PES 2014
- PlataformaPS38.33608.3PSPPC8.3
- GéneroDeportes
- DesarrolladorKonami
- Lanzamiento19/09/2013 (PS3, 360, PC)07/11/2013 (PSP)
PES 2014
Con un renovado motor gráfico, Pro Evolution Soccer acaba la generación de consolas proponiendo unas nuevas bases en esto del fútbol virtual. Se abre un camino a un futuro con esperanza para la saga.
Han adelantado la temporada regular en España con la primera jornada a mediados de agosto. Pero el fútbol virtual sigue fiel a sus fechas y no es hasta estos últimos días de septiembre que da el pistoletazo de salida. Como viene siendo habitual, Pro Evolution Soccer es el primero en pisar el césped con una propuesta esperada por muchos. Si el año pasado dijimos que PES 13 cerraba un ciclo para la franquicia de Konami, esta nueva entrega hace lo contrario: abrir un nuevo camino hacia la gloria eterna. Cambia el motor gráfico, cambia PES. Todo por el fútbol en una entrega que llega esta semana a PC, Playstation 3 y Xbox 360. Diversos establecimientos ya lo tienen a la venta.
La saga de fútbol de Konami es archiconocida por todos. De hecho, la relación en sí entre la compañía japonesa y el deporte rey en nuestro país ha sido fructífera desde hace muchos años. Los International Superstar Soccer de Super Nintendo y Nintendo 64 eran jugabilidad en estado puro, y eso se trasladó con los ISS en Playstation. Ahí empezó a gestarse la que sería la mejor serie de videojuegos de fútbol de la historia, consolidado en la pasada generación de consolas con Pro Evolution Soccer 3 y 5. Dos títulos inolvidables que transmitían fútbol como pocos habían conseguido tiempo atrás. Pero llegó la nueva generación de consolas y con ella, las dudas para Konami. No supieron cambiar a tiempo algo que, creían, no necesitaba cambiar.
Las entregas en alta definición de la saga Pro Evolution Soccer ha ido dando tumbos en sus primeros compases. Una actualización HD con PES 6 para Xbox 360, cambios drásticos y poco acertados en las versiones 2008 y 2009, un 2010 que empezaba a retomar el rumbo perdido y una serie de entregas que culminaron con PES 2013, lo mejor que la compañía japonesa podía hacer con las herramientas con las que trabajaba. Un punto y final a un tipo de juego divertido, con elementos más que notables pero alejado de sus mejores días de gloria por culpa, principalmente, de un motor arcaico que literalmente no daba para más. Y aquí entra PES 2014, un título que cuenta con una base totalmente distinta, y que por tanto no puede ni debe compararse con lo que hemos visto hasta ahora. Es un nuevo inicio, un camino que empieza de cero. Con sus virtudes y sus defectos.
El anuncio de Hideo Kojima y su nuevo motor FOX Engine estaba destinado a imaginar cómo podría ser una nuevo Metal Gear Solid con esta tecnología. Pero la alegría se trasladó a los amantes de los juegos de fútbol cuando descubrieron que el equipo de desarrollo de la saga PES utilizaría dicho motor para sustituir las vetustas herramientas que habían usado hasta el momento. Finalmente, un motor adaptado del original de Kojima es el que ha servido para cambiar la cara a Pro Evolution Soccer 2014. Se ha mejorado en muchas facetas, sobre todo aquellas por las cuales la saga era objeto de crítica. Pero también tienen un largo recorrido por hacer. La primera no podía ser perfecta, como es de lógica. Y de hecho, la sensación que da PES 2014 es que los tiempos se le han hecho cortos, y los desarrolladores hayan ido justos para la salida del título. Solo hace falta ver cómo de distinto y mejorado está la versión final respecto a las previews que pudimos probar en ferias, que recibimos a mediados de julio o incluso comparado con la demo pública que salió no hace demasiado. Diferencias importantes. A mejor.
Donde encontramos cambios es en el sistema de defensa. Se mantiene el sistema que nos permite mantener tipo contención a nuestro contrincante dejando pulsado A/X. Si damos dos veces dicho botón, hacemos la entrada normal. Con el botón de centro hacemos las clásicas segadas o entrada más agresiva, y con el de disparo pedimos ayuda para que dos compañeros extras hagan presión a quien tiene el balón (pudiendo así tapar huecos con nuestro jugador). Hasta aquí todo normal. Pero se han metido nuevas funciones que permiten presionar y bregar con los rivales.
