Evil Dead: The Game, análisis. Un homenaje al mundo de Sam Raimi

Justo en el mismo mes en que celebramos la vuelta de Sam Raimi al cine de superhéroes con la demencial -y gozosamente pura Raimi- Doctor Strange en el Multiverso de la Locura, llega Evil Dead: The Game, el videojuego más reciente basado en la franquicia llamada en España Posesión Infernal. Y es que siempre, siempre hay que celebrar la vuelta del Rey por excelencia en esto del Terror: Ash Williams, el encargado de la sección de electrodomésticos y rey del palo de fuego. Todo lo que nos ha parecido este multijugador asimétrico, a continuación.

“Come get some…”

Desarrollado por Saber Interactive, compendio de estudios todoterrenos que lo mismo te remasteriza / portea a otros sistemas con acierto Halo: The Master Chief Collection, The Witcher 3 para Switch o la trilogía Crysis y te firma títulos como World War Z, Shaq Fu: A Legend Reborn o NBA 2K Playgrounds 2, en Saber ya saben lo que es lidiar con franquicias icónicas de los 80 del Fantástico. Y tras la gran remasterización de 2019 de Ghostbusters The Videogame -que en España perdió su fabuloso doblaje por cuestiones de licencias-, se atreven a firmar un título original sobre Evil Dead, una franquicia que, aunque apenas ha dado tres películas y un remake, fuera del cine ha tenido una hilarante serie de TV, comics, libros y juegos, una decena de videojuegos propios desde el Commodore 64 hasta iOS y Android, pasando por la 5ª y 6ª generación de PlayStation, PS2, Dreamcast y Xbox.

¿Qué es Evil Dead: The Game? Pues en Saber han apostado por lo que están haciendo con otras franquicias del terror de los 80s, como Viernes 13, Predator o la misma Cazafantasmas en su última entrega, Spirits Unleashed. Multijugador, y además asimétrico. En vez de crear una clásica campaña monojugador que recree los films (como el juego que salió en el año 2000) o apostar por una nueva trama (los juegos de PS2), tenemos una experiencia Coop / PvP con Ash, con Kelly y Pablo de Ash vs the Evil Dead, 25 armas incluyendo las icónicas de la saga, mapas con la obligada cabaña de Evil Dead, 4 clases de personajes para elegir: Líderes, Guerreros, Cazadores y Apoyos. Y 3 clases de demonios: Warlords, Puppeteer y Necromancer. Pero ya está, ese es el paquete inicial de contenido, y es de esperar que Saber Interactive siga lanzando actualizaciones y más elementos para enriquecer el título, escueto en su lanzamiento.

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Entrando en materia, los aficionados de la trilogía cinematográfica de Sam Raimi (junto con su tristemente cancelada serie de televisión) están de enhorabuena. Este juego de terror asimétrico pretende dar una vuelta al género de los juegos de multijugador asimétrico. Pero que no lleve a la confusión: esto no es Dead by Daylight, no. No pueden ser más diferentes. Comparten el sistema de cuatro jugadores contra uno, lo único. Evil Dead: The Game es más bien una fusión entre Friday the 13th (Illfonic) y un clásico como Left 4 Dead, y aún así brilla con auténtica luz propia.

El nuevo título de Saber nos propone, por un lado, meternos en la piel de los 'Supervivientes' o del 'Demonio kandariano'. En el caso de los primeros, antes de empezar la aventura tienen que elegir entre cuatro roles diferenciados: 'Líder', 'Guerrero', 'Cazador' y 'Apoyo'. Cada una de estas clases cuenta con sus propias características, sistema de progresión y habilidades especiales. Durante la partida tienen cinco objetivos: encontrar tres partes de un mapa, conseguir las páginas perdidas del Necronomicón, conseguir la daga kandariana capaz de aniquilar el mal, acabar con un boss final (aquí llamados los Antiguos) y, por último, proteger el libro de los muertos de los 'deadites' (los poseídos del universo Evil Dead). Para ello, hasta que el jugador 'Demonio kandariano' les dé caza, tienen una fase de búsqueda de recursos por las diferentes zonas que tiene el mapa (único mapa), que por cierto, es bastante amplio para lo que viene siendo habitual en ese tipo de juegos. Hachas, lanzas, martillos, escobas de fuego, fusiles de caza, motosierras... todo lo que encuentres bienvenido será para defenderte del mal que asola el mundo.

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La premisa es bien sencilla y sobre el papel puede parecer extremadamente repetitivo porque, de lanzamiento, esta es la estructura del juego. Pero los objetivos cambian de situación en cada partida, y el mapa es tan extenso que consigue que cada experiencia sea diferente a la anterior, pues muchas de las zonas del mapa ni las olemos.

Por el contrario, las mecánicas del jugador que controla al mal son bien distintas. Aquí no se controla un personaje en concreto, eres un ente, un alma, EL MAL. Va por el mapa de forma etérea, en primera persona y a toda velocidad, todo un guiño a las películas de Raimi. Su objetivo es poner trampas, invocar demonios, poseer a jugadores para tomar el control de su personaje y acabar con el resto de compañeros. También puede meterse en la piel y huesos del villano principal que haya elegido antes de comenzar la partida o de cualquier zombie que haya sido invocado o esté pululando por el mapa. Y aquí viene una de las cosas interesantes: los 'Supervivientes' deben controlar su barra de miedo, porque cuando el acongoje sea máximo, será detectado por el demonio kandariano y más fácil será ser poseído por el mal.

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Dentro de cada partida contaremos con un sistema de progresión única para esa sesión, en el que iremos aumentando niveles de nuestra fuerza, resistencia, miedo, etc..., gracias a unas botellas que iremos encontrando por el escenario (en el caso de los supervivientes). El demonio subirá experiencia a medida que vaya molestando al resto de jugadores. Luego, por otra parte, tenemos el sistema de progresión clásica para nuestro personaje fuera de la partida en el que subiremos de nivel diferentes tipos de habilidades para ir bien preparados para la siguiente incursión a los bosques de Evil Dead. Esto diluye cualquier sensación de partidas sin recompensas, muy características de este género de juegos, lo que lo hace más adictivo y a valorar.

El título cuenta con una 'campaña' (llamarla así es ser generoso) que sirve como entrenamiento para lo que viene en el online y también para desbloquear a varios personajes de la saga, como el Ash de la serie, Lord Arthur (de Army of Darkness) o al bueno de Pablo, también del show televisivo. Se antoja corta, sin sabor, y peca de no tener checkpoints... algo que llega a ser frustrante en muchas ocasiones. Misiones sencillas de recadero donde nos moverá por diferentes zonas del mapa y poco más. Lo dicho, para conseguir los desbloqueables.

A nivel gráfico engancha y funciona. Visualmente es una delicia de ver y en PS5 y PC (versiones donde se ha probado el juego) funciona en una tasa de 60 frames estables. Además del estupendo modelado de personajes, sus animaciones adaptadas a la situación y su lograda ambientación, Evil Dead es un festival del horror, la sangre y casquería que, acompañado de un gran diseño sonoro, hará las delicias de todo fan del género. Mención especial también a las ejecuciones que hacen los Supervivientes a los deadites, que toman como referencia al mismísimo Doom de 2016, y que no se cortan lo más mínimo en ser lo más explícitos posibles. Aquí han dejado volar su imaginación más gritesca.

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