NBA Live 10
- Plataforma3608PS38
- GéneroDeportes
- DesarrolladorEA Sports
- Lanzamiento08/10/2009
- EditorElectronic Arts
El baloncesto según EA Sports
El eterno enfrentamiento entre dos grandes potencias vuelve a plasmarse en el mundo del videojuego. Esta vez la batalla se disputa en las canchas de baloncesto, y Electronic Arts viene con la asignatura bien aprendida. Casi preparados para dar un golpe de efecto con las apuestas totalmente en contra de su la decana saga baloncestística, NBA Live 10.
Cada vez queda menos para que el balón comience a botar en la mejor liga baloncestística mundial y, a diferencia del fútbol, los aficionados al deporte virtual podrán disfrutar de las mejores jugadas antes de que Pau Gasol y compañía comiencen a defender su título de campeones. Pronto veremos como Kobe se vuelve a levantar mientras los defensores se cierran sobre su posición, como Le Bron recorre el campo como una gacela o como Dwight Howard machaca el aro como si fuera fácil. Pero primero lo viviremos en NBA Live 10, el remozado juego de Electronic Arts que parece haber aprendido de todos sus errores para ofrecernos la mejor experiencia deportiva posible.
La historia de esta franquicia es similar a la de la otra gran saga de la compañía canadiense. Nació hace más de una década para convertirse en la referencia de su género, siguió creciendo hasta que comenzó una caída libre con la entrega del año 2006, que le hizo perder toda credibilidad. Ahora mismo NBA Live está en proceso de recuperación de su trono, aunque desde ya podemos decir sin temor a equivocarnos, que este no será el culmen de la saga.
Los chicos de EA Canada lo tenían claro a la hora de ponerse con la nueva entrega: había que centrarse en mejorar la jugabilidad para hacer los partidos más reales. Todo ello pasaba por mejorar las animaciones y la fluidez de movimientos de los jugadores sobre el campo, mejorando las transiciones entre animaciones y optimizando los fallos que presentaba la edición de la temporada pasada. Estos objetivos se han cumplido en su mayor parte, por lo que podemos decir que estamos ante el NBA Live con el aspecto y ritmo de juego más cercanos a la realidad que hemos visto.
La clave de todo ha sido encontrar una nueva piedra angular para el sistema de juego, la defensa. En anteriores entregas no era raro ver como un jugador hábil recorría el campo para acabar con una espectacular canasta. Eso se acabó. Ahora es más fácil defender cada jugada, e incluso la inteligencia artificial es capaz de estar a la altura, robando e interceptando balones. Esto desemboca en que ante cada ataque debemos plantearnos la solución a la trampa defensiva de nuestro rival, exigiendo mucho más para conseguir los dos (o tres) puntos, pero también proveyendo de una mayor variedad de situaciones a cada partido.
Este cambio en la jugabilidad se refleja además de en el ritmo de los partidos, en el esquema de botones sobre el mando. La modificación más obvia es el hecho de que encontremos únicamente un botón de tiro para todos los menesteres. Da igual que tratemos de hacer una bandeja que un tiro en suspensión o un mate. La clave para realizar unos movimientos u otros no reside en la aleatoriedad o la cercanía a la canasta, sino en la combinación con el botón de turbo y el stick analógico izquierdo a la hora de encarar el aro. Es decir, una vuelta a los orígenes que se confirma con la vuelta de la mecánica de tiro más usada en el género. Y es que las probabilidades de encestar dependen del punto de nuestro salto en el que soltemos el botón. Clásico, pero infalible.
Los cambios en la jugabilidad no se quedan ahí, sino que llegan más allá. Por ejemplo el juego en el poste bajo ha reducido ahora su importancia, hasta desaparecer el botón de dar la espalda a los rivales. Esto ha hecho que el abanico de movimientos en esta posición también disminuya, limitándose a unas cuantas fintas controladas con el stick analógico derecho. El sistema de pases también se ha retocado, permitiendo una mayor libertad a la hora de soltar el balón con nuevos movimientos y posibilidades.
Lo que si se ha aprovechado era el sistema de pick & roll de la anterior entrega. Este nos permite directamente controlar al jugador que bloquea, haciéndole desmarcarse, abrirse para un tiro lejano, etc En este aspecto se agradece que el sistema de ADN permita que cada jugador realice con mayor soltura y frecuencia sus movimientos más comunes sobre las canchas reales.
