Forza Motorsport 6, Análisis

¿Por qué corremos? ¿Para ser inmortales?

Diez años han pasado ya desde que Turn 10 sorprendiera al mundo con Forza Motorsport en la Xbox original. La desarrolladora estadounidense, dedicada en exclusiva desde hace más de diez años a la saga Forza, siempre ha tenido muy claro que el realismo y la diversión son elementos claves en su exitosa fórmula. Buscando satisfacer por igual a los más puristas y al resto de jugadores, la franquicia Forza se ha esforzado en mejorar entrega tras entrega un producto sobresaliente que desde sus inicios es un referente dentro de la simulación automovilística en consolas. Es hora de conocer cómo ha mejorado el nuevo Forza y qué lo convierte en uno de los mejores simuladores de esta laureada saga de conducción.

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Otro factor determinante que se transmite muy bien a ambos periféricos son las averías. En caso de activar el modo realista podremos sufrir multitud de desperfectos, tanto visuales como de rendimiento, que afectarán notablemente al manejo del coche. Como viene siendo habitual, este apartado dota a la conducción de mayor realismo y hace más exigente la experiencia. Por su parte, los desperfectos exteriores continuan la línea de Forza 5 y no dejan de ser un simplificado y poco efectivo reflejo de la realidad. En definitiva, Forza 6 utiliza las sólidas bases de sus predecesores para seguir siendo un simulador fantástico que, además, ha implementado novedades muy esperadas por los fans.

Las carreras con lluvia llegan a Forza 6 y lo hacen como nunca antes habíamos visto en un videojuego de conducción. La acumulación de agua afectará directamente al comportamiento del coche y el jugador tendrá que analizar muy bien el circuito para adaptar su pilotaje. Modificar los puntos de frenado, controlar la adherencia de los neumáticos y tener mucho tacto con el acelerador según el agua acumulada, serán fundamentales para no perder el control del coche. Lo que más llama la atención son los charcos, ya que estas acumulaciones más o menos grandes de agua reproducirán a la perfección el aquaplaning que se produce por el deslizamiento de los neumáticos. Este aspecto hará que tengamos que modificar la trazada ideal de los circuitos o sobrepasarlos con decisión con las cuatro ruedas para no acabar fuera de la pista. 

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Otra novedad muy importante tanto a nivel visual como jugable son las carreras nocturnas. Esta nueva experiencia de juego, que será mucho más determinante en los circuitos sin iluminación artificial, modificará nuevamente nuestra forma de jugar. Debido a la escasa visibilidad que ofrecen los faros de nuestro coche tendremos que prestar especial atención a todo lo que sucede a nuestro alrededor. El nivel de realismo es tan grande que incluso pueden romperse los faros y obligarnos a abandonar la carrera por la nula visibilidad. Las carreras nocturnas también influyen en la conducción debido al descenso de la temperatura de la pista, que obviamente afecta a la adherencia de los neumáticos. Todas estas novedades y la exigente jugabilidad hacen que para sacar el máximo rendimiento a nuestro coche tengamos que estudiar muy bien las 148 superficies diferentes que tiene Forza 6 según el circuito y las condiciones climáticas. 

La llegada de las carreras nocturnas y la lluvia ha sido un acierto y ofrece al jugador experiencias de conducción totalmente nuevas y muy realistas. El problema de esta novedad es que no hay ciclos dinámicos de día/noche ni climáticos, como tampoco la posibilidad de disfrutar de estas dos características en todos los circuitos. Otro factor importante que se debería mejorar es el sistema de penalizaciones. Forza 6 presume de ser un simulador de conducción y por lo tanto no tiene mucho sentido que podamos chocar libremente a otros pilotos para sacarles de la pista o acortar el trazado de manera abusiva vuelta tras vuelta sin recibir ninguna sanción. Un factor que debería estar presente en Forza 6 para garantizar una experiencia realista de conducción profesional. 

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Estos Drivatar, que nuevamente son un reflejo de la conducción de nuestros amigos, pueden ser configurados para reducir su agresividad. Este aspecto, que fue muy criticado en Forza 5, es muy importante para conseguir una experiencia de juego más propia de los circuitos profesionales que de las carreras callejeras de la saga Horizon. Otra novedad jugable que afectará a la conducción son los Mods. Estas cartas de modificación, que obtendremos al subir de nivel, nos permiten mejorar algunos aspectos de nuestro coche o de la carrera. Existirán dos tipos de Mods, los permanentes y los de un solo uso, pudiendo configurar libremente cada ranura disponible antes de cada carrera. Esta novedad nos permite, por ejemplo, adelantar nuestra posición en la parrilla de salida o aumentar la adherencia de los neumáticos en un circuito determinado. De esta forma, según el uso de los Mods, obtendremos más recompensas cuanto mayor sea la dificultad, lo que supone un aliciente extra muy interesante. 

