Knights Contract
- Plataforma3605PS35
- GéneroAcción
- DesarrolladorBandai Namco Entertainment
- Lanzamiento25/02/2011
- EditorBandai Namco Entertainment
Brujas y caballeros
El género del hack and slash no se detiene en la presente generación. Namco Bandai se apunta al carro con Knight Contract, un juego de avanzar y descuartizar mientras intentamos salvaguardar la vida de una bruja que nos puede salvar de una maldición. La que ella nos impuso.
Lo que parece ser una exigencia del guión es también un añadido jugable que deberemos tener en cuenta en cada momento. Nosotros somos inmortales, y aunque nos golpeen con fuerza no caeremos nunca. Ella no, por lo que nuestra barra de vida -por decirlo de alguna manera- está separada de nosotros y lo que sufrimos si nos golpean. Bajo este prisma, deberemos buscar y acabar con todas las brujas y demonios de cada una de las fases a lo largo de unas ocho horas, dependiendo de la dificultad con la que empecemos. Ni la normal ni la fácil, dicho sea de paso, son recomendables debido al poco reto que suponen.
Esto abre un sistema de combate curioso, ya que tendremos que hacer la nuestra pero estar atentos a la hora de escoltarla, defenderla o recogerla cuando un enemigo haga algún ataque de los suyos que la dañará con toda seguridad. Encontrar momentos de pausa para recuperar vida y vigilar con no quedar noqueados también es clave. Aunque no podamos morir, si nos golpean mucho deberemos pulsar repetidamente A para recuperarnos. Incluso si nos cortan en pedazos nos recuperaremos, pero el proceso será más lento, momento que aprovecharán para atacar a la bruja. La verdad es que la implementación de este sistema permite algunas situaciones distintas a lo habitual, que es todo lo demás, pero puede llegar a frustrar debido a la IA de Gretchen. Estando malherida, es incapaz de apartarse de los enemigos y sigue a lo suyo.
Todo lo demás es archiconocido en un producto de estas características. Tenemos dos tipos de ataque, flojo y fuerte, un botón para hacer agarres que posteriormente se usa para machacar a un rival concreto, las magias -se van desbloqueando, podemos asignar hasta cuatro- y un movimiento evasivo. Sencillo e intuitivo, el control responde desde un primer momento, y está pulido con un sistema de apuntado efectivo y la cámara libre para colocarla como mejor nos convenga. Los ataques de Gretchen son automáticos, mientras que un último botón de acción nos permite recogerla y llevarla en brazos, ideal para recuperar vida como hemos comentado, o salvarla de una situación complicada.
La sencillez de los controles acompaña, por desgracia, a la simpleza de nuestras acciones. Los combos son bastante básicos, y a pesar que es cierto que podemos encadenar una serie de golpes más que interesante, el juego no premia eso. Los beneficios que obtendremos machacando los botones de acción y haciendo alguna magia concreta son mayores que si intentamos luchar con el sistema que se nos ofrece, demostrando que la calibración en el sentido del reto que supone queda bastante en entredicho. Algo que a la larga puede hacer que Knight Contract se acabe haciendo repetitivo durante el desarrollo de sus fases.
Como ya es habitual en este tipo de juego, los Quick Time Events también están presentes para acabar con nuestros enemigos. Pulsando el botón justo cuando está moribundo haremos un finisher más que impactante a nivel visual. El cénit llega con los jefes finales. Son los enemigos más interesantes de batir y las luchas más complicadas, ya que son variadas y necesitamos encontrar sus puntos flojos. Por desgracia, el toque final en el QTE definitivo nos puede llevar por el camino de la amargura. Muchas veces no queda clara la secuencia que nos pide, fracasando y teniendo que volver a dañar durante un rato al enemigo e iniciar la misma secuencia hasta que salga con éxito.
Con todo, el juego es intenso -enemigos constantemente- en su desarrollo. Camino lleno de enemigos, alguna sorpresita, la bruja o monstruo de turno y saltamos de fases. Hay pocos elementos que recabar, notas y demás contenido extra, por lo que a nivel rejugable tampoco es demasiado alentador lo que ofrece -muchos de los objetos no tienen pérdida- Knight Contract en este sentido. Las magias que vamos aprendiendo o los movimientos devastadores -llenando una barra cuando matamos a enemigos- durante un tiempo limitado cierran la oferta jugable de la obra publicada por Namco Bandai.
El mundo fantástico recreado ofrece variedad de localizaciones, aunque ninguna de ellas sorprenda a nivel artístico, y no desentona si no fuera por los acabados en general y por las limitaciones ya comentadas. Los efectos de luces e impactos, así como las escenas cinemáticas y las acciones de QTE, si muestran algunos encuadres y momentos satisfactorios, aunque escasean y están limitados por el motor gráfico, que al menos se muestra sólido a pesar de la envergadura de algunos jefes y que más de una vez hay diversos enemigos en pantalla.
Seguramente lo más destacado en este sentido es la banda sonora. Con un toque épico a base de trompetas, tambores y demás instrumentos ideales para dar dramatismo y momentos bélicos a la acción, lo cierto es que acompañan bastante bien en todas las situaciones, precipitando el ritmo en momentos clave de la partida y poniendo tensión en otros, como por ejemplo cuando intentamos escapar de una persecución. Las voces de los protagonistas están en inglés, aunque a cambio los textos de menús y los subtítulos están traducidos al castellano.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejará huella. Sólo recomendable en caso de sequía de este género de juegos.