El mundo de las almas se escapa a los ojos de gran parte de los seres humanos. Sin embargo, una joven muchachita tiene un don especial. Un alma le acompaña y la protege... y ella lo sabe. Nippon Ichi nos relata su historia.
El mundo de las almas se escapa a los ojos de gran parte de los seres humanos. Sin embargo, una joven muchachita tiene un don especial. Un alma le acompaña y la protege... y ella lo sabe. Nippon Ichi nos relata su historia.
No es atípico de los RPGs tratar diversos temas, tales como la reencarnación, el fin del mundo con su correspondiente héroe, almas que vagan en la oscuridad que nosotros como protagonistas de la aventura tenemos que eliminar, o cualquier otro relate algo que, en resumidas cuentas, en la mayor parte de los casos nos suele conducir a la salvación del mundo.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Nippon Ichi, empresa creadora de esta trilogía de SRPGs (La Pucelle, Disgaea y este Phantom Brave, que en breve será cuatrología junto a Phantom Kingdom) ha despuntado por varias razones. No solamente la más que clarividente faceta de saber dotar sus juegos de una diversión y jugabilidad fuera de serie y muy poco común en este género, sino por un sentido del humor inherente a sus historias. No en vano, un pequeño demonio que reclama el imperio del Infierno o una joven mujercita que de mano de la iglesia tienen poco o nada que ver con los cánones más comunes que os comentábamos anteriormente.
Phantom Brave (PlayStation 2)
El éxito a nivel mundial de las entregas se ha hecho notar. Por si fuera poco, las notas que se les han otorgado en la prensa especializada -nosotros incluidos- incitan a un profundo respeto por esos sprites tan 'animados' y anecdóticos que pocas compañías se atreven a lanzar ya en una consola de 128Bits. La salida de esta trilogía se completará en Abril con La Pucelle. Hoy le toca el turno a Phantom Brave, curiosamente el último de los tres, también el más reconocido, que como veréis nos ha dejado un sabor de boca insuperable.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Ash, un joven guerrero del que nada más comenzar el juego se nos relatará brevemente su historia particular. Y es que en una lucha junto a otros dos personajes, un hombre y una mujer, son abatidos por un poderosísimo monstruo que condena sus vidas. La puesta en escena del villano de la aventura es poco más que estelar, cuando con dos fáciles golpes consigue derrotar a su inmenso enemigo y acumular, gracias a una espada que absorbe la energía obscura de sus enemigos, algo que evidentemente se ha copiado de ciertas creencias que afirman que algunas espadas legendarias de samuráis contaban con la misma capacidad.
Phantom Brave (PlayStation 2)
El amigo de Ash, aquel hombre desconocido, emplea un don curativo para salvar el alma del joven guerrero en pos de que pueda acompañar a su hija en la vida, aunque no consigue hacer lo propio con la suya. La historia nos transporta ocho años más tarde, y nos presenta a la radiante Marona, una niña de quince años que cuenta con un maldito sobrenombre de 'poseída', que ciertamente no se aleja mucho de la verdad, pues Ash es un alma que la compaña allá donde vaya. Su trabajo consiste en luchar contra esas almas que vagan por el mundo y que atacan a ciertos poblados, ya que ella es la única con capacidad de verlas.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Con esto queremos decir que realizar una comparación entre el estilo de la portátil de Nintendo y lo que vemos en nuestra negra de Sony es un error muy grave. El motor es completamente distinto por razones obvias, además de condensar unos efectos que no son capaces de imaginar los cartuchos de la Game Boy Advance. Incluso así, no os podemos negar que causen cierta impresión la primera vez que enciendes la consola y comienzas a jugar.
Phantom Brave (PlayStation 2)
La historia plenamente hablada, en la que se relata ésta, se sucede en escenarios en 2D con scroll lateral. Esto concede más calidad de texturas al juego que en anteriores versiones, aunque el excesivo pixelado de los personajes, conjuntamente a la falta de realismo de los enemigos cuando aparecen en pantalla es muy moleste. Nos referimos a la física de los juegos que tanto dolor de cabeza dio al principio en PSOne, esos pequeños fallos de pies volando o de brazos que atraviesan paredes, para que nos entendáis mejor.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Aunque esto no quita poder ver algunos elementos más que extraños. Cuando empuñamos un arma esta suele ser dos veces más grande que nuestro personaje, igual que algunos objetos de la naturaleza como los árboles, que algunas veces son del mismo tamaño de nuestros monigotes. No deja de ser algo curioso, pues en lo referente a las explosiones y demás efectos visuales el juego puede presumir de mantener una calidad media-alta durante toda su duración.
