Lucha en estado puro... y en español

ONE es lucha callejera, en cualquier parte, contra cualquiera. Desarrollado íntegramente por un estudio español afincado en Barcelona, Digital Legends Entertainment, es la apuesta más fuerte de Nokia por llevar lo mejor de los juegos de lucha a su consola.

Con ONE hemos hecho un exhaustivo seguimiento que incluye avance, impresiones y una entrevista con Xavier Carillo, Presidente de Digital Legends. Además puedes verlo en movimiento en este video.

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Y ONE, el título más esperado por los n-gagers de todo el mundo, el primer título de lucha en tres dimensiones de la portátil finlandesa, el que mejor explota el hardware de la máquina, está por fin en el mercado. Quién le iba a decir a ese estudio afincado en Barcelona allá por el año 2003, cuando coincidieron con la gente de Nokia en unas jornadas organizadas por  la Escuela de Ingeniería La Salle y poco después comenzaron a trastear con las librerías de la serie 60 y a portar sus desarrollos de PC a la N-Gage, que un par de años después tendrían en el mercado el título más avanzado técnicamente de dicha consola .

Fruto de aquellos inicios, Digital Legends empezó a trabajar como first party de Nokia en un título exclusivo para su máquina de videojuegos que vendría a marcar un antes y un después a la hora de aprovechar el potencial del hardware. Objetivo logrado: a nivel técnico ONE es inmejorable, un título puntero en N-Gage y de lo mejor que hemos podido ver a nivel gráfico en una portátil, en cuanto al género de los beat'em up se refiere, por supuesto.

ONE es único por varios motivos: el primero porque ha sido íntegramente desarrollado en nuestras fronteras y el software patrio, que no atraviesa su mejor momento, debe demostrar que está al mismo nivel que el del resto del mundo. En segundo lugar, viene a exprimir al máximo las capacidades del chipset gráfico de N-Gage y decir que ejecuta a la maravilla complejos trucos técnicos que pocas veces se ven en las máquinas de bolsillo. Y tercero porque sus opciones multijugador y los ránkings dinámicos basados en nuestra habilidad como luchadores funcionan a la perfección. Aun así, vayamos paso a paso, ya que no todo es perfecto...

Y es que en Digital Legends, como privilegiado first party, han tenido la oportunidad de contar con un equipo de expertos en artes marciales y distintos tipos de técnicas de combate, acrobacias, impactos y caídas para hacer las capturas de movimientos. Estas técnicas aplicadas a títulos de lucha muchas veces no tienen la fluidez necesaria para hacer que los personajes parezcan vivos (léase Mortal Kombat), pero ONE está suficientemente optimizado para que no se noten los tránsitos y las pausas habituales al encadenar los movimientos. Un 10 en ese aspecto.

Las técnicas para recrear los escenarios y personajes son totalmente punteras en PC y su transformación para la máquina de Nokia hace que las 3D de ONE sean brillantes. Técnicas de skinning para recrear las miles de posibilidades de personalización de los avatares, iluminación y sombreado dinámico que permiten unos efectos lumínicos a la altura, texturas que usan normal mapping para hacer que los personajes simulen su contorno y que tienen un peso específico, que hace que parezcan pesados a la vez que ágiles... La tecnología más avanzada aplicada en una máquina que mucohs creían limitada a la hora de ejecutar ciertos aspectos. Que vean ONE en movimiento para creerselo...

Los más de 25 personajes que vienen de serie en la tarjeta de memoria no tienen un diseño especialmente logrado y no gozan ni por asomo del carisma que se han creado los caracteres de los grandes del género. Realizados con el mismo editor que tenemos a nuestra disposición para fabricar nuestro avatar, tienen unos diseños mejorables. Afortunadamente, la recreación de los escenarios es esplendorosa y aunque su tamaño sea más limitado del que pueda parecer en principio, su grado de detallismo, las fuentes de luz, el diseño y la selección de las ubicaciones no nos parece más perfecta para ambientar un juego de lucha. Desde un tejado de Barcelona hasta un carguero en el Golfo Pérsico, pasando por una playa dominicana, un tatami japonés, una calle de Hong Kong o una base austral.

