FireFall
- PlataformaPC7
- GéneroAcción
- DesarrolladorRed 5 Studios
- Lanzamiento29/07/2014
- TextoInglés
- VocesInglés
Firefall
Tras más de dos años en fase beta Firefall llega a nuestros ordenadores en forma de MMOFPS Free to Play dispuesto a hacerse un hueco en el mundo de los MMO en general y en el de los MMOFPS en particular. Con un equipo de desarrollo llamado Red 5 Studios que cuenta con algunas de las principales mentes que estuvieron detrás, ni más ni menos, que de World of Warcraft... ¿lograrán cumplir ese objetivo?
A finales de 2010, Red 5 Studios (una compañía formada por varios miembros de Blizzard Entertainment implicados en el desarrollo de World of Warcraft) anunciaba Firefall, un MMOFPS ambientado en un mundo de ciencia ficción apocalíptico que poco después entraría en fase beta durante más de dos años. Una beta que ha estado salpicada de fallos, de recogida de valoraciones y consejos de los participantes, de problemas que incluso han costado la cabeza del antiguo CEO de la compañía, Mark Kern, y de modificaciones drásticas en el juego para llegar, finalmente, al momento de su lanzamiento el pasado 29 de julio. Tras tanto tiempo en fase de pruebas y altibajos en su desarrollo, ¿habrán conseguido desde Red 5 Studios traernos un juego de calidad capaz de competir con Planetside 2 o el inminente Destiny para PS4 y Xbox One?
Como ya hemos dicho, el juego está ambientado en un mundo de ciencia ficción con tintes apocalípticos. Nos encontramos en Brasil, uno de los pocos lugares habitables del planeta Tierra tras las dos catástrofes más importantes de la historia de la humanidad, una lluvia de meteoritos que castigó todo el Globo y la caída del Arclight, una nave interestelar que chocó contra el planeta provocando una nube radioactiva que ha servido de puerta a unos seres que quieren acabar con la humanidad.
Con esta premisa empezaremos nuestro viaje con un inicio bastante frenético en el que pegaremos unos cuantos tiros mientras vamos realizando un tutorial que además nos sirve para conocer los cinco Battleframes con los que nos podremos equipar al inicio de la aventura. Estos Battleframes son unas armaduras que cumplen el papel de las clases de personaje en otros MMO, con la singularidad de que podemos cambiar entre ellos y subirlos de nivel (se suben por separado) de cada uno en el momento que prefiramos. Los tipos en cuestión son los siguientes:
Dreadnaught: Armadura y armas pesadas. Gran potencia de fuego y a la vez gran defensa, puede ejercer los roles de tanque y DPS.
Assault: La armadura estándar del ejército. Combina potencia de fuego y movilidad a partes iguales y su arma principal es una escopeta de plasma.
Biotech: Ante todo priman la movilidad y las habilidades para mantener al piloto a salvo. Como os podéis imaginar es el sanador del equipo.
Engineer: Personaje de combate a corto rango con un montón de gadgets como torretas o trampas que le hacen la opción ideal para establecer perímetros o defender ciertos puntos.
Recon: Como ya sabréis por el nombre, el Recon no es otro que el francotirador, el especialista en acabar con los enemigos a larga distancia gracias a sus rifles tan precisos como letales.
Además, cada uno de estos tipos cuenta con dos Battleframes avanzados que se pueden desbloquear al llegar al nivel máximo de cada armadura o pasando por caja con dinero real. Tanto las clases avanzadas como las básicas incorporan habilidades o ultimates, pudiendo equipar un máximo de 3 habilidades que tendrán que ser específicas del Battleframe o de la rama del Battleframe en cuestión. Para que lo entendáis mejor os pondremos un ejemplo: imaginad que subís un Recon al máximo nivel y desbloqueáis una de sus armaduras avanzadas, que es Raptor. Esta armadura tiene sus propias habilidades que podremos equipar a nuestro gusto combinándolas con la del Battleframe básico, Recon, hasta escoger un máximo de tres, pero nunca con otros tipos como Assault, por ejemplo. Lo mismo ocurre con los Ultimates, las habilidades más poderosas de nuestros equipos de combate, de las cuales solo podremos equipar una, siguiendo las mismas reglas que con las habilidades. Además, estas habilidades las podremos mejorar con objetos que nos iremos encontrando a lo largo de nuestro periplo o que podremos ir crafteando recogiendo una serie de materiales, como en cualquier buen MMO que se precie. Por supuesto, también tendremos hueco para seleccionar objetos de acceso rápido. Podremos seleccionar un máximo de cuatro que irán desde bonificadores de munición o daño hasta granadas o botiquines. Todo este sistema de leveling, Battleframes, habilidades y objetos le da un toque a Firefall único y tremendamente divertido y sin duda es uno de los puntos fuertes del juego de los ex de Blizzard.
