DOTA 2
DOTA 2
Historia viva del videojuego, Defense of the Ancients ha marcado la vida de millones de jugadores desde sus comienzos como mod de Warcraft III y ahora Valve se encuentra completamente lista para llevar el fenómeno a un nuevo nivel. Infinidad de posibilidades y un gran modelo de negocio con el que disfrutar plena y gratuitamente del juego, esas son las bazas del nuevo DOTA.
Pero donde Dota 2 no escatima, a diferencia de su principal competidor, es a la hora de incorporar a este sencillo concepto de juego un sinfín de complejas mecánicas, que lo acaban convirtiendo en uno de los productos más exigentes y profundos del momento. Dota 2 dispone de una plantilla de más de 100 héroes, todos únicos y diferentes entre sí, pero no autosuficientes. Cada uno de ellos puede ejercer uno o varios roles en el campo de batalla, pero su reparto de habilidades le hacen tan poderoso en determinadas situaciones como débil en otras. Drow Ranger, por ejemplo, es un héroe letal en el combate a distancia, pero sufre cada vez que se enfrenta a un enemigo cuerpo a cuerpo, a diferencia de Axe, mortífero en distancias cortas pero débil contra hechiceros. El plantel de personajes disponibles a día de hoy es, a falta de algunas incorporaciones, calcado al del primer Dota, y eso es garantía de un balanceo y equilibrio entre ellos en el que se lleva trabajando casi una década. Un papel crucial en el potencial de un héroe lo juegan los ítems, cuyas propiedades también se alejan, en su mayoría, del mero y plano incremento de estadísticas. La mayoría disponen de habilidades únicas que, complementadas con las del propio héroe, abren un abanico de posibilidades casi infinito. Un mismo héroe puede jugarse de distintas formas según las características de los objetos que vamos adquiriendo a medida que avanza la partida. El ejemplo más claro de esto lo tenemos precisamente en el recién incorporado Abaddon, uno de los personajes más polivalentes del juego. El homónimo de Arthas en Dota 2 es capaz de realizar tareas de soporte, tanke o portador según cómo lo equipemos, y gracias esa polivalencia, Dota 2 nunca ofrezca dos partidas iguales.
Hay héroes de todo tipo, unos más sencillos de utilizar que otros. Desde a las 2 habilidades activas y 2 pasivas de Phantom Assassin, a las más de 10 de Invoker. Algunos dependen más de los objetos que llevan, y el potencial de otros se sustenta en el nivel de sus habilidades. Pese a que están catalogados en tres categorías diferentes (fuerza, agilidad e inteligencia), eso no delimita el rol que pueden desarrollar en la partida. Los hay resistentes y que aguantan mucha cantidad de daño como Pudge, que resultan devastadores con sus ataques como Lina, que son capaces de "portar" las riendas al final de la partida si juegan bien sus bazas durante el inicio de la misma como Spirit Breaker, que pueden incapacitar a los héroes rivales como Bane, que apoyan a sus aliados con curas y/o aturdimientos como Omniknight, que tienen la habilidad de progresar en la jungla desde el inicio de la partida como Lifestealer, que son difíciles de rematar por sus habilidades escurridizas como Riki, o que ayudan a presionar una línea como Nature's Prophet. Y cada uno de ellos puede hacer funciones similares, pero de distinta forma. Y siempre efectivos cuando combinan correctamente sus habilidades con otro compañero. Es posible que un personaje tenga la posibilidad de aturdir a un enemigo, pero no de infringirle daño. Sin embargo, estando en una línea mano a mano con un héroe devastador, pueden fácilmente acabar con un rival. Lo ideal para los no experimentados es empezar a practicar con héroes que no requieren de muchos objetos y habilidades activas como Sven, Lich o Phantom Assassin, y a medida que vayan adquiriendo experiencia empezar a probar héroes mucho más complejos y versátiles como Meepo o Invoker.
Una vez superados dichos tutoriales, podemos empezar a practicar partidas contra bots (cuya inteligencia artificial en los modos de dificultad avanzados, es tremenda) o contra jugadores reales, en emparejamientos más o menos equilibrados gracias al sistema de "matchmaking". Un sistema no exento de fallos, pues a día de hoy hay algunas ocasiones en las que encontraremos en nuestra partida algún jugador con un nivel muy superior o inferior al nuestro. Valve no se ha pronunciado al respecto, pero es de esperar que a medida que la masa de jugadores se estabilice, poco a poco dicho sistema sea capaz de juntar solo jugadores de habilidad similar en cada partida. Insistimos: Dota 2 es un juego complejo y difícil para el recién llegado, y no es hasta pasadas unas semanas cuando poco a poco se le va tomando la medida. Nuestro consejo es que no os desesperéis, pidáis ayuda a los más experimentados, leáis todas las guías que podáis de las miles que podréis encontrar en internet y seáis amables con el resto de jugadores. Si conseguís superar el duro primer contacto con el juego, se os abrirá ante vosotros una de las experiencias más ricas y adictivas que hayáis podido probar en plataforma alguna.