En el lado negativo podríamos decir que ONE es tan potente a nivel gráfico que en ocasiones nuestra N-Gage sufre al moverlo. No hablamos de ralentizaciones, inexistentes, sino de pequeños saltos al virar la cámara del juego. A la máquina le cuesta mover con soltura el gran despliegue gráfico que hay en pantalla y se nota que le cuesta horrores trabajar bien con todo. A pesar de ello, hay que ser muy purista para darse cuenta y menospreciarlo por ello.

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En cuanto a los combates, el número de samples es lo suficientemente variado, a la par que bastante neutro, para que no nos cansemos de oír los infinitos golpeos que vamos a ejecutar. Cada tipo de terreno muestra su propio sonido, así como cada golpe y aunque en la variedad está el gusto, y siempre podría haber más, los fx alcanzan un nivel más que notable.

El editor es bastante lento y tarda en cargar cada combinación o al ir probando los colores con los que podemos variar cada elemento. Además, la memoria es limitada y si ponemos una gorra al personaje tras haber elegido un peinado, si decidimos quitar la gorra el peinado que tendrá el personaje será el que viene por defecto, no el previamente elegido, lo que puede hacer que estemos más tiempo del previsto configurando a nuestro alter ego. Un punto mejorable.

Finalmente tenemos el modo historia; bastante más largo y complicado que en otros juegos de lucha mayores, esta modalidad tiene cuerda para rato y nos permitirá ir desbloqueando nuevos personajes, escenarios, combos y accesorios que utilizar en los otros modos o con los que mejorar a nuestro personaje. El argumento en sí no es muy interesante, digamos que está al mismo nivel que en otros juegos de lucha, lleno de diálogos sin mucho sentido y de las eternas amenazas entre luchadores rivales.

Cada posición tiene sus puntos fuertes y débiles y en algunos combates del modo historia nos veremos obligados a usar una u otra para alzarnos con la victoria. Por su parte, los enemigos también las usan aunque suelen permanecer fieles a su estilo y si son unos troncos buscarán continuamente agarrarnos, mientras que si son ágiles serán más ofensivos. En este punto encontramos otro problema con ONE y es que los estilos de lucha son muy limitados: mejor dicho, no hay. Todos los luchadores tienen las mismas combinaciones de movimientos, es lucha callejera sin más. No hay luchadores que hagan sumo, otros que sean karatekas, wrestlers o kick-boxers. No. Todos pelean a lo mismo y esto limita bastante la variedad y jugabilidad.

Además el sistema de bloqueos, contras y el de agarres son bastante ineficientes y difíciles de controlar, por lo que el título pierde en dinamismo, en velocidad, en gancho. Estas deficiencias además del complicado timing para los combos y de la ausencia de estilos diferenciados pesan mucho sobre la jugabilidad y con ella la diversión que ofrece, haciendo que un juego que podía ser sobresaliente se quede tan solo en notable. 

A través del portal de juego online de Nokia podemos enviar invitaciones y retos a otros jugadores para que podamos quedar con ellos y enfrentarnos (en red local, que quede claro) el uno contra el otro. Además están previstos sorteos y premios oficiales para los mejores luchadores lo que siempre es una buena iniciativa para seguir jugando.

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La base es buena y nos agrada enormemente que un estudio español haya contado con todo el apoyo de Nokia para crear el primer título de lucha en 3D para su portátil. Y el resultado es bastante bueno, pero no por ello podemos obviar que es mejorable. Y eso es lo que esperamos, que en un futuro la gente de Digital Legends optimice la jugabilidad para tener un título sobresaliente. Esta vez se han quedado cerca.

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