las explicaciones de los puzles, que ahora son aún más detalladas y útiles, muy legibles y claras. Las voces de los protagonistas vuelven a no estar presentes en todo momento, solo en tramos importantes, lo que es una verdadera pena, pues lucen estupendamente.
Conclusiones
El Profesor Layton tiene una nueva historia que contarnos y cientos de misterios y enigmas para desafiar nuestro intelecto. Ni más, ni menos. La Llamada del Espectro no es un producto revolucionario o que exprima al máximo los principales logros de la sobresaliente saga Layton, sin embargo, vuelve a demostrar que funciona francamente bien, es un juego muy completo y duradero, y apto para todo tipo de públicos, desde el consumidor más experimentado y fiel al protagonista hasta el nuevo descubridor. Ahora bien, aquel que no se haya perdido ni una sola entrega del refinado investigador británico empezará a ver en este cartucho serias marcas de repetición, poca originalidad y cierto agotamiento de la fórmula. Estamos ante la entrega más larga, y eso que a la versión europea se ha recortado radicalmente, con la eliminación del juego extra London Life. Esperemos que el salto a Nintendo 3DS, con la próxima entrega, le sirva al equipo de genios de Level 5 para evolucionar ciertas partes, puzles y aspectos técnicos (como el abuso de planos estáticos o los diálogos sin voz) que lo empiezan a requerir. Habrá que seguirle la pista...
Lo mejor:
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.