Si vamos al sprint y dejamos pulsado A/X, el jugador se pegará a su contrincante y empezarán a chocar hombro con hombro, molestando las acciones que pueda realizar. En otro caso, mientras hacemos "contención" con A/X se ha añadido la posibilidad de blocar el balón: si apuntamos con el analógico izquierdo hacia donde creemos que irá el esférico, cuando el rival haga un pase, centro o disparo nuestro defensa estirará el cuerpo y/o la pierna para cortar la acción. Muy útil para acabar con centros peligrosos. Por último tenemos la carga con el hombro. Haciendo el choque mencionado anteriormente, con el analógico derecho apuntando al rival le daremos un empujón para intentar ganar la posición. En general, lo cierto es que las novedades aportan mucho “fútbol” por el contacto, intercepciones y luchas que ofrece. Además, las presiones y contención que se puede realizar hacen que en defensa, PES 14 sea un juego de lo más completo aunque se echen en falta algunos movimientos de la línea en general más inteligentes en algunos casos, sobre todo en tema de laterales.
También en ataque el nuevo juego de Konami propone mecánicas que intentan ampliar la sensación de control total sobre lo que hacen nuestros jugadores. El sistema de pase y disparo manual con el gatillo izquierdo que permitía apuntar donde quisiéramos mandar el balón sigue presente y es una herramienta ejemplar, llena de posibilidades. A esto se ha querido mejorar el tipo de disparo y de pase en profundidad con el mecanismo “avanzado”. Básicamente se trata de poder apuntar y medir qué queremos conseguir con nuestro movimiento. En el caso del pase, una vez empezamos a pulsar el pase al espacio una redonda nos marca donde irá el balón. Podemos hacer trazos complejos, no simples pases rectos, pero si nos pasamos un instante más de la cuenta el balón se irá fuera.
Es complicado de controlar al inicio, y no tiene tanta efectividad como el pase en profundidad automático de toda la vida, pero ofrece mayor libertad y más posibilidades. De hecho, si pasamos a jugar con el pase normal de toda la vida la sensación es que este PES no se ha diseñado pensando en dicho pase. Con el disparo avanzado pasa algo similar. Con el analógico izquierdo apuntamos donde queremos que vaya el chut mientras pulsamos la potencia. No tiene la libertad del manual, sino que se apunta con precisión dentro de los marcos de la portería. Pulsando a los lados y atrás, mandamos la pelota a ras de suelo por ejemplo. El sistema tiene cosas buenas, como los disparos rasos, pero otras no tanto: casi siempre acabamos apuntando a las escuadras, y no es raro acabar cada partido con diversos postes. Además, esta mecánica provoca que a veces los jugadores hagan disparos extraños, poco verosímiles dentro del área, buscando una escuadra en posición poco natural, etc. La idea es buena, aunque seguramente le falta darle una vuelta más.
Otra función vital en ataque es poder señalar a los jugadores de la CPU para que se desmarquen hacía donde deseamos, aunque sigue pareciendo algo engorroso tener que pulsar un botón, apuntar, dejar de pulsarlo. PES 2014 mantiene un buen abanico de fintas y regates, entre los que destacan movimientos al primer toque para hacer un amago y girar hacía donde queremos. Movimientos como los sombreros, autopases de espaldas o la croqueta clásica de Iniesta están presentes, pero han perdido efectividad respecto a la anterior edición, siendo movimientos estéticamente bonitos pero no tan letales. Solo para momentos puntuales, como debe ser. Junto a ello, marsellesas, bicicletas, elásticas y un largo etcétera entre lo que destaca el clásico recorte marca de la casa con la secuencia disparo-pase.
También en tareas ofensivas se ha mejorado el sistema de contacto con el rival. En este caso, cuando intentamos escaparnos y se nos acerca un jugador, podemos usar el analógico derecho para, apuntando al defensa, intentar apartarlo con los brazos. Destacar en las escapadas que pulsando dos veces el botón de sprint hacemos un arreón para marchar hacia portería. Necesario, ya que el juego tiene un sistema con ciertas mecánicas poco pulidas: los defensas parecen tener un “turbo” cuando recuperan posición contra un jugador que escapa en solitario con el balón. Cierto es que sin pelota se corre más, pero hay situaciones irreales: jugadores como Neymar o Ronaldo marchando a toda velocidad y defensas de corte lento, tipo Puyol, alcanzándoles sin problema.
