El DOA más completo

Tras el susto que supuso el retraso de DOA4 en territorios PAL del 2 de diciembre -como título de lanzamiento- a una fecha sin concretar de enero, por fin el último título del Team Ninja está hoy día 27 en las estanterías de toda España. Pero no sólo ha sido Europa quien ha sufrido con la privación de éste, uno de los mejores juegos del catálogo de Xbox 360. Nipones y americanos también tuvieron su correspondiente ración de incertidumbre, producto de las últimas pinceladas de artista que Itagaki-san daba al cuarto capítulo de su serie de lucha.

Todos los usuarios que se indignaron ante esta situación han obtenido un remedio balsámico. Con DOA4 entre las manos se olvidan instantáneamente todas esas penurias que en forma de retrasos y dilaciones se han venido sucediendo. Y es que este cuarto título de la saga, tercero en exclusiva para una consola Microsoft tras DOA3 y la recopilación online que supuso Ultimate, confirma la trayectoria ascendente y la madurez que esta franquicia está alcanzando.

La propuesta que se hace desde Tecmo no puede ser más halagüeña; nuevos luchadores, mejoras en el sistema de combate, escenarios ampliados exponencialmente, física más realista, modo a través de Internet desarrollado desde la experiencia previa y un nuevo y potente hardware para explotar por un equipo que sentó cátedra en la pasada generación, donde todas sus producciones han sido visualmente impecables.

El argumento en esta ocasión se centra en el enfrentamiento de dos bandos, los ninja liderados por Ryu Hayabusa que tienen como fin destruir a la eterna DOATEC, y por otro, la corporación en sí misma, al frente de la cual se encuentra Helena. En este capítulo DOATEC ha conseguido obtener el ADN del luchador más completo del torneo anterior, la exiliada Kasumi, y con él crear un clon mejorado, Alpha-152. La mayoría de personajes se ven envueltos en este enfrentamiento y toman parte por un bando u otro, aunque existen algunos que se quedan al margen y compiten en el torneo Dead or Alive únicamente por motivaciones personales.

En comparación con títulos previos, el argumento se ha enriquecido, ahondando en la faceta individual de cada luchador. En DOA4 se revelan detalles acerca de cada personaje que ninguno de los tres juegos anteriores había mostrado. Se podrán descubrir en secuencias previas a los combates clave y en los finales cinemáticos de cada uno, generados por ordenador.

Gráficos

Como muchos de los lectores ya conocerán por las informaciones que llegan desde la prensa extranjera, visualmente no encontramos un salto abismal en DOA4. Los gráficos siguen muy de cerca lo visto en DOA Ultimate, con añadidos en puntos concretos como la profundidad y carga de los escenarios, mejora de las texturas -y del bump mapping-, aumento de elementos dinámicos en el vestuario de los personajes -especialmente el pelo- y como no, soporte para HDTV que llega hasta los 1080i.

En los escenarios, dieciséis en total, se puede ver una cantidad de elementos en segundo plano abrumadora. En ellos es donde se aprecia de una forma más clara el salto generacional. La carga de renderizado de todos estos elementos es alta, pero la consola la maneja de una forma sólida y sin presentar ningún tipo de tirón en los 60 frames por segundo mantenidos a los que discurre la acción. Algunos de los fondos son simplemente espectaculares y necesitan verse en directo para apreciar la belleza del conjunto, difícilmente apreciable desde una captura o un video parcial.

Los más destacados son Kyoto en pleno florecimiento, con multitud de pétalos volando, varias construcciones niponas de fondo y un río al cual podemos acceder; el paraíso del jugador -recreación de Las Vegas- con un deslumbrante juego de iluminación procedente de los casinos y con tráfico; el valle de la cascada, que consta de puente y de lago con una sorprendente representación del agua -con reflejos y movimiento dinámico añadidos- y vegetación casi fotorrealista, o el ring del Coliseo DWA, con un público detallado y en 3D, iluminación propia de discoteca y videowall. Su tamaño es mucho mayor que en DOA3 y no es extraño que necesitemos varias horas para poder apreciar toda su extensión. Muchas veces para acceder a unas determinadas zonas, será necesario empujar al oponente hacia ellas, como es costumbre en la serie.