Phantom Brave (PlayStation 2)
El único punto negativo que podemos resaltar es su notable diferencia de calidad con respecto a otros juegos del género, aunque por supuesto no constan de la misma gracia que estos, y, cómo no, el no tener tantísimo Artwork como el Disgaea. Una lástima.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Están muy acorde con las exigencias del título, y no echamos en falta más variedad de tonos, pues la BSO está compuesta por dos CDs repletos de melodías que, gracias a haberlas escuchado todas y cada una, os aseguramos no requieren más de sí. Nuestros personajes, al igual que en anteriores entregas, vuelven a ser capaces de hablar, en inglés eso sí, de tantas formas como os podéis imaginar.
Phantom Brave (PlayStation 2)
El doblaje, así como los efectos de los combates, explosiones, los gritos de los personajes y las conversaciones habladas que están presentes en casi el 90% del texto que podremos leer en el juego completan este apartado, demostrando el cuidado con el que se ha tratado el CD (pues es un CD y no un DVD). Eso sí, durante los combates volveremos a tener muy en cuenta esto de la variedad... pues por lo general la melodía no cambia, sino que se repite una y otra vez.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Marona no sabe pelear, al menos no es su especialidad, por lo que son los espíritus que la acompañan el principal atractivo. Al comienzo de cada escenario, en vez de tener que seleccionar una casilla en particular para un héroe, tendremos que 'confinarlo' dentro de un objeto de la naturaleza, ya sea un árbol, una piedra, una estrella de mar... y así sucesivamente. Claro que en este punto nos encontramos ante dos variantes muy importantes:
Phantom Brave (PlayStation 2)
Por un lado los espíritus varían sus cualidades según el objeto. Una piedra, por ejemplo, nos proporciona más fuerza y resistencia, pero mucha menos sabiduría, rapidez o inteligencia, mientras que un árbol se relaciona con todo lo contrario, y así sucesivamente. Nuestros combatientes pueden ser de todo tipo, desde monjes hasta herreros, y sólo por nuestra mano pasa cómo crearlos.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Además, los movimientos y turnos que podemos usar estos espíritus son limitados. Por ejemplo: Ash no resistirá más de seis o siete turnos al comienzo, aumentando este nivel progresivamente a medida que vamos subiendo de nivel. Cuando toca el turno y ya no puede desplazarse más, simplemente desaparece. Podremos invocar tantos espíritus como queramos a lo largo de las batallas, pero es de fundamental uso el hacerlo correctamente y pensando en nuestras propias necesidades... con la posibilidad incluso de combinar diversos trabajos para obtener mezclas, como un mago guerrero.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
De resto, o por si esto os parece poco, no ha cambiado demasiado el panorama. Podremos obtener armas (casi fundamentales) y usarlas en los combates, aunque tendremos que ir aprendiendo las técnicas de cada una hasta dominarlas para usarlas en nuevas espadas -o hachas, lanzas, martillos- que a priori no las tengan. Por su puesto podemos seguir levantando a nuestros personajes, compañeros o no, asó como diversos objetos del escenario que en más de una ocasión nos resolverán la partida.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Por último, y como última novedad también, el campo de acción dentro de las batallas se ha mejorado de forma radical. Ahora no tenemos cuadradito, sino que podemos movernos de cualquier modo siempre teniendo en cuenta el margen de puntos de movimiento que tenemos. Esto sin olvidar en ningún momento que siguen importando el lugar, altura etc. en el que nos encontremos para golpear a nuestros enemigos.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Los poco duchos en los SRPGs podrían tener alguna que otra complicación para entender el género y el sistema, no por su complejidad, sino porque el juego no se haya traducido ni doblado al castellano. Tened por seguro que es más fácil que Disgaea, aunque a la larga, igual que casi todos los de este estilo, se hace realmente complicado, y los combates tienden a ser tan variables e inesperados que estaremos casi obligados a repetirlos en más de una ocasión. Algo que, por supuesto, alarga aún más la vida del juego.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Phantom Brave (PlayStation 2)
Tenemos la sensación de estar ante el 'sumun' de la trilogía de Nippon Ichi de la que os hablábamos, pues se incorporan todos los apartados positivos, añadiendo alguno que otro nuevo. Un obligado para todo aquel que disfrute jugando con un buen juego táctico, con un RPG, o con los animes. Eso sí, exigentes a nivel técnico abstenerse, no es un juego que entre por las vista, precisamente, por su increíble calidad en ese apartado.
Phantom Brave (PlayStation 2)
Lo Peor
8.8
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.