Todos estos pequeños y sutiles cambios contribuyen a crear una jugabilidad mucho más realista y cercana a los partidos reales, pero por desgracia no acaban de ser completamente fidedignos. Parece que la gente de EA Canada no ha tenido tiempo de optimizar algunos aspectos de la inteligencia artificial de los jugadores, restando credibilidad a ciertos lances del partido. Un buen ejemplo es la tendencia a poner un pie fuera de la cancha antes de recibir el balón, pero podríamos seguir con la tendencia de los jugadores al estatismo ante un balón perdido o el hecho de que en ocasiones la pelota atraviese mágicamente partes del cuerpo de nuestros jugadores al intentar interceptar un pase.
En general podemos decir que estamos ante una evolución para bien de la saga de baloncesto de Electronic Arts en lo referente a su jugabilidad. Mantiene todas las opciones tácticas y añade un nuevo ritmo de juego y un sistema de control que requieren trabajarnos cada jugada. Se mantienen ciertos detalles de la anterior entrega como el pick & roll o el stick de filigranas (con menos importancia), pero mayormente se juega de una manera distinto a como podríamos estar ya acostumbrados por la entrega de 2009.
En el podremos revivir la temporada completa de nuestro equipo favorito, siguiendo todas las vicisitudes que viva la franquicia. Desde las lesiones a los traspasos, sin olvidarnos de las rachas personales de los jugadores o la moral del equipo. Puede resultar interesante, sobre todo para los fanáticos de cada equipo, pero lo cierto es que resulta algo limitado para le resto, puesto que nuestro control es un tanto limitado, ciñéndose únicamente a los partidos. Además está el hecho de que la temporada regular de la NBA no empieza hasta el 27 de octubre, por lo que deberemos esperar algo más de una quincena para poder disfrutar de este modo de juego.
En el resto de modalidades de juego en solitario podemos decir que prácticamente no hay novedades en el horizonte. Será el modo Dinastía al que más tiempo dediquemos, puesto que además de permitirnos jugar la temporada de nuestro equipo, nos permitirá meter mano en el equipo, ya sea fichando, contratando personal, entrenando a nuestros jugadores (con los mismos minijuegos que en la anterior entrega)...
Por su parte el campeonato del mundo de la FIBA ha mejorado ostensiblemente, no con un rediseño, sino con un aumento importante de las selecciones representadas, que ascienden hasta las 32 disponibles. No sabemos si las plantillas de los combinados nacionales se modificarán durante la temporada, pero en la versión a la que teníamos acceso figuraban algunos errores de bulto como puede ser la presencia de Jiménez en el quinteto inicial de la roja'.
Menos tiempo dedicaremos posiblemente a los modos playoff, que elimina la temporada regular para ponernos directamente en las eliminatorias finales, o el fantasy Team, donde podremos hacer nuestro equipo de ensueño para luego jugar con él. Sin duda opciones menores, pero que contribuyen a añadir algo de variedad respecto a la posibilidades jugables de NBA Live 10.
Por otra parte, encontramos el Adidas Live, en el que tendremos que elegir un jugador de la NBA para pasar a un partido cinco contra cinco con cada jugador encarnando a una estrella. Una gran idea, pero que se queda pequeña en comparación con las posibilidades disponibles en el ya mencionado FIFA 10. No habría estado mal poder crear un jugador y hacerlo evolucionar, llevándolo a lo alto de la NBA en compañía de unos amigos. Posiblemente esta mejora se la guarden para la entrega del año que viene.
También deberíamos destacar el trabajo realizado con el público, que consigue reaccionar de manera dinámica a la evolución de cada partido. Sólo hay que prestar atención al bullicio creciente en los momentos de tensión, que se nota incluso en los movimientos de los modelos individuales. Podemos decir que en esta ocasión el público parece vivo.
Ambas versiones son prácticamente idénticas en todo momento, con la salvedad de que el framerate es ligeramente menos fluido en la versión para la consola negra de Sony. Salvando esa pequeña distancia, muchas veces imperceptible, estamos ante dos juegos con las mismas opciones y posibilidades.Las aspectos sonoros no desmerecen la buena tónica general, pero distan de ser perfectos. Esto es así por la variedad de comentarios no es suficiente, sobre todo si jugamos siempre con el mismo equipo, por lo que acaban cansando. Aún así es de agradecer que estén en nuestro idioma, a diferencia de los que muestra su gran rival, NBA 2k10. Por su parte, la banda sonora cumple sin estridencias con una mezcla de ritmos urbanos y nuevos sonidos que se deja oir.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.