Los modelados de los luchadores han avanzado en cantidad de polígonos, texturas más nítidas y detalladas y especialmente, en lo complejo de las vestimentas y en las reacciones físicas de éstas al movimiento. El pelo ha sido, según sus creadores, uno de los elementos más difíciles de recrear de todo el juego. Finalmente, el resultado de todos estos añadidos transmite una acertada sensación de realismo.

El sistema de partículas permite que los combates discurran de una forma bastante natural en los que respecta a los impactos. No hay golpes mal calculados ni clipping -partes del cuerpo de un luchador solapándose con las del otro-. Los combates están también acompañados de un buen repertorio de efectos gráficos como motion blur o iluminación dinámica que siguen a algunos golpes e impactos.

El resto de elementos no ha progresado más allá de lo visto en Dead or Alive Ultimate por el particular estilo que tienen los luchadores DOA, que los acerca más al anime que al fotorrealismo. Es por ello que pueden entenderse unas ciertas reacciones de frialdad acompañada de decepción por estar ante un DOAU mínimamente mejorado. Para salir de este error solo es necesario prestar atención a los fondos, como decíamos antes, o fijarse en el detalle de las vestimentas y su física. Para rematar, se puede conectar un monitor HDTV a 1080i. Aún con esta argumentación defensiva, los gráficos no son el punto más fuerte de DOA4.

Un detalle más. Al igual que otros títulos vistos en otros sistemas, Dead or Alive 4 sólo es compatible con televisores que soporten 60 herzios, ya que no incluye selector y nos fuerza a utilizar esta frecuencia. Parece ser que el refresco a 50 herzios se ha desechado para mantener la velocidad original del título y así lo advierte Microsoft.

Sonido

En la banda sonora y tras DOA3, vuelve a repetir Aerosmith con dos canciones licenciadas -Itagaki es seguidor de la banda de Steven Tyler- como son Eat the Rich y It's Amazing. El resto de pistas lo componen una mezcla de géneros donde encontramos nuevas composiciones para esta cuarta entrega y una recopilación de remixes de otros DOA. En total 69 canciones componen la banda sonora.

Por otro lado las voces se mantienen en perfecto japonés sin doblaje a otra lengua extrajera, como marca de la casa. La única excepción es Nicole, la Spartan que habla inglés. Mantener los diálogos en japonés no es algo que desagrade, es más, es del gusto de la mayoría de jugones de DOA, pero quizás el Team Ninja debería plantearse la localización a otros idiomas con opción de escoger la modalidad de doblaje.

Jugabilidad

En cuanto a manejo, repite el mismo sistema de control que la serie ha conservado inalterable durante entregas con puño, patada, presa, bloqueo y contraatque con los gatillos como atajos para puño y patada fuertes. Mediante éstos se podrán ejecutar una gran cantidad de combos y presas avanzadas -algunas prácticamente imposibles-, al igual que movimientos Tag, que sólo pueden realizarse en este modo con la participación de dos luchadores.

El rasgo característico de DOA -y de otros arcade de lucha de corte técnico- de incluir la opción de contraataque es el garante de no encontrarnos en una posición desfavorable frente a un jugador que emplea la repudiada táctica de machacar botones. Utilizando una de las cuatro contras distintas -dependiendo del tipo de golpe- seremos capaces de abortar cualquier intento de ataque del enemigo. No hay lugar para los machacabotones.

Esto lo podemos comprobar en partidas online, donde tenemos la ocasión de medirnos a jugadores que -se supone- llevan acumuladas suficientes horas de juego. Por otro lado, si utilizamos esta alocada técnica de novato contra la CPU, no tendremos ninguna posibilidad de victoria, ya que se ha mejorado la respuesta de la máquina ante este tipo de práctica.

