Los perros de la guerra

Da gusto comprobar como las viejas mecánicas bidimensionales aún llaman la atención de las desarrolladoras de vez en cuando. LittleBigPlanet, Warioland: The Shake Dimension, Super Smash Bros. Brawl, Castle Crashers, Bionic Commando Rearmed o Braid son ejemplos recientes de títulos que, ya sea a golpe de polígono o usando gráficos bitmap de los de toda la vida, nos permiten descansar por unas horas lejos de esos profundos, complejos y en no pocas ocasiones mareantes entornos tridimensionales que llevan más de una década siendo la nota predominante en nuestro mundillo. Y es que no hay nada mejor que una perspectiva lateral para simplificar mecánicas y favorecer conceptos. Crash Commando llega para unirse a la lista de juegos anteriormente mencionada, tocando un género hasta ahora no demasiado prolífico en el mundo 2D: el shooter online.

Ampliar

Imaginaos un Warhawk en dos dimensiones, o un Worms en el que los turnos se sustituyen por el combate en tiempo real. Eso es, en esencia, Crash Commando. Dicho proyecto es la ópera prima de Epos Game Studios; aunque eso no significa que tengamos que colgar una L en el juego, avisando así de que se trata de un título creado por programadores inexpertos. No en vano, Epos está formado por ex miembros de Dice, estudio desarrollador ni más ni menos que de la saga Battlefield. Toda una garantía de que nos encontraremos ante un producto que, cuando menos, derrochará jugabilidad y buen hacer por los cuatro costados, siendo su mayor virtud la simpleza y sencillez a la par que adicción de la que hace gala; ideal para partidas cortas en las que busquemos huir de cualquier clase de complicación.

Ampliar

Mata primero, olvida preguntar después

De entrada, Crash Commando pone sobre la mesa una oferta de modos de juego solvente, aunque quizá demasiado ajustada. Es decir, no se echa en falta nada importante; sin embargo, no existe la suficiente variedad como para que podamos enfrascarnos en partidas de larga duración sin que la monotonía acabe acudiendo tarde o temprano para obligarnos a buscar otros quehaceres. A pesar de estar completamente enfocado al juego online, Crash Commando ofrece un par de ofertas monojugador en las que los bots pasarán a ser nuestro enemigo a batir. La principial de ellas es el Modo Campaña, en el que deberemos cumplir una serie de objetivos (básicamente, acabar con un número determinado de enemigos) mientras nos hacemos con los controles, probamos las armas y vamos conociendo los entresijos de cada uno de los mapeados del juego. Esto hace que el citado Modo Campaña sirva también como completo entrenamiento antes de pasar a combatir online.

Ampliar

También contamos con la posibilidad de jugar en un modo libre en el que podremos modificar todo tipo de parámetros para construir partidas a la carta. Si bien es de agradecer que Crash Commando incluya opciones monojugador (para que así al menos podamos disfrutar del juego en aquellas ocasiones en las que la conexión a PlayStation Network se torna imposible), no habría estado mal ofrecer algo más de profundidad y variedad al respecto. Un modo historia, por ejemplo. Al menos, lo dicho: podremos pulir nuestras habilidades antes de entrar a combatir contra otros usuarios, o entretenernos cuando la conexión al servidor se haga de rogar.

Ampliar

Respecto al modo online, sin duda el verdadero punto fuerte y razón de ser de Crash Commando, permite la participación de hasta 12 jugadores simultáneos en un total de 8 mapeados diferentes. Los modos de juego son los justos, clásicos y necesarios: Deathmatch, Deathmatch por equipos, y una suerte de derivado del clásico Capturar la bandera, en el que debemos localizar un terminal informático en poder del bando enemigo, descargar datos de él, y llevarlos hasta nuestro propio terminal mientras tratamos de no ser eliminados en el proceso.

