MotoGP 14

Tras años de bandazos y derrapes indeseables, los videojuegos oficiales de MotoGP encontraban un nuevo rumbo el año pasado con el italiano y reducido Milestone como estudio recuperador de la esencia de las carreras y buscador de experiencias realistas que regresaran en cierta medida a aquellos recordados MotoGP de THQ o el respetadísimo y memorable GP500. Un juego hecho de cero y buscando que las sensaciones al manillar fueran retransmitidas a los mandos de consolas y ordenador; no terminó de cuajar y sus creadores tomaron algunas decisiones de físicas y manejos que dibujaban un sistema de frenada en curvas o un aspecto técnico no tan verosímil como se esperaba. Esta temporada, MotoGP 14 quería arreglar tropiezos en PlayStation 4, PS3, Xbox 360 y PC, y ampliar la galería de pilotos jugables, aunque vuelve a quedarse por debajo de lo estimado en lo que a simulación pura, divertida y eficaz se refiere. Sin versión para Xbox One, pero sí edición reducida para PSVita.

Amortizar las posibilidades de la nueva generación sin dar de lado con ello a las más extendidas PlayStation 3 y Xbox 360 parece un objetivo imposible. Los llamados títulos transgeneracionales se acaban resintiendo técnicamente en ambos grupos de plataformas, como ocurre a MotoGP 14, sin alardes en PC-PS4 y sin moverse del todo cómodo en PS3-360. Milestone prueba en la nueva de Sony y ordenadores el sistema Yebis2 para efectos de postprocesado, algo no tan apreciable ni llevado al límite como nos gustaría y que hace al final muy parecidas la versiones old gen y new gen. Este juego se muestra sólido y fotorrealista, pero algunos detalles visuales como las animaciones de caída de los pilotos o la sensación de velocidad que no se alcanza pese a la fluidez nos hace pensar en que Milestone, especialistas en la conducción tras manejar marcas como WRC o SBK, necesitaba un poco más de tiempo para pulir de verdad su producto.

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Polémica también es la decisión tomada de nuevo respecto a dos de los contenidos probablemente más apetecibles del título, extráidos del disco de juego y ofrecidos mediante DLC adicional el mismo día de lanzamiento o como compensación por la reserva. De sus cinco modos, Moto 2 y Moto 3 no están en el producto principal, son un añadido. Esta táctica tan impopular se jugó ya el año pasado y también la presentan otras marcas del motor distribuidas por Bandai Namco, como Fórmula 1. No obstante, junto a su modalidad central MotoGP hay un par de grandes ideas incorporadas en MotoGP 14 como modos de juego y que darán que hablar formando un producto bastante redondo, Desafío a los Campeones y Eventos Reales 2013. En ambos, la cantidad de pruebas que juegan a recordar los mejores momentos del año pasado o de toda la historia del motociclismo competitivo vienen respaldadas de posibilidad de emular a más de 100 pilotos de todos los tiempos.

Crivillé y Checa incluidos, claro, pero también nombres más actuales como los imbatibles Márquez y Lorenzo, o aquellos imborrables internacionales de décadas pasadas que ya son una parte esencial de la evolución de las dos ruedas. 18 circuitos no son demasiados para un repaso tan amplio como el que hace Desafío a los Campeones, que abarca diversas épocas aunque siempre trayéndolas a la actualidad. Este modo no funciona como el cada vez más habitual viaje en el tiempo de la conducción con granulado de imagen, tonos sepia, diseños de motos de época, otra ambientación y graderío en las pistas, etc. Más bien esta categoría de juego nos deja emular a los 20 más grandes de la inclinación con sus motos, patrocinios y trajes más recordados, pero sin mucha más traslación temporal ni características de IA o estilo que los definan e intenten imitar a sus homónimos reales.

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También de emulación de momentazos va Eventos Reales 2013, una lista de situaciones concretas de la temporada del año pasado que jugar ahora desde diversas perspectivas para cambiar cómo se resolvieron. Por ejemplo, la caída de Marc Márquez en Mungello a principios de junio del 2013 que dio la victoria a Jorge Lorenzo, segundo puesto a Dani Pedrossa y colocó tercero a Cal Crutchlow. Vivida desde el casco de Márquez, esta carrera fue dramática y ahora tenemos la posibilidad de revivirla tal cual y evitar el desastre que supuso al catalán la pérdida del podio del circuito de la Toscana. Otros grandes adelantamientos, hazañas que ya han pasado a la historia en materia de curva y frenada in-extremis, etc. se revivien en este modo bastante variado que exige al jugador dar la vuelta al asunto tal y como aconteció hace meses.