Volviendo al sistema de contras, uno de los detalles que empezaba a preocupar a los entendidos en Dead or Alive era la facilidad con la que se podían realizar y la cantidad de energía que restaban. Se premiaba en exceso el contraataque, castigando la ofensiva inicial. Esto se ha acabado corrigiendo ajustando el timing o momento preciso en el que realizar la contra y restando energía a los impactos provocados por contraataques, que ahora son más livianos.

La respuesta del control es precisa. No hay ningún problema de retardo o similares y el pad de 360 se adapta de forma excelente al género -aunque echamos de menos el arcade stick edición especial que sí se ha lanzado en el mercado nipón-. La única dificultad que tiene el control de DOA4 en comparación con DOA3 radica como comentábamos antes en los ajustes del sistema de contras, que tendrán que ser exactas para poder ejecutarse.

La inteligencia artificial no ha evolucionado cualitativamente aunque si de forma cuantitativa, y tampoco presenta ninguna laguna. El juego va adaptando las reacciones de los luchadores que controla la máquina dependiendo del nivel de dificultad que hayamos elegido y de cuánto hayamos progresado en el modo historia. Podemos ver con facilidad como los dos primeros contrincantes son meros sparrings con los que practicar las técnicas básicas, pero a partir del tercer combate la entereza de los luchadores enemigos y su catálogo de acciones va enriqueciéndose progresivamente.

Aproximadamente en el quinto combate los rivales utilizan muy eficientemente el bloqueo, las contras -eso sí, de forma enfermiza-, las presas y todo su catálogo de golpes sin contemplación alguna. Para los jugadores menos experimentados en arcades de lucha, puede llegarse a la fustración. En ese caso recomendamos práctica y huir de las combinaciones de ataques repetitivas y monótonas.

En cuanto a personajes, la plantilla ha quedado compuesta por 23 luchadores de entre los cuales, inicialmente disponibles encontramos a Kasumi, Kokoro, Brad Wong, Bass, Jann Lee, Tina, Bayman, Ayane, Hayabusa, Hitomi, Eliot, Zack, Lei Fang, La Mariposa, Christie y Hayate. Posteriormente, y a base de completar el modo historia -y el Time Attack- con cada uno de estos 16, desbloquearemos 5 personajes más; Ein, Gen Fu, Leon, Tengu y Helena. Para terminar, la incursión más llamativa, el cameo de Nicole, una soldado Spartan-458 desde Halo, que solo aparecerá una vez hayamos completado el resto de la plantilla.

El enemigo final que el Team Ninja ha creado para DOA4 responde al nombre de Alpha 152 y es un clon de Kasumi fabricado por DOATEC. Los más veteranos del género encontrarán similitudes entre este enemigo y el legendario Dural de Virtua Fighter. Aunque su catálogo de golpes está basado en el de la kunoichi, dispone de una gran cantidad de movimientos exclusivos y demoledores. No puede controlarse en ninguno de los modos, por lo que queda reservada en exclusiva a la CPU -al menos de momento-.

En las nuevas incorporaciones encontramos solo 4. Kokoro, una maiko -estudiante de geisha- que practica el arte marcial Ba ji quan en secreto, Eliot, un joven británico de ojos azules y pelo rubio alumno de Gen-Fu, La Mariposa, una de las siluetas más bellas de toda la saga detrás de cuyo nombre se esconde Lisa, presentada en DOAX y por aquel entonces, novia de Zack y Nicole, la Spartan-458 enviada atrás en el tiempo junto a la Estación Nassau y que utiliza un estilo de combate similar al CQC de Snake, bautizado como Close Quarters Battle.

Itagaki comentó que se estaba trabajando en diferenciar a los personajes porque no estaba satisfecho con las semejanzas que varios luchadores tenían en su catálogo de golpes. Debido a esto, se han replanteado todos los movimientos de los personajes, también para intentar compensar los desequilibrios existentes -la más perjudicada ha sido Ayane aunque Hayabusa y Jan Lee se mantienen como los mejores-. Por ello se han producido los retrasos de sobra conocidos.

