Fallout 2
- PlataformaPC7.6
- GéneroRPG
- DesarrolladorInterplay
- Lanzamiento30/09/1998
- TextoInglés
- VocesInglés
El descendiente.
Fallout 2 es, en esencia, Fallout 1 con algunas mejoras.Raras veces tenemos la oportunidad de encontrar un entorno futurista en el que se respetan las reglas de los JDR. Fallout 2 es una de estas rarezas, y los aficionados al género y a la ciencia ficción no podemos dejarlo pasar de largo.
Los juegos de rol suelen desarrollarse en mundos basados en la obra de Tolkien o, cuando menos, en mundos medievales donde el uso de la magia está al orden del día. Raras veces tenemos la oportunidad de encontrar un entorno futurista en el que se respetan las reglas de los JDR. Fallout 2 es una de estas rarezas, y los aficionados al género y a la ciencia ficción no podemos dejarlo pasar de largo.
Fallout 2 es, en esencia, Fallout 1 con algunas mejoras. En un mundo postnuclear la gente vive bajo tierra, en los llamados vaults o bóvedas, a causa de la radiación reinante en el exterior. Cuando la población se aventura a reconquistar la tierra se encuentra con un paisaje desolado y desértico. Unos construyen chozas e intentan cultivar la tierra, otros vuelven a las ruinas de las grandes ciudades, y no faltan grupos que construyen nuevas ciudades utilizando la antigua tecnología y desarrollando otra nueva. Un sector de la población quedó irreversiblemente mutado y parecen nuevas criaturas, que son miradas con recelo por los demás. También la flora y fauna quedó trastornada, las vacas tienen dos cabezas, hay escorpiones y ratas gigantes y los campos verdes brillan por su ausencia, solo las especies más adaptables de plantas sobrevivieron y también surgieron otras nuevas.
El juego comienza cuando tenemos que elegir a nuestro personaje o modificar uno de los existentes y crear otro nuevo a nuestro gusto. Esta última es la opción que utilizan la mayoría de los roleros veteranos. Hay que repartir los puntos disponibles entre las típicas características: fuerza, resistencia, agilidad, etc. Estas influyen sobre las habilidades principales, que incluyen la aptitud en el manejo de variados tipos de armas, capacidad para robar, curar, y hasta cerca de veinte distintas que resultan fundamentales para definir a nuestro protagonista. Finalmente debemos elegir dos rasgos de su personalidad que repercutirán sobre todo lo anterior. A lo largo de la aventura, ganando combates y resolviendo misiones, obtendremos puntos de experiencia, que cada cierto tiempo, además de aumentar nuestros puntos de vida, nos permite incrementar a nuestro gusto las cifras de las habilidades, así como elegir nuevos rasgos que nos enriquezcan.
Geográficamente el juego se sitúa en la costa oeste de los antiguos EE.UU. Nos tenemos que mover entre las ciudades y los puntos de interés atravesando extensos territorios áridos, teniendo a menudo encuentros aleatorios con hombres o criaturas hostiles con los que habrá que luchar para sobrevivir, o huir si la superioridad del enemigo es elevada. También puede haber encuentros con gente amigable o neutral. En las ciudades encontraremos multitud de individuos que nos propondrán misiones. Algunas serán fundamentales para conseguir el objetivo final, pero la mayoría solo sirven para acumular experiencia o ganar dinero. También podemos convencer a más de uno para que se una a nuestra causa y nos acompañe a lo largo de nuestra búsqueda. Y no faltan las tiendas donde proveernos de equipo, además de poder realizar trueques con cualquiera que esté dispuesto.
La lucha se desarrolla por un sistema puro de turnos. Cada personaje dispone de un número limitado de puntos de acción, que dependen directamente de la agilidad de cada uno. Estos puntos se pueden usar como se crea que es más útil. Un punto equivale a un paso, pero podemos gastar varios dando un golpe, disparando un arma, recargándola, buscando en el inventario una cura, etc. Todos los contendientes disponen de su turno por riguroso orden mientras sigan vivos y no pongan la suficiente tierra de por medio con el enemigo más cercano.
Un detalle importante, por comparación con otros juegos de rol, es que no existen los hechizos. Yo no los he echado de menos, dado que la cantidad de acciones y diversidad de armamento es suficiente para mantenernos entretenidos. Además, estarían algo fuera de lugar en una aventura de ciencia ficción futurista.
