Pokkén Tournament
- PlataformaWiiU7.8ARC
- GéneroAcción
- DesarrolladorBandai Namco Entertainment
- Lanzamiento18/03/2016
- TextoEspañol
- VocesInglés, Japonés
Análisis de Pokkén Tournament
El exclusivo de Wii U llega con un original sistema de combate y una sólida propuesta online. Y con el impresionante MewTwo Oscuro como nuevo e imprescindible personaje a destripar.
Contenido:
Una forma diferente de representar las batallas pokémon
El rico universo Pokémon con los desarrolladores de Tekken. Una mezcla de conceptos que no podía dejar indiferente a nadie, y que a pesar de no conseguir cosechar el éxito esperado en los salones recreativos japoneses, se convierte en uno de los nuevos títulos exclusivos a tener en cuenta en Wii U. Pokkén Tournament no será, probablemente, el videojuego de lucha del futuro, pero sí consigue ofrecer un punto de vista distinto a esto del uno contra uno clásico y se postula como una entrega que gustará, sobre todo, a los amantes del mundo de Pikachu y compañía. Así es el título cuyo lanzamiento tiene lugar esta semana en la consola de Nintendo.
Los usuarios que se planteen la compra de Pokkén Tournament deben tener clara una cosa: no estamos ante un Tekken con personajes de la Pokémon Company. Sí, detrás del proyecto están los chicos de Bandai Namco , pero el título tiene una jugabilidad que va por otros derroteros. En ciertos momentos tiene más detalles de un Budokai Tenkaichi de Dragon Ball que de un juego de lucha tridimensional al uso. Tanto el sistema de combate, que consta de dos fases, como las mecánicas de los combos, algo más sencillos y accesibles que otros videojuegos del género. Esto, sobre el papel, no lo hace para nada un juego peor, sino diferente. Lo que seguramente lo aleja de otros títulos de lucha son ciertos elementos y ejecución de algunas de las mecánicas presentadas.
Argumento
Pokkén Tournament nos ubica en un torneo mundial de Pokémon. Dicha competición se divide en distintas ligas en las que tenemos que subir en el ránking, colarnos en el torneo entre los ocho mejores e intentar ganar la liga. A posteriori nos enfrentaremos al combate de promoción y, si lo superamos, pasaremos a la siguiente liga. Tenemos cuatro ligas iniciales y una quinta de campeones que se abre más adelante. La fórmula es sencilla: jugamos tandas de cinco combates y según nuestros resultados subimos una media de entre uno y quince puestos. En cada liga empezamos de más atrás (el puesto 100 en la liga más alta) y poco a poco se nos complican las cosas por la dificultad de los enemigos.
Lo más destacado de esta modalidad, la principal para el single player, es que tendremos una historia incrustrada en medio de nuestro ascenso por las ligas Pokémon: Mewtwo Oscuro. Este personaje que tanto revuelo ha generado (la gente lo quiere como canon porque, realmente, es impactante), aparecerá interrumpiendo los combates y generando una situación desagradable para los entrenadores y sus Pokémon. La batalla para liberar a Mewtwo de este poder oscuro dará algo de interés a un desarrollo que en algunos momentos, sobre todo cuando tenemos por delante 25-30 combates antes de llegar al torneo de ciertas ligas y la mayoría de ellos no son demasiado complicados. En todo caso, estaremos bastantes horas hasta llegar a lo más alto, y siempre podremos empezar de nuevo con otros pokémons y subir sus habilidades (a medida que ganamos niveles podemos potenciar atributos del personaje).
Luchas entre Pokémon
Pero para avanzar en las ligas lo más importante es aprender a luchar, y el sistema de combate tiene muchas particularidades. Contamos con dos botones de ataque, uno de salto, uno de ataques especiales y algunos movimientos clásicos como los agarres o la posibilidad de hacer un contragolpe con un movimiento que puede incluso absorber golpes enemigos antes de lanzarse. Pero lo más destacado del sistema de combate es la fórmula de dos fases bien diferenciadas: fase abierta y modo combate. Según en cada momento contaremos con ataques distintos y nuestro personaje tendrá ventajas -o no- dependiendo de sus particularidades. A todo esto también contaremos con una barra de sinergia que permite subir nuestras características y lanzar un devastador ataque de ultrasinergia, y que además permitirá a varios de nuestros pokémon Megaevolucionar: por ejemplo Charizard Megaevolucionará en MegaCharizard X al igual que Gengar o Mewtwo, entre muchos otros . También tendremos a los pokémon de apoyo, que cuentan con varias particularidades y habilidades de ataque, defensa y de apoyo.