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El último factor que tendremos que dominar para sacar el máximo rendimiento a nuestros coches es el tuneo. Como viene siendo habitual en la franquicia, Forza 6 presenta una enorme cantidad de opciones de configuración y piezas que podremos modificar y guardar para cada circuito y vehículo. Estos ajustes en el rendimiento afectan a factores como el motor, los frenos, la transmisión, los neumáticos, la potencia o la aerodinámica. El nuevo Forza también incluye mejoras automáticas que se adaptan perfectamente al coche y otras que podremos descargar desde internet al ser posible compartirlas entre los usuarios de Forza 6. 

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Otro factor muy importante que ha mejorado notablemente son los circuitos. En Forza 6 hay un total de 26 trazados diferentes que junto con sus variantes ofrecen más de un centenar de opciones. La lluvia, la visibilidad, los trazados invertidos y las variantes de los circuitos garantizan diversión y variedad a partes iguales. Para esta nueva entrega contamos con los 17 trazados disponibles en Forza 5, 6 nuevos y 3 que vuelven de otras entregas. Entre las novedades encontramos: Brands Hatch, Circuito de las Américas, Daytona, Lime Rock, Monza y Watkins Glen. El circuito que regresa del Forza original es el trazado urbano de Rio de Janeiro y de Forza 2 el circuito alemán de Hockehnheim y el norteamericano de Sonoma. Por último, a modo de recordatorio, destacan los circuitos heredados de Forza 5 como Nurburgring, Spa, Silverstone, Yas Marina, Laguna Seca, Cataluña o el divertido trazado de Top Gear. Sin duda, aunque el número de circuitos podría ser mayor, la llegada de nuevas localizaciones siempre es importante en un título de conducción de la envergadura de Forza Motorsport 6.

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Este giro de 180 grados es todo un acierto para una franquicia tan icónica como Forza y se adentra en un camino que nunca debió abandonar. El jugador irá obteniendo Experiencia (EX) y Créditos (CR) después de cada carrera según el resultado y su nivel de exigencia. Compitiendo también se obtendrá puntos de afinidad, con las marcas lo que garantiza nuevamente buenos premios. Otra forma de aumentar nuestros Créditos y nuestro garaje es con la ruleta. Este juego de azar, que desbloquearemos para una tirada cada vez que subamos de nivel, contará con varios premios (algunos realmente espectaculares) que podremos obtener sin coste alguno.

Para aumentar aún más la duración del modo historia tenemos los Exhibiciones. Estas pruebas especiales, que desbloquearemos a medida que vayamos compitiendo, son el bálsamo perfecto para amenizar el extenso modo historia. Cada evento de exhibición es totalmente diferente e incluye carreras de resistencia con más de 400 km de longitud, pruebas de adelantamientos, derrapes, enfrentamientos con el mismísimo primo de Stig (el famoso piloto de Top Gear) e incluso una prueba de derribar bolos. Un añadido muy divertido que hará las delicias de los jugadores. 

En el multijugador offline encontramos el siempre divertido modo Partida Libre que nos permite competir con todos los coches y circuitos en carreras independientes. De esta forma, aunque tendremos todos los vehículos a nuestras disposición a través del alquiler, solo obtendremos recompensas si conducimos los coches que tenemos en nuestro garaje. Este modo incluye la pantalla partida para poder disfrutar plenamente de Forza 6 con un amigo en casa. Todo un acierto a nivel jugable que por desgracia muchas otras franquicias han olvidado en los últimos años. El modo Prueba de Conducción nos lleva a competir contra el cronómetro con el coche y el circuito que más nos gusten, lo que siempre supone un reto interesante. Por último, Rivales nos enfrentará contra los coches fantasma de amigos y jugadores de todo el mundo. Los eventos incluirán pruebas con un mismo coche, por categorías, por circuitos, pruebas de derrapes, competiciones técnicas con conos o los creados por el propio estudio Turn 10. Para aumentar la competitividad cada evento contará con el mejor registro de nuestros amigos, de Europa y de todo el mundo.

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La llegada de la lluvia ha supuesto implementar desde cero un aspecto muy importante y el resultado no puede ser mejor. Las gotas sobre el cristal del coche, los distintos efectos de la lluvia en el asfalto, las acumulaciones de agua o la niebla están perfectamente recreados y no dejarán de sorprendernos. Por último, las carreras nocturnas, sobre todo las que tienen una escasa iluminación artificial, han sido recreadas perfectamente para garantizar una visibilidad reducida y una experiencia lo más realista posible. 

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A nivel sonoro todo el título ha sido perfectamente doblado al castellano, salvo las voces de los famosos presentadores de Top Gear, Richard Hammond y James May, y de algunos otros compañeros del sector. Los británicos vuelven a la saga Forza (esta vez sin el icónico y despedido Jeremy Clarkson) para poner voz a las pequeñas introducciones en categorías y competiciones que encontramos en Forza 6. Sin duda, es todo un acierto contar nuevamente con ellos y no haber doblado sus voces. Por su parte, la banda sonora vuelve a tener el estilo épico que caracterizó a Forza 5 y, aunque han refinado un poco el estilo, la epicidad que transmite sigue siendo excesiva para un videojuego de conducción de estas características. Por último, todos los coches cuentan con sonidos reales de sus motores y los sonidos producidos por los mismos son un fiel reflejo de lo que podemos escuchar en un circuito real. 

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