Y es que Dota 2 es un juego único, en el que como decimos, nunca participamos en dos partidas iguales. Pertenece a ese a grupo de legendarios títulos que han llevado esto de los videojuegos a un nuevo nivel, como Counter Strike, Quake o Starcraft. La escuela del "Easy to learn, hard to master". Lo que realmente son este tipo de juegos no se descubre hasta haberle dedicado días, semanas o incluso meses. Una vez aprendidas las mecánicas básicas del juego, el límite de lo que puede llegar a pasar en una partida lo ponen los jugadores. Infinidad de estrategias distintas, la mayoría de ellas válidas, se ejecutan en cada partida. En algunas los jugadores se distribuyen a pares en la línea superior e inferior dejando la del medio para un duelo uno contra uno, en otras hay un jugador que se dedica a progresar en la jungla para aparecer en línea con el único objetivo de "gankear", e incluso hay algunas partidas en las que son 3 los jugadores que deciden presionar una misma línea, dejando a los 2 restantes cubriendo el resto.
En Dota 2 no encontraréis ese establecido y restrictivo "meta" característico de League of Legends, que hace que muchas de las partidas acaben siendo repeticiones unas de otras. Igualmente, esa variedad de objetos disponibles hacen que ni tan siquiera un personaje se juegue de la misma forma en una partida que otra. Podréis experimentar con cada uno de ellos todo lo que queráis, adaptándoos tanto a vuestro equipo como al equipo rival, con el objetivo de contrarrestar su potencial mientras destapáis el vuestro. Existen diversos modos de juego, alguno de ellos francamente interesante para los recién llegados como el "Single Draft", que nos permite escoger un héroe de entre tres propuestos, o el "Least Played", que sólo nos deja elegir a uno de los héroes que menos hayamos jugado hasta el momento. Es, sin duda, una buena forma de familiarizarse con la amplia plantilla de héroes disponibles, y un buen primer paso para ir practicando los diferentes roles.
Pero donde realmente se ha dado un salto incalificable es en todo lo que forma parte y rodea al cliente del juego. Empezando por el apartado gráfico y terminando por las posibilidades que nos brinda el mismo. Técnicamente, Dota 2 se ha diseñado sobre el motor Source, con un detalle y un cuidado superior al de cualquier competidor. El modelo para cada personaje, las texturas que los visten, sus animaciones, los elementos destruibles del escenario o los efectos de luz y partículas para las habilidades hacen de cada batalla un espectáculo gráfico. El apartado audiovisual se ve redondeado por unos magníficos efectos sonoros entre los que destaca el doblaje aplicado a cada héroe (en inglés), y una no menos acertada banda sonora formada por diversos temas de corte épico, que suenan de forma variada a lo largo de cada partida. Pero además, el cliente del juego abre las puertas a una infinidad de características como no se habían visto hasta ahora en un juego de corte competitivo. Dentro de la partida están implementadas funcionalidades como la pausa, o la posibilidad de abandonar una partida sin que afecte a las estadísticas de nuestra cuenta si alguno de los otros 9 jugadores ha abandonado prematuramente la misma, o la de reconectar si hemos perdido temporalmente nuestra conexión a internet.
Por otra parte, desde los propios menús del juego podemos ver en directo cualquier partida que se esté jugando en el mundo a través de una interfaz que nos permite no solo disfrutar del "match" desde cualquier punto de vista, sino incluso contemplar partidas profesionales retransmitidas por uno o varios comentaristas sin tener que recurrir a servicios de 'streaming' ajenos al juego. Podemos seguir una partida desde su perspectiva o bien disfrutarla desde los "ojos" de uno de los participantes viendo en todo momento sus acciones, algo que nos ayudará además a aprender nuevas estrategias. Y no solo eso: cada partida que juguemos quedará registrada en la base de datos de Valve con su correspondiente repetición, que podremos descargar, compartir y visualizar en cualquier momento. Desde el propio juego también podemos acceder a una completa enciclopedia que explica y detalla todas las habilidades y objetos del juego, con vídeos de demostración para las primeras y guías creadas por los usuarios como referencia para cada héroe. Gracias a ellas, podemos practicar diferentes roles para nuestro personaje desde la propia partida, sin tener que buscarlas en internet. En definitiva, Dota 2 dispone de todo lo necesario para redondear una experiencia que va mucho más allá de lo que se vive en las propias partidas.
