Heroland, análisis: El reto de no ser el protagonista

Las apariencias engañan. Lo que a primera vista puede parecer una cosa, una vez manos en la masa puede derivar, para bien o para mal, en algo muy distinto. Y eso es lo que le ocurre a este Heroland de Furyo Corporation y Marvelous AQL. A primera vista parecemos encontrarnos ante un RPG, pero en la práctica este título está más cerca de la aventura conversacional combinada con un punto de estrategia.

Dirigido por Takahiro Yamane, que se encargó también de Fantasy Life, no es este un juego que guste de los tópicos. Ya desde su mismo planteamiento se aleja de los tópicos con un argumento entre lo irónico y lo subrealista, y con grandes dosis de cinismo. Nos ponemos en la piel de un currito que acaba de ser contratado de forma precaria para trabajar en Heroland, una isla de entretenimiento donde los clientes pueden sentirse como auténticos héroes. En este lugar paradisiaco cualquiera puede convertirse en protagonista de su propia aventura por un módico precio, avanzando por mazmorras y derrotando enemigos como un experto.

Ampliar

El cliente siempre manda

Nuestra tarea consiste en servir de guía a los clientes a través de estas mazmorras donde se enfrentarán a enemigos (en realidad compañeros nuestros de trabajo) con el objetivo de garantizar que completan los combates, y de paso maximizar su diversión equipándolos y ayudándolos de la forma más eficiente posible.

Ampliar

A pesar de lo que pudiera parecer, el juego carece de cualquier mecánica de exploración. Las “mazmorras” que recorremos en realidad se componen de conversaciones y batallas. En estas últimas los personajes a los que guiemos se encargarán de luchar ellos solos, pero periódicamente podremos darles instrucciones tales como centrarse en un enemigo, guardar los ataques que consumen energía o ir a por todas.

También nos encargaremos de portar los objetos que puedan necesitar los miembros del grupo (objetos de curación o de recuperación de estados alterados) y usarlos en el momento adecuado, así como de seleccionar el equipamiento al principio de cada partida. Será nuestra tarea, por tanto, vigilar sobre todo cuándo las cosas se complican y ser capaz de elegir lo más adecuado al principio de cada exploración.

Ampliar

Puesto que nuestros consejos solo se pueden activar pasado un tiempo en el combate y requieren un tiempo de espera para volver a ejecutarse, una de las claves es elegir el momento preciso para asesorar a nuestros clientes y garantizar que obtengan la victoria.

Ampliar

Una historia subrealista

Pero más allá de esta mecánica, el grueso del juego lo pasaremos leyendo, conociendo los estrambóticos personajes que pueblan este universo y aprendiendo la realidad sobre el lugar donde trabajamos y algunos de sus secretos. Un guion curioso, lleno de humor mezclado con un puntito de intriga en ocasiones y grandes dosis de subrealismo; capaz de mantener la atención del jugador en general aunque en momentos puede llegar a hacerse un poco pesado. Detrás de él se encuentra un equipo con gran experiencia, compuesto por Nobuyuki Inoue y Nobuhiro Imagawa, implicados también en títulos como Legend of Mana o Mother 3.

Ampliar

Nuestro personaje se mantendrá en general en silencio salvo cuando haya paneles para elegir una respuesta (una mecánica de la que el propio juego saca punta), pero a cambio contaremos con una parlanchina hada que se convertirá en nuestra histriónica voz ante nuestros clientes y compañeros. Una pena que el juego nos llegue en inglés, por lo que un mínimo manejo del idioma de Shakespeare será necesario para seguir correctamente la trama, que constituye la esencia del juego.

Uno de los aspectos más llamativos es su acabado gráfico, una mezcla de pixel art 2D con 3D que recuerda en cierta medida a lo visto en juegos como Paper Mario, pero con una personalidad propia. Es un acabado muy vistoso, si bien los escenarios son algo simplones y sobre todo en las mazmorras se habría agradecido algo más de variedad y detalle. No ayuda el hecho de que repetiremos escenarios muchas veces. Pero en general, el humor y el colorido viene a salvar el día en este Heroland.