Mueve tu cuerpo...

El Eye Toy de PS2 fue, para algunos un aparato revolucionario, mientras que otros opinaban que era un simple sacadinero para freakies. Aunque nunca se pondrán de acuerdo, Sony tiene bien claro que es una de sus apuestas más fuertes y nos trae el segundo juego para Eye Toy, esta vez destinado a los más bailones.

A lo largo de la historia de los videojuegos hemos encontrado periféricos curiosos y divertidos. Desde las maracas de Samba de Amigo para DreamCast hasta las guitarras de Guitar Freaks, pasando por las distintas alfombras de baile y la original katana de Onimusha 3, los desarrolladores nos han sorprendido con propuestas cada vez más osadas.

Sony lanzó Eye Toy con el objetivo de innovar y dar una nueva dimensión a los videojuegos introduciéndote directamente en el mismo centro de la acción y eliminando cualquier tipo de controlador externo. En el juego nosotros y nuestros movimientos es lo único que hace falta.

Eye Toy: Play nos ofrecía una docena de juegos entre los que contaban el divertido Kung Foo o el cachondo Wishi Washi. Ahora se nos presenta Eye Toy: Ritmo Loco, como una ampliación o un nuevo juego basado en el Boogie Down del primer Eye Toy.

g r á f i c o s

Al igual que en Eye Toy: Play, los gráficos son un apartado menor dentro del juego. Los menús son simples botones sobre los que pulsar con nuestros movimientos y durante el desarrollo del juego lo único destacable son los efectos visuales tipo Matrix o caleidoscópicos en determinados momentos del juego. Muy discretitos y sin ningún avance desde el primer Eye Toy: Play.

s o n i d o

Eye Toy: Ritmo Loco es un juego totalmente orientado a la música y por tanto cuenta con un importante elenco de canciones de grupos y cantantes conocidos. Jamiroquai o Las Ketchup prestan sus canciones para el juego.

j u g a b i l i d a d

Eye Toy: Ritmo Loco podría haberse llamado perfectamente Eye Toy: Boogie Down 2.0. Los que hayan jugado al Boogie Down del primer Eye Toy verán que las directrices son las mismas.

El juego nos propone movernos al ritmo de la música y, desde el centro de la pantalla, estirar las manos para seguir los movimientos de unas pequeñas cabezas voladoras. Estas cabezas salen desde el centro y se dirigen hacia unos pequeños auriculares. En el momento en que se acoplen deberemos pasar la mano por encima y serán capturados.

Lo que parece sencillo se comienza a complicar cuando las cabezas aparecen de cuatro en cuatro o de seis en seis, lo que nos obligará a veces a dejar las florituras de Fiebre de Sábado Noche con las que todos comenzamos a jugar y empezar a movernos un poco más rápido, pero siempre intentando no hacerse daño ni darnos contra algún mueble.

Además se han implementado nuevos movimientos, marcados con una estrella, en los que tendremos que arrastrar la estrella en el sentido indicado en la pantalla mientras seguimos encadenando cabezas voladoras. Al final de la partida, el juego nos mostrará fotos de algunos momentos y un pequeño video con las imágenes más esperpénticas de nuestro baile, video y fotos que podremos guardar en la memory card para ser la envidia o el recochineo de nuestros amigos.

Las modalidades de juego son bastante escasas. Tendremos el modo normal, con cuatro niveles de dificultad para cada canción y el modo multijugador. Este modo se divide en dos, el modo cooperativo y el modo batalla. El modo batalla es igual al del primer Eye Toy y los concursantes se turnarán para intentar conseguir la mejor puntuación. El modo cooperativo es bastante más divertido y en él tendremos que terminar los niveles con la ayuda, o en la mayoría de los casos con la tara, de un compañero a nuestro lado.

También tendremos dos modos extra, en uno de ellos podremos crear nuestros pasos de baile para jugarlos posteriormente con las canciones que elijamos y el otro llamado zona de descanso, en el que se nos da la opción de escuchar las canciones que queramos, jugando con los diferentes efectos visuales que el juego nos ofrece. En esta misma zona también tendremos acceso a los videos musicales de los artistas.

c o n c l u s i ó n

Eye Toy: Groove es un juego entretenido, pero seguramente sólo será divertido si lo jugamos acompañado de gente con ganas de reírse de si mismos. Es uno de esos juegos, junto a otros como Guitar Freaks o Dance Dance Revolutions, ideales para una tarde en casa con amigos a los que no les haga mucha gracia el Soul Calibur o similares.

Sin embargo tiene dos defectos graves. En primer lugar es demasiado parecido al primer Boogie Down de Eye Toy: Play. Ritmo Loco tiene algunas mejoras, más dificultad y una selección de canciones mucho más conocidas y de mayor calidad, pero se nos antoja corto para ser un juego independiente. Uno de los grandes aciertos de Eye Toy: Play era la variedad de minijuegos, cosa que no ocurre aquí.

El otro defecto es que jugarlo solo es bastante soso. Mientras que una partida a Dance Dance Revolution siempre es entretenida, ponernos a golpear el aire en nuestra habitación no es tan divertido.

En resumen, una ampliación correcta, con buena música y mucha diversión en grupo, pero que cojea mucho cuando se juega solo. Una compra recomendada para los que acostumbren a dar fiestas en casa y tengan amigos activos y sin vergüenza, pero que sin embargo se nos antoja insuficiente como reclamo para adquirir el Eye Toy.

L o   M e j o r

L o   P e o r