¿Y sabéis lo mejor de todo? Que Dota 2 es completamente gratuito.Ninguna de las funcionalidades que hemos detallado nos obliga a pasarpor caja. Todos los héroes, modos de juego y posibilidades estáncompletamente disponibles tras descargar el juego. Algo lógico teniendoen cuenta que, tratándose de un juego competitivo, el no disponer detodos los héroes con los que contrarrestar a otros afectaría gravementeal equilibrio de las partidas, como le pasa a League of Legends. Dota 2sí incorpora una tienda en la que comprar objetos con dinero real, perose limita a ofrecer modificaciones visuales creadas por la comunidad (y la mayoría de ellas pueden obtenerse de forma aleatoria y gratuita como recompensa por jugar partidas) yentradas que sirven de acceso a torneos profesionales, como si de un PPVse tratase. A colación de lo primero, cualquier usuario puede diseñarsus propias armas y armaduras para los héroes, e incluso ganar dinerocon sus obras si Valve las acepta e incorpora en la tienda. Estafuncionalidad ha desatado un auténtico torrente creativo en el que yahan despuntado auténticos artistas como nuestro compatriota "Danidem",ganador del concurso de diseño Polycount Contest 2012 con su set "Riderof the Storm" para Disruptor. En definitiva, que como veis, el potencialque rodea a Dota 2 se extiende más allá del propio juego.
Resumiendo: Dota 2 lo tiene todo para convertirse en el juego más importante de la plataforma en los próximos años. Como decíamos al principio, el crecimiento de la "scene" ha sido tan espectacular en los dos años de beta cerrada, que es imposible imaginar hasta dónde puede llegar ahora que se permite el acceso al juego a todo el mundo. Decenas de torneos profesionales, miles de vídeos dedicados al título, millones de partidas jugándose mensualmente, un sinfín de foros y comunidades que cubren a diario todo lo que rodea al juego... Es tanta la atención que acapara desde ya, que Valve está ultimando una película-documental titulada "Free to Play" para mostrarnos todo este fenómeno desde el punto de vista de los jugadores profesionales que viven de jugar a Dota 2. El lanzamiento del film está previsto para este mismo verano, posiblemente coincidiendo con la celebración de la tercera The International los próximos días 7-8-9-10 y 11 de agosto, el torneo más importante del mundo de los e-Sports y que, este año, ofrecerá un premio en metálico de más de 2 millones y medio de dólares a repartir entre los mejores equipos de Dota 2 del mundo.
Pero volviendo al mundo terrenal, no hay razón alguna por la que ningún aficionado a los videojuegos no debiera, al menos, darle de una oportunidad a Dota 2. Hablando en plata, es un juego perfecto en lo que hace, como lo era Quake como shooter o Starcraft como RTS. Los 10 años que lleva puliéndose su propuesta y el salto cualitativo y tecnológico que el binomio Valve-Icefrog ha materializado con esta secuela nos garantizan un futuro en el que Dota 2 será referente. No estamos hablando de una moda pasajera. Estamos ante un fenómeno que empezó siendo un mod independiente y que se ha convertido en una forma de vida para los más privilegiados, desde jugadores como Dendi hasta comentaristas como Tobiwan, sin haber necesitado de los famosos y polémicos golpes de talonario de Riot para hacerse un hueco en el mundo de los e-Sports. Dota es lo que es hoy en día por méritos propios. En definitiva, que estamos ante uno de los mejores juegos que han aparecido en los últimos años para plataforma alguna, y posiblemente el mejor producto que se puede encontrar en el mercado en relación a su calidad/precio.
Obra maestra
Una obra maestra que ha dominado su género para colocarse en la cima del mismo. Un coloso de su generación que seguirá siendo comentado y recordado en el futuro. La nota máxima no implica perfección, sino que es usada para señalar a un referente absoluto en el que los demás pueden y deben mirarse. Cómpratelo incluso si no te gusta el género (Nadie podrá decir que no tuviste Quake, Ultima Online o Grand Theft Auto III de turno).