Ampliar

Una de las mayores virtudes de Crash Commando reside sin duda en la construcción de todos y cada uno de sus 8 campos de batalla. Éstos aprovechan con notable solvencia las posibilidades que brinda su desarrollo lateral, ya que se encuentran repletos de plataformas, recovecos y desniveles que convierten el desarrollo de los combates en todo un ejercicio de habilidad a la hora de perseguir o escapar de nuestros rivales. Para ello contamos con la inestimable ayuda de una mochila propulsora, que nos permitirá impulsarnos por el aire para acceder a secciones del escenario de otro modo vedadas, así como ejecutar una útil maniobra de evasión en la que rodaremos sobre nosotros mismos al más puro estilo Sonic. Eso sí, nuestra mochila no nos permite volar a placer por el escenario, dado que se recalentará tras unos cuantos segundos de uso continuado.

Ampliar

Además, cada nivel cuenta con dos planos de acción, al más puro estilo Fatal Fury o aquel oscuro Mario Clash destinado a la más que malograda Virtual Boy, entre los que podemos movernos con total libertad gracias a los túneles y callejones que los comunican, los cuales salpican el mapeado por doquier. Muchas partes del escenario son abiertas, sin paredes o muros que impidan la visibilidad, lo que nos permite ver qué está pasando en el plano del mapeado que hace las veces de decorado de fondo; e incluso podremos usar ametralladoras de posición para atacar a los rivales allí situados por medio de una perspectiva en primera persona. Y ya que hablamos del arsenal, éste se compone de seis armas primarias, dos secundarias, granadas y minas. Antes de entrar en combate, o poco después de renacer tras ser eliminado, se nos permitirá seleccionar un tipo de arma tanto principal como secundaria.

Ampliar

Nuestro arsenal primario cuenta con una ametralladora, ideal para fuego continuo; la escopeta, mortal en distancias cortas; el rifle de francotirador, de lenta recarga aunque plena efectividad cuando logramos alcanzar a alguno de nuestros rivales; el lanzagranadas, ideal para eliminar a enemigos que se encuentren bajo nosotros; el bazooka, arma potente donde las haya, aunque nada recomendable para distancias cortas o pasillos angostos, dado que la onda expansiva puede acabar también con nosotros; y el láser de microondas, especialmente indicado para freír a nuestros oponentes. Todas estas armas adolecen de munición limitada, aunque podremos recoger los ítems en forma de cargador que salpican el nivel para reabastecernos.

Ampliar

Si aún así acabamos sin munición en un momento dado, siempre podemos echar mano de alguna de las dos armas secundarias que se nos ofrecen: la pistola, de baja cadencia de disparo, o el cuchillo, el cual obviamente sólo es efectivo en el combate cuerpo a cuerpo. Además, existen armas especiales ubicadas en distintas partes del escenario, como la ametralladora gatling o el rifle de plasma, que nos brindarán una enorme potencia de destrucción, aunque sólo podrán ser usadas durante un tiempo limitado. En este sentido son mucho más efectivos los vehículos, tanques y jeeps, aparcados en diferentes zonas de los niveles. Éstos nos otorgan, además de un blindaje extra, una ametralladora con munición infinita en el caso del jeep y un mortal cañón si lo que conducimos es un tanque. Dichos vehículos cuentan además con propulsores, a semejanza de nuestros jetpacks, que les permiten volar por un tiempo limitado. Eso sí, no todo iban a ser ventajas, y es que estos vehículos deben circular por una serie de raíles magnéticos dispuestos a tal fin, por lo que en no pocas ocasiones nos será imposible transitar por lugares únicamente accesibles a pie.

Ampliar

Pero sin duda, las armas más mortíferas del juego serán los misiles teledirigidos, los cuales son lanzados desde bunkers ubicados en determinadas partes del escenario. Una vez en el interior de estos lugares, contaremos con la posibilidad de disparar un misil por control remoto, que podremos dirigir a placer hasta hacerlo impactar en algún lugar del escenario. Esto nos permitirá en no pocas ocasiones eliminar a varios enemigos de una tacada. Y hablando de eliminaciones, sumar muertes a nuestro favor sin ser abatidos en el proceso nos permitirá llenar una barra de experiencia ubicada en la esquina inferior izquierda de la pantalla, la cual nos dará acceso a tres mejoras nada desdeñables, de las que el aumento de salud y la potencia extra para nuestra mochila propulsora (con el añadido de la posibilidad de eliminar enemigos mediante la maniobra de evasión rodante) son las más destacables.

