Cierto es que a una compañía no se le puede exigir que en todos sus lanzamientos se alcance un nivel propio de un bombazo, pero tampoco que presente un título con un nivel técnico propio de la generación pasada. Lamentablemente para la franquicia que representa, Evil Prophecy es uno de ellos.
Cierto es que a una compañía no se le puede exigir que en todos sus lanzamientos se alcance un nivel propio de un bombazo, pero tampoco que presente un título con un nivel técnico propio de la generación pasada. Lamentablemente para la franquicia que representa, Evil Prophecy es uno de ellos.
Evil Prophecy (PS2)
Realmente, pensábamos que tras títulos como Underworld, nada ya podía sorprendernos negativamente en una consola de 128 bits. McFarlane's Evil Prophecy lo ha conseguido. En un nuevo juego, con un diseño artístico nacido de la incombustible mente de Todd McFarlane (Spawn), Konami Hawaii (que nadie confunda a este estudio con los genios de Konami Japon) nos brinda la oportunidad de jugar a uno de los peores juegos que han pisado el catálogo de PlayStation 2, todo un despropósito al objetivo de ofrecer ideas atractivas y divertidas al comprador.
Evil Prophecy (PS2)
Evil Prophecy (PS2)
Realmente no es más que un argumento excusa para poneros en pantalla a decenas de enemigos para aniquilar. Una idea atractiva, y muy bien resuelta en juegos que han usado la misma fórmula (Devil May Cry), pero el problema llega cuando nos damos cuenta que, a dicho argumento básico, se le ha acompañado de una pésima realización técnica, y un limitadísimo apartado jugable.
Evil Prophecy (PS2)
Evil Prophecy (PS2)
Escenarios sosos, monótonos y sin valor artístico alguno, acompañados de unos modelados deficientes para los personajes (realmente creemos que su carga poligonal podría contarse con los dedos de pocas manos, y dudo que apenas tuvieramos que usar un par de ellas para los enemigos), sin apenas remarcable nivel de detalle, y con unas tristes y robóticas animaciones para estos. Ni sombras, ni efectos gráficos... nada. Además, todo acompañado de una persistente y excesiva niebla (ni que esto fuera un Silent Hill, oigan!) propia de los primeros juegos aparecidos en la 64 bits de Nintendo.
Evil Prophecy (PS2)
Vamos, algo prácticamente no visto en ninguna consola de 128 bits. Solo una básica animación para la sangre que brota al golpear a nuestros enemigos, pero que se limita a ser una repetición del mismo brote, una vez y otra, independientemente de la zona donde hayamos golpeado ni de la intensidad con la que lo hayamos hecho. Vamos, en resumen, un apartado gráfico que no luce en ninguno de sus aspectos, y que para nada aprovecha la gran potencia que brinda la consola.
Evil Prophecy (PS2)
Evil Prophecy (PS2)
Evil Prophecy (PS2)
Al menos es de agradecer que para los fans del señor Todd McFarlane, se han añadido unos extras tales como diseños de monstruos y demás obras gráficas del diseñador de los enemigos del juego. Es triste que tras colaborar en juegos de la talla de Ultima Online, al pobre de Todd le haya tocado colocar su nombre en un juego tan limitado.
Evil Prophecy (PS2)
Evil Prophecy (PS2)
El problema llega cuando su precio es el mismo con el que salen a la venta durante estas semanas bombazos de la talla de GTA: San Andreas, PES4 y Killzone, y que por la mitad de precio tenemos juegazos como Las Dos Torres y El Retorno del Rey. Desde Meristation, pensamos que el asunto deja de ser una divertida broma, para pasar a convertirse en una broma de mal gusto.
l o m e j o r
l o p e o r
3
Malo
La idea era buena pero se ha llevado a cabo de forma desastrosa. No te lo compres, está mal terminado.