Al escoger nuestro Battleframe el siguiente paso que buscaran la mayoría de los jugadores es el de personalizar el aspecto de su personaje. Para ello podremos ir a unas terminales llamadas “New You” desde las cuales podremos escoger la cara, el peinado, el color del pelo y otra serie de atuendos para definir el aspecto de nuestro alter ego virtual. Muchos de estos gadgets son de pago y no tienen importancia relevante a la hora de jugar, siendo este uno de los principales sustentos a nivel económico del F2P de Red 5 Studios. Desde aquí también podremos personalizar el aspecto de nuestro Battleframe o repararlo y desde otro dispositivo que se encuentra siempre al lado de este “New You”, llamado “Battleframe Station”, podremos alternar de armadura en cualquier momento de la partida, cambiando, por ejemplo, del Recon al Assault, aunque cada armadura, como os hemos indicado anteriormente, se sube de nivel de forma completamente independiente.
Una vez finalizado el tutorial en cuestión, escogido nuestro primer Battleframe y personalizado nuestro personaje, el juego nos soltará en un mundo en el que tendremos total libertad de desplazamiento y en el que nos pondremos rápidamente a subir de nivel gracias a las misiones de la campaña principal. Sin embargo, nuestra alegría durará poco porque tras un par de “quest” las misiones de la campaña se van espaciando entre niveles necesarios para realizarlas y necesitaremos tirar de otro tipo de trabajos para poder subir de nivel y desbloquear la siguiente misión principal. Para hacerlo tenemos la opción de acudir a unos paneles de trabajo donde encontraremos un listado de cuatro misiones que se va renovando y que podremos escoger con total libertad, aunque en ocasiones será el propio juego el que nos recomendará escoger un determinado encargo en cuestión. Además de estos trabajos que encontraremos en los paneles que están en cualquier ciudad importante o pequeño pueblo, también podremos realizar de eventos y misiones aleatorias que salpican todo el terreno de juego y que encuentran su punto más divertido en unas gigantescas tormentas llenas de enemigos.
Esto es bastante interesante, ya que, en teoría, le da bastante dinamismo a la subida de nivel, tal y como pudimos ver en otros juegos como Guild Wars 2 en el que este tipo de experiencias estaban integradas de una forma fantástica. Sin embargo, Firefall, tanto en los eventos dinámicos como en el resto de las misiones tiene un grave problema, y es que cuenta con una falta de variedad total en muchas de ellas. Este es un mal arraigado fuertemente en muchos MMO, pero en el juego de Red 5 Studios se hace aún más evidente porque casi todas las misiones consistirán en matar a cierta cantidad de bichos, custodiar una zona durante un tiempo determinado o coger cierto objeto. Hay algunas excepciones a la regla bastante interesantes, pero en la mayoría de los casos sentiremos que estamos haciendo exactamente la misma misión que la anterior o el mismo evento dinámico una y otra vez.
Por si fuera poco, a esto se le suma otro problema, que es que para todas y cada una de las misiones tendremos que recorrer distancias medianamente considerables. Para viajar en menos tiempo tenemos unas plataformas que nos permiten planear durante algunos segundos, además de vehículos un solo uso que podremos comprar en los puntos de venta, aunque la verdadera solución a este problema de los viajes es el conseguir una moto de usos ilimitados. Para hacerlo tendremos que esperar a cumplir una misión a nivel 25 en la que podremos fabricar nuestro propio vehículo (aunque hace falta dedicarle un buen puñado de horas al juego para alcanzar este nivel) o bien, gastar créditos que se obtienen con dinero real y así poder comprar vehículos sin límite de uso, algo que muchos jugadores agradecerán hasta el infinito y que empujará a una buena mayoría a dejarse unos pocos euros para obtenerlos, sobre todo si tenemos en cuenta que un buen número de usuarios de los títulos F2P juegan a ellos tan solo durante unas pocas horas y que en su mayoría para ellos el tiempo es oro. Por suerte, este es el único aspecto del juego que puede hacernos optar por gastar un puñado de euros, dado que el resto de cosas que podremos adquirir con dinero real son tan gadgets para el aspecto de nuestro personaje o bonificadores de experiencia para aumentar más rápido de nivel.
