Fatal Stormer
- PlataformaPC4
- GéneroAcción
- DesarrolladorSquare Gem Software
- Lanzamiento04/04/2018
- TextoInglés
- EditorSquare Gem Software
Fatal Stormer: Análisis
Fatal Stormer intenta hacerse un hueco en otro de los géneros de los que más se abusa en Steam. Os contamos si consigue sobrevivir
En tierra de nadie
Quedarse en tierra de nadie es lo peor que puede sucederle a un videojuego que se arriesgue hoy a saltar al agua en mitad de una tormenta, porque eso y no otra cosa es lo que pasa cuando un videojuego se arriesga en Steam. Mucho peor si, además, la nueva propuesta se dirige a un género minoritario hoy, glorioso siempre, al que normalmente se entregan jugadores que lo conocen muy a fondo. Quedarse a medias se transforma entonces en algo complicado de redimir. Algo de esto es lo que le pasa a Fatal Stormer, un shoot em up de los de antes al que precisamente le pesa eso: haberse quedado atrás antes de salir.
Es la primera vez que escuchamos hablar del estudio ruso Square Gem, pero su opera prima enseña unas costuras muy humildes. Demasiado para hoy día, lamentablemente. Por mucho que se dirija a la pantalla grande y no a los dispositivos móviles, sus modelos dan la impresión de esto último con pocas excepciones, y la sensación de estar ante un videojuego a medio hacer se apodera pronto de cualquiera que busque nuevas emociones en un género que dista de estar muerto en cuanto a innovación, aunque pueda parecerlo y por más que muchos de sus acérrimos lo crean también, obviando parte de lo que hoy se hace.
Dejemos clara la principal falta de Fatal Stormer: quien busque una nueva vuelta de tuerca, aunque sea pequeña, a los shoot em up de siempre, no encontrará aquí ni rastro de ella. Ello a pesar de que el juego seguramente está realizado por personas que conocen a fondo el género, ya que de otra manera no se habrían aventurado con él, pero desde luego el resultado de su primer intento no lo termina de demostrar. Es bastante duro comprobar que todo lo que vemos en el juego se muestra exageradamente genérico: demasiado como para despertar el interés del jugador de propuestas de estilo arcade, un tipo de jugador que no anda precisamente falto de estímulos últimamente. Pero no es esa la única pega que encontrará cualquiera que se haya terminado algún episodio de los clásicos de R-Type.
La propuesta de Fatal Stormer se centra en una tienda de mejoras en la que vamos comprando armas primarias y secundarias, además de los clásicos apoyos que rodean nuestra nave, tantas veces vistos ya en clásicos y no tan clásicos. El problema es que un sistema así puede funcionar en cuanto a lo de irnos picando para conseguir este o aquel ítem, y de hecho en torno a esto giraban videojuegos tan disfrutables hoy día como U.N. Squadron en 1989. El problema es que Fatal Stormer no nos plantea desafío alguno para ir consiguiendo nuevo armamento, sino que vamos obteniendo créditos para comprar armas casi independientemente de si jugamos bien o mal, de si pasamos niveles o caemos en ellos mil veces. Podemos completar o no los niveles, pero siempre obtendremos unos créditos para comprar mejoras permanentes en la campaña, en una aproximación que no nos parece acertada para un género que debe recompensar la habilidad, mucho más que la reiteración. Basta jugar el viejo U.N. Squadron en su versión para Super Nintendo para darnos cuenta de hasta qué punto las cosas pueden hacerse mejor en este frente.
No es el único aspecto, y esta es la verdadera desgracia, en el que encontramos videojuegos con muchos años a la espalda que mejoran todo lo que aquí se nos ofrece. La innovación en los shoot em up no es una obligación, y de hecho uno de los mejores que hemos jugado últimamente no tenía prácticamente nada de innovador más allá de actualizar el mensaje para resultar viejo y nuevo a la vez. Así es Super Hydorah, pero a cambio suponía todo un despliegue en cuanto al diseño de sus niveles y el amor por el detalle, mientras en el caso que hoy nos ocupa el principal problema es precisamente el contrario: sus niveles son extremadamente anodinos y los patrones de sus enemigos los hemos visto ya demasiadas veces, sin que haya nada que nos mantenga enganchados a la pantalla. Podemos llevar la combinación de armas que prefiramos, ya que al final obtenerla es solo cuestión de insistir lo suficiente, pero el sopor nos invadirá más pronto que tarde.
El riesgo de no innovar
Es muy loable intentarlo en los géneros más clásicos. Esto no quita que quien lo hace debe valorar antes el riesgo que corre su propuesta, y Fatal Stormer da la impresión de necesitar mucho trabajo aún. Jugándolo se nos ha venido a la mente uno de los grandes títulos de la vieja Neo-Geo que se arriesgaba en lo de no proponer apenas un sello de identidad propio. Aun así, Blazing Star resultaba un auténtico festival gráfico para su momento, y jugarlo hoy aún reconforta a un fanático de las naves. Por el contrario, Fatal Stormer, en su apuesta por la falta de personalidad, se queda claramente corto visualmente, pero también en todo lo demás. Necesita mucho más a nivel gráfico si pensamos que incluso juegos de Playstation 2 como Thunder Force VI (por mencionar un juego realizado con muy pocos mimbres) lucen mucho mejor, y su jugabilidad necesita muchos ajustes para resultar satisfactoria. Además de su aspecto visual muy justo y de su caótico apartado sonoro, hay demasiados puntos a lo largo de sus niveles que nos sacan del juego por lo que vienen a ser pecados capitales en un juego así. Demasiado pronto en la campaña empezamos a encontrarnos puntos donde la acumulación de proyectiles no funciona bien con el tamaño de la nave y sus discutibles hitbox: los momentos frustantes, antes que difíciles o desafiantes, se apoderan del juego incluso en su nivel de dificultad más bajo.
Se puede hoy día lanzar un shoot em up de mucho nivel sin demasiadas capas de innovación, y seguramente lo volveremos a ver en poco tiempo. Es necesaria, eso sí, una jugabilidad a prueba de láseres y misiles que no hemos llegado a encontrar aquí, y este es el grandísimo problema al que se enfrenta este desarrollo humilde. Aunque los gráficos sean básicos para nuestros días, y la variedad de los enemigos en cada episodio pueda ser manifiestamente mejor, Fatal Stormer podría ser un shoot em up más que aceptable con algo más de trabajo en los aspectos jugables, puliéndolo todo hasta un nivel superior. Como está, sencillamente tiene el problema de que hay demasiados videojuegos mejores hoy día, que lucen y se juegan con mucho más agrado mientras inventan, o no, algo nuevo para el género. El problema de Fatal Stormer, además de sus propios errores de principiante, son nombres propios como los de Super Hydorah, Pawarumi, Rive, Sine Mora, Steredenn, Beekyr Reloaded... demasiada calidad y diversión contra la que sencillamente no compite.
Mediocre
Podía ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con él quedará archivado en la estantería para no jugarlo nunca más. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.