Alquimia a doble pantalla

Nos encontramos ante el primer juego de la serie que nos llega a nuestra portátil de doble pantalla que Bandai nos ha traído en forma de singular Beat'Em Up para una consola que, curiosamente, está a años luz de su hermana pequeña, la GBA, en cuando a este tipo de juegos se refiere. Verdaderas maravillas jugables como Final Fight o el reciente TMNT no hacen sino demostrar que los programadores se han empeñado en tratar con más mimo a la más pequeña y veterana de Nintendo.

La historia se centra en las aventuras de dos jóvenes hermanos, Edward y Alphonse Elric, ambos expertos alquimia, que intentan realizar una técnica prohibida de la alquimia para resucitar a su madre. El experimento falla, y como consecuencia, Ed pierde un brazo y una pierna, y Al todo su cuerpo.

Al inicio del juego comenzamos jugando con Ed y contamos de forma intermitente con la ayuda de Al, si bien el programa nos ofrece la posibilidad de desbloquear a otros tanto personajes de la serie según vayamos avanzando y de tener a otros tantos compañeros brindándonos su ayuda, algo que en principio es de agradecer.

En la simpleza está el gusto

El problema es que, al contar con un solo botón de ataque, las posibilidades son realmente reducidas y el juego acaba siendo un compendio del simple y tradicional 'puño, puño y patada' independientemente del personaje escogido, algo que reduce considerablemente la espectacularidad y variedad del juego, en el que, por cierto, destaca la inexistencia de armas u objetos con los que interaccionar.

Por si fuera poco, y a pesar de que el juego tenga en su título la palabra 'Dual', lo cierto es que el juego es única y exclusivamente para un jugador, sin posibilidad alguna de jugar a dobles en ninguna de las formas posibles. Tampoco incorpora funciones online, por lo que nos encontramos ante un Beat'Em Up para ser jugado en soledad.

Tampoco en la variedad o la estética de los enemigos y escenarios podemos dar un voto de confianza al juego. Es cierto que los gráficos cumplen y que no es desagradable a la vista, pero también es bien cierto que para SNES, y ya no digamos para GBA, hay juegos con mejores gráficos y con la posibilidad, como mínimo, de jugar a dobles. Los enemigos, además, son poco variados, a veces tan solo cambian de color de vestimenta, y se repiten a lo largo de casi todo el juego. Si sumamos a esto que puedes continuar infinidad de veces y que cada vez que continuas, comienzas justo donde te mataron, podemos llegar a la triste conclusión de que, si te pones, te acabas el juego en una tarde, algo que para nada compensa con el dinero desembolsado. También puedes grabar la partida cada vez que pasas de fase, por si quieres descansar de tanto mamporro y retomar la partida más tarde… pero incomprensiblemente tan solo puedes guardar una partida y, si lo haces, ya no podrás comenzar una nueva partida a menos que borres la anterior.

Sobre la música toca decir que cumple perfectamente, en ningún momento llega a ser molesta, y en bastantes ocasiones encaja bastante bien con el momento del juego en que nos encontramos. Los efectos de sonido son más que notables, y las voces son bastante nítidas. Sin duda, el apartado más 'currado' del juego es el sonoro.

Durante el juego se suceden constantemente escenas que hacen referencia a la serie, algunas incluso habladas, aunque eso si, los textos y las voces están en perfecto inglés. Dichas escenas, que para algunos seguidores de la serie seguro es algo de agradecer, no lo será tanto para los que gusten de jugar sin más en su DS, porque ralentiza muy considerablemente el desarrollo del juego. Es cierto que la mayoría de las veces el juego te permite saltarte dichas escenas, pero también hay ocasiones en las que tendrás que 'tragarte' algunos diálogos que igual ni te van ni te vienen, porque, seamos sinceros, un Beat'Em Up no es que encandile precisamente por su profundidad.

Se dijo que este juego aprovecharía la pantalla táctil, y bueno, no mintieron, la pantalla se usa, pero para no mucho más que para abusar de tu 'super-ataque-infinito-que-no-gasta-energía' y para pasar algunas pantallas mediante pruebas bastante sencillas como por ejemplo tocar una serie de puntos en orden durante un tiempo determinado y poco más. El juego incorpora una serie de mini-juegos que en teoría alargan la durabilidad del cartucho, pero no pasan de ser simples y repetitivas pseudo-pruebas que recuerdan más a simples pruebas del Wario Ware que a otra cosa.