El mejor Mario Kart llega a Nintendo DS

Todos conocemos Mario Kart, todos sabemos de su 'magia' para enganchar a todos por igual. En el poco tiempo que duran las vueltas a los circuitos, absolutamente nada está garantiza, y por muy bien que vayas, jamás podrás asegurar que la última curva antes de la meta es tuya. No es difícil ver a un experto en la saga vapuleado por un novato en su cuarta carrera, y genera una revancha (con sus mejores improperios) que todavía ningún otro del género ha conseguido alcanzar.

Las novedades en esta entrega son muchas: nuevos personajes, karts individuales de cada personaje, hasta 32 circuitos, de los cuales la mitad son recopilación de otros Mario Kart… Pero la que sin duda marcará un punto de inflexión en la dilatada historia de Nintendo es la inauguración del servicio online gratuito, o lo que es lo mismo, Nintendo WiFi Connection. Mario Kart DS tiene el privilegio de dar a conocer las capacidades del servicio, y por primera vez, poder jugar contra habitantes de todo el mundo en una experiencia única y que Nintendo había desechado hasta la fecha.

Desconozco el número de cuadros por segundo a los que se mueve el juego, pero es soberbio, y no sería difícil asegurar que corre a 60 fps con los ocho corredores en pantalla sin saltos. El juego en sí se muestra en la pantalla superior, quedando la inferior para mostrar el mapa de dos formas: la clásica que muestra el circuito completo de forma esquemática o una vista cenital en 2D de varios metros a la redonda, mostrando karts, objetos del suelo, posiciones de cada uno y todos los detalles del escenario. Verdaderamente útil y para cambiar entre una visión y otra sólo tendremos que tocar la táctil.

El diseño de los 16 nuevos circuitos también es digno de mención, algunos de ellos particularmente trabajados y con movitos no vistos hasta la fecha: La Mansión de Luigi, Ciudad Delfino, Pinball Waluigi… Trazados con muchos detalles, objetos, caminos secundarios que aseguran la jugabilidad que ya encontramos en los recuperados de las versiones anteriores del juego. La sensación de velocidad que se ha logrado en DS es digna de mención, y en 150cc van verdaderamente rápidos. El diseño de los nuevos personajes da un soplo de aire fresco a los clásicos Mario, Peach y compañía y armas como un calamar que llenará de tinta la pantalla nos obligarán a jugar giándonos por el mapa inferior.

La customización de los diferentes karts, algunos de ellos exclusivos para cada personaje es posible gracias a un editor para crear nuestro logo o escudo y plantarlo en el frontal del kart. Esta insignia también se usará en el juego online para identificar a los corredores con una imagen. El editor es sencillo, muy a lo 'Paint' y se controla con el stylus. En resumen, Mario Kart DS verdaderamente explota el potencial de la consola mostrando unos gráficos en 3D que dejan en pañales a otros títulos del catálogo portátil. Hasta los conductores giran el volante con cierto realismo, inclinándose a los lados y derrapando dando volantazos. Se nota que Nintendo sabe exprimir sus propias máquinas.

Recomiendo encarecidamente jugarlo con cascos, pues verdaderamente consiguen hacerte sentir por donde te van a adelantar. Los efectos sonoros son los clásicos: choques de conchas, rayos, platanazos, y por supuesto, los gritos de satisfacción de los corredores cuando quedan primero o consiguen alcanzar a alguien con un objeto. Incluso jugando por WiFi en red local (con los jugadores delante) las músicas irán coordinadas y escucharemos en la DS de al lado si su melodía se ha acelerado indica que ya ha entrado en la última vuelta. El sonido es limpio, falto de ruidos, y está al nivel de todo el conjunto del juego.

El clásico modo Gran Prix es el conocido por todos: cuatro circuitos por copa y ocho copas en total, disponibles en 50, 100 y 150cc. Diez puntos al primero y cero al último. El que termine los cuatro circuitos con más puntos o mejor tiempo en caso de empate, gana. Lo acompañan el modo Contrarreloj, para retarnos a nosotros mismos y a nuestro fantasma, fantasma que en esta ocasión podemos enviar a otra DS para que compitan contra él intentado mejorar nuestro tiempo. Un detalle curioso que aumenta la competitividad entre poseedores del juego.

El modo Versus permite correr en muchos circuitos distintos y no sólo en los cuatro de esa copa. El conocido modo Batalla en el que explotar los globos del contrario en un circuito cerrado, con la novedad de poder incluir bots controlados por el ordenador hasta ocho corredores en total. Y por último, el modo Misiones, que como su propio nombre indica, nos pondrán pruebas puntuales para superarlas correctamente y obtener los correspondientes premios.