En cuanto a modos de juego, el principal es el modo DOA Story -la historia de cada luchador comprimida en un viaje por 9 combates- junto con el Time Attack, que tendremos que completar en multitud de ocasiones para desbloquear luchadores y trajes -existen entre 3 y 8 variantes de vestuario para cada personaje-. No podían faltar el necesario Versus, Batalla por equipos y Supervivencia, algunos de los cuales pueden ser configurados con la variante Tag, por parejas -que abre la puerta de los combos dobles-.

Otros modos interesantes son Watch, que permite ver como dos luchadores -con cualquiera de los trajes que tengamos y en cualquier escenario- controlados por la máquina combaten mientras que la única acción que podremos realizar recaerá sobre las cámaras, para variar el enfoque y realizar fotografías. Estas se almacenan en el disco duro y pueden ser posteriormente vistas en el modo Álbum, al igual que los vídeos que hayamos grabado con nuestros mejores asaltos -en la variante Battle Viewer-.

Podremos también reproducir de nuevo las secuencias generadas por ordenador, pero habrá que hacerlo desde el Movie Theater, que aparece una vez completamos el modo historia por primera vez. Para entrenar podemos recurrir al modo Sparring, bastante nutrido y cuyo escenario, el tatami, puede ser utilizado fuera de esta variante desbloqueándose. Otros modos de configuración y consulta son Ranking, User Profiles y Opciones

Xbox Live

Uno de los puntos fuertes de DOA4 es el soporte online, el mejor hasta la fecha que ha ofrecido un arcade de lucha y superando la experiencia que pudo esbozarse en DOAU. A través de Xbox Live seremos capaces de crear una sala virtual -o lobby, con recepcionista incluido- totalmente personalizable donde invitar a otros jugadores y disputar combates. Como jugadores estaremos representados por un avatar -comenzamos con un ninja aunque podremos ir comprando otrasclases- y con él podremos movernos entre estos dojo virtuales, conversando con los otros usuarios que haya en su interior y disfrutando del combate en curso a través de una pantalla de TV hasta que nos llegue el turno. Un detalle interesante es la posibilidad de grabar los combates que disputamos online al disco duro de la consola, para inmortalizar peleas antológicas o simplemente, callar la boca al compañero fanfarrón de turno y tener pruebas.

Los modos de juego que están disponibles por Internet son Kumite, El ganador permanece, Torneo, Batalla de Equipo, Supervivencia y No Eliminatorio. Pueden configurarse en cualquier momento de la partida, al igual que los puntos necesarios para la victoria, el tiempo de ronda y la capacidad de la barra de vida. El número máximo de jugadores que pueden participar a la vez en un combate son 4 -por parejas- mientras que en un dojo puede haber hasta 16.

A medida que ganamos combates online, sumamos Zack points, que sirven para comprar una gran cantidad de objetos distintos para nuestro avatar y dojo, pero también para desbloquear algunos de los trajes alternativos que tienen los luchadores. Todo ello pasando por la Zack Store, por supuesto. Al sumar victorias ascenderemos de grado y a suvez también subiremos posiciones en el ranking online mundial de DOA -dominado por japoneses- que puede filtrarse por diversas categorías. Grado, porcentaje de victorias, fiabilidad, personaje favorito y número de partidas. Pero atención, también podemos compartir nuestros tiempos en los modos Time Attack y Survival -individual y por parejas- y localizar nuestra posición en el ranking.

Para terminar, sólo apuntar que el lag que hemos experimentado ha sido mínimo, imperceptible salvo algún tirón de la conexión en partidas con algunos jugadores puntuales -japoneses y coreanos-. En global la experiencia online se puede calificar de muy grata, ejemplar para futuros juegos del género.

Respecto a los logros, decir que son difíciles de obtener -mucho- especialmente a partir de los 200 puntos, cuando ya hemos obtenido los Logros por desbloquear a los personajes ocultos, por 5 y 10 horas de juego y por las primeras partidas en DOA Online. En ese punto se comienzan a exigir unos objetivos que no están en la mano de la mayoría de los jugadores, por tiempo, más que por pericia. En total se incluyen 1.000 puntos G para 45 logros.