En Fallout 2 surgen algunos elementos nuevos con relación a su antecesor, siendo el más importante la gestión del grupo. En la primera parte nuestros compañeros iban por libre y era muy complicado hacerles usar un arma determinada. De hecho, la única comunicación con ellos era mediante dos o tres frases distintas y negociando, como si de un personaje cualquiera se tratara. Ahora disponemos de una pantalla en la que elegimos el arma que usará, entre las que tenga capacidad para empuñar y se encuentren en su inventario, la armadura que vestirá y su táctica en combate, además de ver algunas de sus estadísticas principales. También podremos intercambiar objetos con ellos sin que haya dinero de por medio, como ocurría en Fallout 1. El único límite será el peso que pueda acarrear cada uno.
El resto de las innovaciones en esta secuela son: un nuevo argumento (lógicamente), más ciudades y más misiones que realizar, y algún elemento curioso, como un coche que nos permite viajar más rápido y seguro, pudiendo usar su maletero para guardar toda la morralla que sobrepase nuestro inventario y deseemos reservar para más adelante
Fallout 2 conserva todo lo bueno del primero y, desgraciadamente, también lo malo. Por tanto, quien disfrutó con la primera parte puede seguir haciéndolo con la segunda, y quien no lo hizo que se abstenga de comprarlo, ya que casi todo se ha mantenido sin variación.
La música ambienta bien el entorno y el sonido es casi inexistente, solo se oye algún pequeño efecto de fondo como ladridos de perros y, durante los combates, el ruido de los disparos.
La agilidad es una característica vital. Repercute en los puntos de acción que tenemos en cada turno en las batallas y en varias habilidades como la de robo, que nunca es despreciable para conseguir objetos por un camino más rápido.
Lo cierto es que a lo largo del juego podemos aumentar las habilidades a nuestro gusto, pero la manera en que comiencen será un lastre hasta el final. Hay que preocuparse cuidadosamente de desarrollar el conocimiento de las armas, que es lo que nos sacará las castañas del fuego en la mayoría de las ocasiones.
En los encuentros aleatorios en el desierto, debemos valorar las posibilidades de victoria. Al principio lo recomendable es huir, ya que la superioridad numérica y armamentística del enemigo suele ser clara. Ya habrá momento de meterse en ese tipo de luchas. Pero no conviene demasiado realizar expediciones por los territorios entre ciudades para buscar camorra y aumentar la experiencia, a no ser que estemos muy surtidos de munición. No es raro acabar luchando cuchillo en mano contra tipos con rifles de plasma
Sea como sea hay que grabar el juego muy a menudo, pues la muerte espera en cada esquina. También es buena idea grabar antes de intentar robar algo por si fracasamos, aunque los puristas pueden considerar esto, con cierta razón, hacer trampas.
Hay que tener en cuenta el Karma. Este se ve en la pantalla del personaje y es una cifra que oscila alrededor del cero. Cuanto mayor sea, más fácil nos será comunicarnos con los demás y conseguir que nos ayuden. Si baja mucho, nadie querrá hablar con nosotros. Dado que muchas cosas se pueden conseguir matando a todo el mundo y saqueando sus cadáveres. Es elección personal de cada uno el ser un buen chico o una mezcla de Al Capone y Freddy Krugger. También cuenta la opinión que se tenga de nosotros en cada ciudad, que comienza siendo neutra y cambia igual que el karma pero en el ámbito local. No hay que olvidar, una vez más, la opción de robar, que no afecta a nuestra fama, siempre y cuando no nos pillen con las manos en la masa.
Su pinchamos en el suelo el personaje se dirige allí, siempre y cuando no haya obstáculos y sepa llegar. Sin embargo, se encuentra muy poco desarrollada la capacidad del programa para buscar caminos posibles. Moviendo el cursor al extremo de la pantalla se produce un scroll en esa dirección que nos permite ver los alrededores más cercanos a nuestra posición.
En la parte de abajo disponemos de botones de inventario, características del personaje, habilidades que podemos usar, etc., que se utilizan intuitivamente.
En general ha heredado todo lo bueno de la primera parte, destacando la complejidad de las características del personaje y el realismo macabro de las muertes violentas, aunque esto último va en gustos. Ha crecido en extensión y numero de misiones y a aumentado algo en dificultad. Hay que resaltar la nueva gestión del grupo y la nueva historia, atrayente desde el principio.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.