Fase abierta
La fase abierta es la que sirve para arrancar el combate. La cámara se ubica detrás del personaje -como si fuera un Tenkaichi- y luchamos a cierta distancia. Aquí zonear con los proyectiles y moverse con pasos laterales es clave (siempre estamos moviéndonos en relación a nuestro rival que no perdemos nunca de vista, como si estuviera marcado con Z-Targetting de manera constante) mientras intentamos acercarnos al rival. Contaremos con golpes y con un botón de arremetida que nos acerca al contrincante. Una vez damos una serie de golpes podremos pasar al modo combate, que es radicalmente distinto y se asemeja mucho más al concepto de videojuego de lucha 2D. Es cierto que esta fase tal vez se podría explotar más y no funciona tan bien como la siguiente a nivel de agilidad y posibilidades, pero también aporta elementos interesantes a la hora de luchar a distancia, saber como acercarse al rival, etc.
Modo Combate
En esta segunda fase lucharemos en un mismo plano y cuerpo a cuerpo en un espacio más cerrado. Nuestro personaje tendrá ataques bajos y ataques altos -no están presentes en la fase abierta- manteniendo la gran mayoría de habilidades o modificando algunas. Dando ciertos golpes también podremos volver al modo de fase abierta. No hay prioridad en ninguno de los dos sistemas de combate y se van intercambiando durante el transcurso de los rounds. Del modo combate seguramente lo peor es que acabamos demasiadas veces -y es cosa más del diseño de los escenarios- luchando en las paredes, algo que el juego solventa permitiendo al personaje que está en apuros escapándose cuando rebota demasiado en ella. Eso sí, saber controlar también esta parte del juego forma parte del aprendizaje.
Esta fórmula funciona de manera ágil, pero es cierto que el caos y la confusión a veces se genera de manera evidente, sobre todo en ciertas transiciones que se van dando muy a menudo a lo largo de las partidas. En todo caso, estos dos cambios de perspectiva permiten ver distintos combates. Si tienes a Lucario, la fase abierta te permite zonear de manera constante con sus proyectiles y movimientos, mientras que Machamp sufrirá de lo lindo hasta acercarse a sus contrincantes. Eso sí, el gigante musculado te quita media vida de un solo combo cuando estamos en modo melé.
Gameplay
El sistema de combos es bastante sencillo y accesible. Aprender el “starter” de cada personaje es básico, y un buen comienzo empieza por levantar del suelo (ahí sí se parece a Tekken) al enemigo con un golpe para encadenar un par de especiales más y, si se puede, el ataque Ultra. Hay que tener en cuenta que el modo sinergia -solo se lanza el mejor ataque en este estado- también cambia propiedades y combinaciones de ataques especiales y secuencias que solo son posibles en este estado. El timming no es demasiado exigente a la hora de encadenar ataques y es más cuestión de ver el momento adecuado para golpear que no de un ritmo exigente con combinaciones de un frame, por ejemplo. Saber jugar con las particularidades del juego (los combos difieren según la fase, las paredes están muy presentes, etc.) es importante, tanto como aprender las virtudes de cada uno de los luchadores. En global, el sistema de combate es muy accesible pero tiene mucha más profundidad de lo que parece, pudiendo hacer auténticos combos impresionantes con práctica y ritmo.
Charizard, Pikachu Libre, Pikachu, Machamp, Gengar, Mewtwo, Mewto Oscuro, Suicune, Sceptile, Blaziken, Gardevoir, Garchomp, Lucario, Weavile, Chandelure y Braixen. Esos son los personajes disponibles. Lo mejor de los 16 elegibles es la diferenciación entre ellos. Los dos Pikachu tienen combos y secuencias totalmente distintas, Charizard sabe atacar a media distancia, Lucario es muy equilibrado y Gardevoir tiene un abanico de posibilidades que, literalmente, juega con el rival a base de evasivas y cambios de posición. Seguramente lo más discutible es la selección de personajes. Algunos son imprescindibles, pero hay otros que podrían haber dejado espacio para otros pokémons más legendarios e icónicos. Será por opciones… en todo caso, a todo esto no faltan parejas de pokémons de apoyo que podemos equiparnos. Algunos servirán para hacer anti-aéreos a enemigos que saltan mucho, otros nos subirán stats o bajarán condiciones del rival, otros son clave para realizar combos y algún que otro tiene un ataque devastador cuando se lanza que puede ser nuestra arma secreta. Esto aporta algo de variedad y posibilidades, ya que permite personalizar la manera que tenemos de jugar. A medida que avanzamos en las ligas iremos desbloqueando parejas de pokémons (en cada ronda podemos escoger uno de los dos).