Si nos cansamos de las misiones también podremos acceder a algunas mazmorras y a un par de jefes de banda para los cuales necesitaremos 20 jugadores si queremos tener alguna posibilidad de superar el desafío. Firefall también cuenta con un sistema PVP y dedica un continente específico para ello en el que los jugadores pasan a formar parte de un equipo y deben conquistar las fortalezas o enfrentarse a los rivales, algo muy parecido a lo que hemos podido ver en TESO o Guild Wars 2. El problema del PVP es que durante el tiempo que hemos jugado no nos hemos encontrado con demasiados jugadores y que está prácticamente limitado a los personajes con nivel máximo altamente equipados, haciendo la diversión casi nula para jugadores con poco nivel en el juego. No es de extrañar este PVP titubeante si tenemos en cuenta los antecedentes, dado que Red 5 Studios eliminó por completo el año pasado el sistema de combate entre jugadores para remodelarlo por completo, sacándose de la chistera el sistema actual que necesita claramente ser ajustado y rebalanceado.
Firefall como FPS
Ahora que os hemos hablado de las pesquisas de Firefall como MMO vamos a proceder a contaros que nos ha parecido como FPS. La sensación ha sido bastante más agradable, aunque salpicada con algunos fallos que estropean la experiencia de juego. Pero vayamos primero con las buenas noticias, y es que el sistema de disparos está resuelto de forma magnífica, el control es suave y completamente intuitivo y podremos personalizar cada uno de los aspectos de la sensibilidad del ratón (con mira, sin mira, en tercera persona…) con una libertad que no hemos visto en casi ningún juego hasta la fecha.
Otra de las cosas que nos ha gustado mucho de Firefall como shooter en primera persona es el ritmo frenético en los combates que en algunos momentos nos recordarán a juegos de culto como Quake o Doom, sobre todo en grandes eventos dinámicos donde alcanzan todo su esplendor cuando nos tenemos que enfrentar con oleadas masivas de enemigos en las que tendremos que correr, apuntar de un lado a otro, usar todas y cada una de nuestras habilidades u objetos y utilizar también nuestro jetpack que nos permite “volar” durante unos pocos segundos y ganar cierta ventaja sobre nuestros enemigos, así como conseguir una buena posición para eliminarlos de forma más sencilla. En general, en algunos momentos durante los combates nos encontraremos con la mejor versión de Firefall, que da la sensación de ser, como FPS, un juego bastante sólido y divertido. Eso sí, cuenta con un par de fallos en los cuales Red 5 ya se encuentra trabajando mientras escribimos estas líneas y es que no se recompensa con daño extra al jugador habilidoso que es capaz de impactar en la cabeza. El otro problema a destacar es la IA de los enemigos, que no está del todo bien pulida y que desencadena en que a veces hagan cosas raras, como tenerlos delante de nuestras narices y no disparar hasta un buen rato después.
Apartado técnico y otros extras
En sí el trabajo que Red 5 Studios ha realizado en Firefall, sobre todo a nivel artístico es bastante reseñable. A nivel gráfico lo que más se puede destacar son los paisajes, las texturas del agua, las rocas, la vegetación y los efectos de iluminación aderezados con ciclos de día y noche que sirven para darle un poco más de vida al mundo de juego. Tampoco esperábamos la última tecnología gráfica, ya que como F2P lo que a los estudios les interesa es equilibrar un nivel de gráficos notable pero accesible a la mayoría de los usuarios y es por esto por lo que los requisitos mínimos no son demasiado elevados y el juego tiene las suficientes opciones de personalización gráfica como para poder correr a una buena tasa de frames en equipos modestos:
Requisitos mínimos:
S.O.: Windows XP SP3.
Procesador: AMD Dual Core @2.6GHz; Intel Dual Core @ 2.2GHz.
Memoria RAM: 4 GB.
Tarjeta Gráfica: Nvidia 8600 o ATI 4xxx con 1 GB de VRAM.
DirectX: 9.0c.
Disco Duro: 20 GB libres.
En cuanto al sonido, la música es un tanto monótona y los efectos de las armas u otros objetos no es que sean bastante reseñables, aunque lo que sí que han hecho desde Red 5 Studios es un trabajo de doblaje excelente, dado que todas y cada una de las misiones tienen sus propios diálogos en audio, y no solo en forma de texto. El mayor problema es que el juego nos llega completamente en inglés y pese a que las misiones cuentan con indicadores que hacen que sea prácticamente imposible desviarse de lo que tenemos que hacer esto supondrá un problema para los jugadores que no tengan un buen dominio del inglés, dado que se perderán parte de la historia del mundo de Firefall y el juego perderá buena parte de magia.
Otras dos características que podemos reseñar en este MMOFPS es su compatibilidad con Steam, (aunque también podemos ejecutar el cliente de forma independiente si así lo preferimos) y su herramienta incorporada de Twitch, que hemos probado y que funciona a las mil maravillas, pudiendo realizar el streaming de nuestras partidas en la plataforma ahora de Google con hacer tan solo un par de clic sin que se vea afectado el rendimiento del juego siempre que tengamos una línea decente.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.