un juego que da miedo...

La saga RESIDENT EVIL -Biohazard en Japón- es una de las más prolíficas de la historia de los videojuegos. Desde su primera aparición allá por 1995 en la PSX, siempre ha sido objeto de culto por parte de millones de fans en todo el mundo. Cada juego nuevo que salía de esta franquicia era esperado con ansias por todos sus usuarios, vendiendo millones de copias en poco tiempo. Era, en definitiva, la seña de identidad de CAPCOM en los últimos años...

GRAFICOS.
Este título no aprovecha ni por casualidad la potencia que guarda PS2 en su interior. Los escenarios son pequeños, con un modelado tremendamente básico y unas texturas muy vistas. En realidad no han introducido nada que no se viese ya en el juego que sirve de base para este, más bien han "desaprovechado" bastante los escenarios del juego en cuestión.

El movimiento del personaje controlado es bastante tosco, y el modelado de sus manos deja mucho que desear. Las armas tampoco están muy conseguidas que digamos, y los efectos de los disparos casi que deprimen a cualquiera, ya que son muy primitivos, nada realistas y cutres, muy cutres. Si seguimos con otros efectos, los de luz tampoco son en tiempo real, y las sombras de los personajes siguen teniendo ese efecto de "pegatina" debajo de sus pies que, la verdad, hace tiempo que debería estar penalizado. Los disparos no iluminan las zonas en las que se efectúan, ni los personajes emiten sombras proyectadas sobre los entornos... en fin, el motor gráfico es muy pobre.

El resto de personajes (zombies, monstruos e incluso el compañero del protagonista -puedes elegir entre controlar a Claire o a James, y el otro personaje te ayudará-) se mueven muy ortopédicamente y su construcción es defectuosa. Los zombies son muy poligonales y para nada llegan a asustar. Tu compañero de aventuras no goza de una movilidad suave ni fluída -más bien todo lo contrario-, y eso le quita mucha emoción e inmersión al asunto.
  
 En realidad ningún detalle del apartado gráfico merece ser reseñado, ya que la calidad media es baja. Es una lástima que CAPCOM permita que se realicen defenestraciones como ésta con sagas tan míticas como la BioHazard. En fin, si ellos creen que les compensa, pues allá ellos. Lo que sí quiero que quede claro es que sepáis que cualquiera que se compre este juego se va a llevar una desilusión del copón. Gráficamente muy malo.

MUSICA.
La música de este título se resume en una palabra: INSOPORTABLE. Un elemento que en los demás juegos de la saga eran protagonistas indiscutibles por la ambientación y tensión que le daban al juego, consiguen en éste destrozar los tímpanos de los sufridos usuarios. Una música que parece que se basa ligerísimamente en las bandas sonoras anteriores, pero destrozada y repetida hasta límites insospechados. Unas melodías machaconas que no ambientan lo más mínimo -bueno, la verdad es que un poco de miedo sí que dan, pero de lo malas que son- y que logran poner de los nervios a los pocos minutos de juego. De verdad, un horror "horroroso".

SONIDO FX.
Este apartado también da la sensación de haberse realizado a toda prisa, sin cuidar los detalles ni la calidad de los samplers. Los disparos suenan casi todos iguales, no hay voces (ni aunque sea en inglés!!!) -sólo los subtítulos en inglés también-, los gritos de los zombies más bien parecen bostezos, ruídos extraños que no sabes qué son,... un apartado lamentable, como la calidad general de todo el juego. Pero vuelvo a repetir que lo que más decepcionante me parece es la falta de las voces de los protagonistas, ya que seguro que aumentarían con su presencia la tensión en los escenarios. Se ve que CAPCOM tampoco confiaba mucho en el éxito de este juego...

JUGABILIDAD.
Cuando un shooter como este se juega mejor con el Dual Shock que con una pistola, apañados vamos. Unas de las pocas cosas buenas que tiene este título es que no se mueve por el típico sistema de raíles; es decir, no es como el fantástico "Time Crisis 2", donde el jugador sigue un camino predeterminado. En éste, puedes andar a tus anchas por cualquier zona del escenario, pero ésto tiene su hándicap en el difícil control que requiere andar y disparar a la vez. Además, los disparos parece que sólo surten efecto en la parte central de la pantalla: los disparos hacia los bordes y esquinas no son gestionados con eficacia, con lo cual casi tendrás que centra bien la pantalla en cada objetivo para poder dispararles. Con el Dual Shock ésto es más fácil de realizar que con la pistola, lo cual no dice mucho a favor de los desarrolladores...