A esto se añade también una mecánica extraña de los atacantes, que tienden a frenar excesivamente en los controles facilitando la llegada de rivales. Cierto es que hay un “control perfecto” para aguantar el balón de manera ideal, pero a pesar de ello la transición en estas situaciones no acaba de estar bien hilvanada. Es un defecto general del título, que presenta unos jugadores tremendamente lentos de movimientos cuando tienen el balón en los pies y quieren cambiar de dirección, girar o pisarlo con RT/R2. Las animaciones en sí son buenas, nada robóticas, pero su ejecución es lenta y rompe el ritmo de partido cuando el balón está corriendo. Pausado, realista y en su tiempo justo salvo en conducciones lentas (sin sprint) y movimientos que implican un giro desde el eje del jugador.
Seguramente es su principal contratiempo en lo que jugabilidad se refiere, que a veces no encaja del todo bien los movimientos veloces y de balón con los que los jugadores ofrecen con el balón pegado al pie. Que no se malinterprete, la conducción es buena, pero a la que se cambia la dirección se provoca dicha lentitud de movimientos. . En algunas refriegas hombro con hombro también se transmite esta sensación de ir a un ritmo más lento que el resto de juego. Falta mejorar estas transiciones y el dinamismo de estos movimientos para que todo funcione a buen ritmo, sin fisuras. De eso trata también el hecho de ser un punto de partida. Que hay margen de mejora… desde una buena base.
La pelota, simplemente, está recreada de manera brillante. Todos sus movimientos desprenden realismo y se ha ajustado su reacción a cada situación. Además, sigue siendo protagonista de la llamada aleatoriedad de situaciones de la que siempre ha hecho gala PES. Está viva, es independiente y si un jugador se equivoca en un control, puede pasar de todo. Como en el fútbol. Un rebote, un pase demasiado largo, una entrada mal medida… y el balón hará de eso, balón, para generar situaciones de todo tipo, distintas entre sí. Mención especial en disparos fuertes y disparos rasos, donde se ve verosímil y sólido.
La figura del portero es otro elemento a tener en cuenta. El motor del juego ha permitido ofrecer un compendio de animaciones realistas e interesantes a todos niveles, y eso significa que los guardametas han recibido su parte. Veremos algunas paradas que recuerdan tiempos pasados, y muchas otras nuevas, como grande estiradas a ras de suelo para detener balones ajustados a la base del poste. Visualmente, son convincentes también en salidas por alto. Pero tienen problemas que no son nuevos, como una excesiva facilidad para encajar goles a priori sencillos y seguir dejando demasiados balones sueltos dentro del área ante disparos que seguramente no lo son tanto.
Pero lo realmente interesante es el sistema de “combinaciones”. Podemos elegir tres tipos de estrategia combinada que se hacen en tiempo real: cuando pisamos una zona del campo, pulsando dos veces el gatillo se activa una serie de movimientos predefinidos entre tres jugadores. Arrastrar para que desdoble uno por banda, pivotar con el delantero centro para abrir al otro lado, movimiento de pase al espacio y centro raso desde la línea de fondo, cambiar de banda… es interesante aprenderse los automatismos para hacerlo con éxito. Pero cuando una sale bien es muy satisfactorio. También ha cambiado la manera de lanzar los libres directos y córners, con un nuevo sistema que permite calcular trayectorias, efectos y demás antes de que salga el balón del pie del lanzador.
La apuesta por las competiciones sudamericanas sigue dando sus frutos, y los usuarios de dicho continente estarán de enhorabuena ya que además de otra nueva edición de la Libertadores (de nuevo con equipos que solo pueden jugar entre ellos) y la presencia de la liga brasileña se han sumado al completo las ligas argentina y chilena. También destaca el atractivo de la Champions League asiática y la larga lista de selecciones nacionales –muchas de ellas sin licenciar, eso sí- disponibles. Contenido hay, pero no seguramente el que más espera el jugador europeo.