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En el modo carrera de MotoGP, el esencial para el singleplayer, Milestone parece haber escuchado a la comunidad jugadora del título del año pasado y ha hecho algunos ajustes que venían pdidiendo la mayoría de usuarios, como la inclusión de un selector de experiencia jugable de tres niveles que va desde el punto más arcade posible (Físicas Estándar) hasta el de simulación notable (Físicas Pro), o un manager menos dictatorial que ahora nos escucha y nos da diversas elecciones de circuito recomendable para superar las pruebas, tiempos y tácticas en pista que el jugador mismo se autoimponga o marquen las clasificaciones generales. Encontramos así un formato de evolución más libre, más adaptado a cada jugador y su experiencia, formato que a su vez facilita que mejoremos las características técnicas de nuestra moto, desde el chasis al freno o la suspensión.

Seleccionar Físicas Estándar nos otorga un juego de conducción accesible y más centrado en la competición agresiva, con hasta 34 corredores en pista en su versión PS4 y PC, que una experiencia donde la posición de frenada y toque de rueda delantero o trasero cuenten (Físicas Semi-Pro o Pro). Una de las críticas y debates encarnizados que abrió Milestone el año pasado respecto a gameplay vino precisamente en lo que a frenada respecta, pues MotoGP 13 dejaba tocar el gatillo de freno o el botón para el rozamiento trasero bastante dentro de la curva, en su ápice, lo que creaba una jugabilidad muy particular, similar a como conducen algunos pilotos pero exigente para los que prefieran un zigzagueo más preparado. En MotoGP 14 este tipo de sensaciones mando en mano se repiten, se perfilan levemente para buscar una mejora lógica y esperable también, pero se puede decir que es un título sin grandes cambios con la experiencia jugable. También se podrá ajustar el nivel de dificultad respecto a la IA de los rivales, la trayectoria ideal, dirección asistida, y otras ayudas técnicas habituales.

18 circuitos para MotoGP 14 no son demasiados, pero dan la talla en lo que a variedad y estilo se refieren. Silverstone, Mirano, Aragón, Brno, Indianápolis, Austin, Termas de Río Hondo, Le Mans, Jerez, Murgello, Sachsenring, Sepang, Assen, Motegi, Catalunya, Valencia, Phillip Island. Eran casi todos previsibles y aquí están, con un aspecto visual muy similar a lo que Milestone esbozó el año pasado, aunque mejorando factores lumínicos como las condiciones climáticas de luz particular como los días lluviosos o las carreras a primeras y deslumbrantes horas de la mañana. También funciona todo esto de las condiciones ambientales en las físicas si jugamos en Semi-Pro o Pro, con las ruedas deslizándose mucho más en terreno húmedo, el viento jugándonos alguna mala pasada, la niebla que no deja ver el horizonte o el calor afectando levemente a las gomas de los neumáticos sobre el asfalto. No es demasiado apreciable a nivel jugable, pero sí se nota cómo sus creadores han intentado buscar ese realismo en materia visual.

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También hay una búsqueda de realismo gráfico en los acabados de los pilotos y sus reconocibles rostros, las animaciones venidas de largas sesiones de motion capture, el ambiente previo al semáforo en verde con los equipos preparándose, las motos rugiendo, el público entregado, etc. Y en el ámbito del sonido, también acorde, nos tenemos que quedar con los comentarios de Ernest Riveras para todas las competiciones, bastante variados en intervenciones y adecuados a los momentos. La galería de efectos para los tubos de escape, las colisiones, las frenadas, etc. no es tan amplia como cabe pedirle a un simulador. Tampoco los temas de su insípida banda sonora, que acompaña a los menús y eventos o preparativos pero no destaca dentro del conjunto técnico.

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En PS4 y PC contamos con gráficos a 1080p, mayor estabilidad de la tasa de frames y algunos detalles que hacen a la Inteligencia Artificial más coherente y agresiva. No debemos esperar cambios significativos sobre la versión de PS3-360, de hecho es por completo el mismo juego y el ojo no acostumbrado tardará en apreciar las diferencias. Pero sí que, puestos a elegir, recomendamos una de las versiones new gen, que si bien no amortizan las máquinas sobre las que se mueven, sí que tienen algunas características técnicas poco tangibles que a la larga podremos agradecer. Está claro que este primer MotoGP con version para la nueva generación no va a ser el arriesgado que dé del todo el salto. Es muy transgeneracional, en el peor sentido de la palabra.

En materia de rivalidad online y a pantalla partida, MotoGP 14 vuelve a incluir multijugador con todos los modos del año pasado más algunas categorías y pruebas de desafío inéditas, como Coche de Seguridad o Split Battle que mide los tiempos de tramos concretos de los circuitos. El matchmaking se produce con bastante soltura y equiparando adversarios, como no cabe concebir de otro modo ya hoy en terrenos multijugador. No obstante, en singleplayer se aprecia una labor concienzuda del pequeño equipo italiano por dar al jugador horas y horas y horas de desafíos, mejoras de tiempos, ajustes de dificultad y ayudas, etc. MotoGP 14 incluye tutoriales para quien nunca se haya puesto ante las dos ruedas y quiera empezar a tumbar la moto, con una interesante progresión desde el modo de Físicas Estándar hasta el Físicas Pro, lo que en seguida hace muy apetecible el online.