El equilibrio de personajes también puede quedar algo en entredicho sobre todo por Mewtwo y su contraparte, Mewtwo oscuro. Combos sencillos, devastadores resultados. Es cierto que el original le cuesta subir sinergia porque gasta esa barra con ciertos ataques, y el Oscuro gasta vitalidad con algunas acciones, pero ni así se quedan atrás y son realmente poderosos… y por qué no decirlo, muy divertidos de usar. En todo caso, la plantilla acaba haciéndose tal vez algo corta sobre todo para el modo liga, donde lucharemos decenas y decenas de veces y eso hará, irremediablemente, que nos encontremos frecuentemente con Lucarios o Pikachus.
Además de estas modalidades contamos también con varios extras para un solo jugador: podremos rejugar los eventos que veremos sobre MewTwo Oscuro una vez superado cierto momento de la liga y tenemos un completo modo entrenamiento: tutorial para aprender las bases del juego, modo práctica libre para ir probando ataques y propiedades, un modo para conocer los ataques especiales de cada uno de los personajes y una serie de desafíos que nos permiten conocer seis combos potentes de cada uno de los luchadores.
Multijugador y local
A nivel online podremos disputar partidas tanto clasificatorias como de exhibición (y jugar con amigos compartiendo código). Lo más destacado de este modo es que el netcode, al menos lo que hemos probado durante estas sesiones, funciona de manera correcta y sin problemas. Todos los combates que hicimos eran con jugadores de zonas europeas (como en Mario Kart te indica el país y la región) y no tuvimos problemas de lag ni nada por el estilo. El título, si no encuentras luchador en diez segundos, te manda a competir con la CPU mientras sigue buscando contrincante. Una vez da con él, pasamos al combate directamente. El sistema de puntuación permite ir subiendo distintas categorías, o perderlas en caso de caer derrotado, como es habitual en el género.
Por último, destacar que el juego permite jugar en modo local con dos usuarios pero de una manera muy particular: uno juega desde la pantalla del televisor y otro lo hace desde la pantalla del mando tableta. Esto se hace así debido a que durante la fase abierta y las transiciones la cámara siempre sigue al jugador, y sería un embrollo hacerlo, por ejemplo, a pantalla partida. Lo peor de esta opción es que el juego pasa a correr a 30 frames por segundo en lugar de los 60 cuando jugamos de manera normal. También se permite jugar en modo LAN –necesitaremos el doble de todo- para mantener los 60 frames por segundo, algo que los organizadores de torneos agradecerán aunque se necesitará una logística mucho mayor.
Apartado técnico
A nivel audiovisual, Pokken Tournament destaca por los modelados de personaje y por los 60 frames por segundo a los que funciona la acción –salvo en el modo local-. La verdad es que el título es bastante ágil y dinámico y los combos se suceden de manera hilvanada sin problema alguno. Las animaciones de los personajes, los efectos especiales y todo lo que vemos convence, aunque no sea un título con gráficos potentes ni referente en lo técnico. Es cierto que los escenarios, con localizaciones de lo más variopintas, se les echa en falta algo más de detalle. En los fondos tenemos elementos vistosos, pero en la zona de lucha –marcada por una barrera que delimita nuestros movimientos- se hace algo vacío en varias ocasiones. Con una banda sonora que acompaña sin demasiados alardes, lo mejor son los comentarios de viva voz de nuestra ayudante o durante los diálogos en la trama principal, pudiendo además cambiar las voces ente el inglés y el japonés.
El título llega en su salida con una tarjeta amiibo para desbloquear de inicio a Mewto Oscuro. Eso sí, tiene que usarse dicha tarjeta cada vez que se quiera jugar con él (el título borra su desbloqueo cuando cerramos la aplicación). Para quienes estén dudosos, no hace falta temer sobre si este personaje será inaccesible ya que los condicionantes para tenerlo fijo en plantel son simplemente ir avanzando en las Ligas Ferrum. Destacar que a medida que vamos jugando ganamos monedas para poder personalizar a nuestro entrenador con todo tipo de detalles, un extra que seguro que algunos agradecerán.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.