Junto a la liga BBVA, la francesa y la italiana, tenemos una liga inglesa con tan solo el Manchester United licenciado, Portugal con cuatro conjuntos licenciados y un resto de Europa en el que hay diversos equipos importantes. Y ausencias igual de destacadas, como el Borussia Dortmund, vigente subcampeón europeo por citar un ejemplo. Cierto es que los Option File cubrirán el hueco, y más ahora con alguna liga falsa extra que se ha integrado, pero a nivel europeo sigue teniendo una cuenta pendiente en este apartado. Y cuando la diferencia de juego era abismal, las licencias eran un mal menor. Pero con títulos de gran calidad enfrente, ya no es algo tan liviano. Todo esto implica que licencias potentes como la de la Champions League o Europa League queden deslucidas con el North London de turno jugando dicha competición.
Es en este punto donde gana enteros un editor que a pesar de no poder tocar los estadios, permitirá que los Option File sean algo más completos. Por ejemplo, esta vez hay disponibles tres ligas y la liga de segunda división, algo que da más margen para meter más ligas de golpe que en anteriores ediciones. En las ediciones de equipos podremos añadir hasta cuatro camisetas, y como viene siendo habitual hay un gran abanico de posibilidades para toquetear a los jugadores tanto a nivel de habilidades como a nivel físico. Viendo la falta de caras “reales” en esta entrega y lo genérico de muchas de ellas, será necesario.
El modo Ser Leyenda está presente con el control del portero como principal reclamo para PES 2014. Poder jugar como guardameta y realizar los movimientos y acciones clásicos de esta “especie aparte” dentro del mundo del fútbol completa así la posibilidad de pasar por todas las posiciones del campo. De hecho, el juego ha incorporado todo tipo de controles para poder usar al portero de turno y de paso dar órdenes sobre acciones que deben realizar nuestros compañeros de campo. Konami ha decidido recuperar el modo liga –con sus Copas y competiciones europeas- que desapareció la temporada anterior, y además de todo esto tenemos partidos amistosos y un modo entrenamiento con dos subtipos: tutorial y entrenamiento libre.
Por último, toca hablar del tema de las modalidades online. Debido a que no se activan hasta finales de esta semana (19 de septiembre) nos ha sido imposible comprobar el rendimiento en línea. La experiencia también nos dice que probarlo tampoco sería algo definitivo, ya que hemos visto en diversas ocasiones cambios de rendimiento mediante parches después de las quejas de los usuarios. Sobre el papel, es de agradecer un sistema de filtrado para poder equilibrar partidos y no tener que jugar siempre contra el Madrid de turno, la posibilidad de jugar once contra once, tres niveles de apoyo de pase para igualar a los jugadores que jueguen con más dificultades y un nuevo sistema anti trampas para los que abandonen a tiempo. Todo para amistosos, torneos y liga master online.
La recreación de un partido de fútbol también tiene su enjundia. El ambiente con bengalas y aficionados botando en estadios sudamericanos es impactante, aunque solo sea en la introducción. Los jugadores recreados fielmente lo son con todo tipo de detalles, pero hay demasiados genéricos que están muy alejados de parecerse aunque sea un poco a los verdaderos. Además, se ha eliminado cualquier otro factor meteorológico que no sea el buen tiempo: ni lluvia ni nieve ni nada por el estilo. La recreación de los aficionados, pixelados y poco detallados cuando estamos ya en el partido, tampoco es un punto a favor precisamente para un juego que luce bien en términos generales, y de manera excelente si entramos la detalle de los jugadores, sus animaciones y sus encuentros.
El apartado sonoro cumple, pero sin grandes alardes. Mientras Carlos Martínez aporta su pasión en muchos momentos del juego, seguimos pensando que la saga desaprovecha a Maldini, una eminencia del fútbol internacional que está en PES comentando jugadas y haciendo apuntes que no aportan nada de su gran bagaje. Los cánticos acompañan perfectamente, algunos inventados que no pasan de suficiente, y en general el público silba las acciones polémicas. Sea en casa o fuera, sin discernir demasiado en este aspecto. La banda sonora es escueta y con una selección discutible (Guajira Guantanamera) a la que se han añadido algunos clásicos como Nessun Dorma.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.