En mutliplayer local también encontramos muchas opciones. La primera de ellas y más interesante es poder competir hasta ocho DS con un único cartucho, eso sí, tanto los corredores como los circuitos serán asignados de forma aleatoria. Para poder sacarle todo el jugo necesitaremos contar con una copia por cabeza. Tanto en el modo Gran Prix como en Batalla se nos ofrecerá jugar solamente el número de conductores humanos o completar hasta ocho con personajes controlados por el ordenador. Esto quiere decir que se acabaron las pistas vacías, con sólo tres corredores.

Incluso será posible correr por equipos, eligiendo el nivel de dificultad, la cilindrada y los circuitos. Pero la verdadera peculiaridad de este Mario Kart es el juego online gratuito. La configuración es de lo más sencilla: basta con que detecte la red de tu casa, se introduzcan los parámetros que tengamos establecidos en el ordenador (encriptación de la red, IP, DNS…) Si no tenemos la red protegida y no hemos tocado nada en el PC se detectará automáticamente y estaremos listos para jugar. Aquellos que no dispongáis de un punto de acceso a Internet WiFi, podéis comprar el adaptador que Nintendo ha puesto a la venta el mismo día que el juego, que se configura de forma automática y es de lo más sencillo.

El número de corredores en modo online se limita a cuatro, no pudiendo elegirlos libremente. De forma aleatoria se irán añadiendo corredores a la partida hasta completar los cuatro. Si en un dos de minutos sólo se han detectado dos o tres corredores, la partida empezará así. Encontramos varios modos de juego: Con rivales a nuestro mismo nivel de experiencia, compitiendo contra gente de nuestro continente, de todo el mundo, o contra nuestra lista de amigos. Para que otro compañero aparezca en esta lista existen dos vías: Jugar contra él en red local, intercambiándose los datos automáticamente o introduciendo una clave de amigo a lo Messenger. Él tendrá que tener nuestra clave (que la encontramos dentro del propio juego) y nosotros necesitamos la suya, y listo. Para dar prioridad a unos amigos o a otros si hemos quedado cuatro para jugar y no queremos que nadie más acceda a nuestra partida, basta con cerrar un candado que aparece junto al nombre a los tres elegidos y la consola sólamente buscará a esos.

El acceso al juego online es bastante inmediato y en un par de minutos podemos estar empezando ya a correr. Se ha optado por no permitir ninguna comunicación entre los corredores, ni por chat, voz o similar. Muchas veces nos sentiremos impotente sin poder decirle nada a los enemigos, pero verdaderamente se nota que son manos las que controlan a los demás corredores y no una IA por muy trabajada que esté. El lag será algo evidente si uno de los corredores no goza de una conexión muy buena y encontraremos saltos que no deberían estar ahí.

Con dos o tres corredores irá plenamente fluido, pero con cuatro puede suceder que nuestra pantalla marque momentáneamente una primera posición aún viendo nosotros que tenemos un enemigo justo delante. Por lo general va muy bien, y este lag es poco evidente jugando contra europeos, pero aumenta si en la misma partida se dan cita un americano, un español, un australiano y un japonés, que aunque parezca un chiste, es posible. La competitividad es enorme, las últimas curvas suelen ser reñidísimas y jugar tumbado en la cama con la portátil contra usuarios de todo el mundo era algo impensable en Nintendo hasta hace muy poco tiempo.

La inauguración del modo online cuenta con un buen embajador y son ya cientos de miles de usuario de todo el planeta que pueden competir juntos. Sólo necesitan un punto de acceso WiFi (ya sea en casa o en los que encontramos en aeropuertos, hoteles o demás establecimientos) y listo. Nintendo ha confirmado la instalación de puntos de acceso WiFi en España, y pronto revelarán donde. La web de NintendoWiFi.com completa este plantel online, con muchos datos, tutoriales, rankings con los mejores corredores y demás contenido que os aventuro a que descubráis por vuestra cuenta.

Mario Kart DS no sólo es la mejor entrega de toda la saga, sino a nuestro juicio el mejor juego de Nintendo DS. Completo en modo un jugador, único en multi y el primero en disponer de juego online. Debo confesar que he tenido problemas durante estos días con mis compañeros de piso porque no soltaban la dichosa portátil y sólo me la devolvían cuando se les acababa la batería. Mario Kart DS respira jugabilidad por todos los poros, justifica la compra de la consola y el debut online está a la altura, aunque siga defendiendo a capa y espada el multijugador local. Nada como verle la cara al que acabas de adelantar en la última curva. El mismo día de lanzamiento del juego por separado, lo hacen el conector WiFi USB y un pack con la consola plateada (que no roja, como en otros mercados) y una copia del juego.

Un juego completísimo, que engancha a la primera incluso a esos que sólo se acercan a las consolas como si fuera algo malo. Un control intuitivo, cómodo, directo, frenético e inmediato. La Asociación de Etiquetas de Champú se han quejado a Nintendo porque a partir de ahora dejaremos de leerla en el baño. Darle un repaso a corredores de todo el mundo desde la cama, el aeropuerto o el mencionado 'Señor Roca' es algo que no tiene precio.