Ampliar

En lo referente a los controles, éstos responden a nuestras órdenes con suma solvencia. Lo más destacado de ello es que se ha implementado el stick analógico derecho para apuntar, algo nada habitual en un juego de acción de scroll lateral. Así, tendremos la posibilidad de dirigir el cañón de nuestra arma en un arco completo de 360º, en lugar de las cuatro u ocho direcciones distintas habituales en este tipo de juegos. No es un sistema de apuntado ideal, dado que cuesta bastante acostumbrarse a él. Sin embargo, con algo de práctica, se torna en una opción perfectamente válida que favorece el movido desarrollo de los combates. Además, para facilitarnos las cosas a la hora de apuntar a nuestros enemigos, contamos con la inestimable ayuda de un punto de mira láser.

Ampliar

Gráficamente hablando, Crash Commando ofrece en todo momento lo que se espera de él: escenarios bien construidos, con un alto nivel de detalle, aunque sin exceso de recarga en aras de favorecer la necesaria visibilidad e identificación en todo momento tanto de nuestro avatar como de los enemigos a los que debamos hacer frente. La tasa de frames se mantiene estable en todo momento, algo más que necesario en un título de estas características. En cuanto a la estética, es muy semejante a la mostrada en la franquicia Battalion Wars, es decir, un look militar de marcado aire desenfadado, que lo acerca más a la caricaturización que al realismo.

Ampliar

Impresiones finales

Crash Commando logra alcanzar lo que se propone: ofrecer un shooter multijugador online divertido, de fácil accesibilidad, exento de toda clase de complicaciones. Su mecánica puramente bidimensional no hace sino favorecer la jugabilidad. Crash Commando es acción lateral de la vieja escuela al 100 %, en la que combatimos en solitario o por equipos a lo largo y ancho de 8 mapeados diferentes, de impecable construcción, repletos de desniveles, plataformas, raíles y recovecos que favorecerán tanto el combate cerrado como la evasión en caso de que nos encontremos en desventaja numérica o armamentística. El sistema de apuntado, que usa el stick analógico derecho para disparar en 360º en lugar de las 4 u 8 direcciones típicas de los shooter de acción lateral, necesita tiempo para acostumbrarse a él, aunque finalmente acaba revelándose como un añadido más que acertado.

Ampliar

Contamos con aproximadamente una docena de armas distintas para usar contra nuestros enemigos, así como dos clases de vehículos que nos brindarán mayor protección y potencia de fuego. Además, una mochila propulsora nos otorgará en todo momento una movilidad nada desdeñable, que nos permitirá recorrer las distintas alturas de los escenarios con total comodidad. Un solvente apartado gráfico, y la posibilidad de movernos y combatir por dos planos distintos en cada escenario, acaban por redondear el conjunto.

Ampliar

Sin embargo, Crash Commando adolece de algunas limitaciones, achacables sobre todo a su escasa oferta de modos de juego tanto online como offline, con lo que las partidas de larga duración acaban adoleciendo de una marcada monotonía. Además, aunque podemos configurar a placer nuestro arsenal, habría sido deseable contar con soldados de distintas capacidades (todos son clónicos), así como más vehículos para conducir (se echa mucho de menos la posibilidad de pilotar helicópteros, por ejemplo). Los 8 mapas disponibles, aunque de excelente construcción y repletos de posibilidades, también acaban tornándose escasos con el paso del tiempo.

Ampliar

Seguramente, en el futuro llegarán a PSN packs de expansión que permitirán que el juego disfrute de muchas más posibilidades: modos de juego extra, nuevos escenarios, armamento y vehículos adicionales, etc. De momento, esto es lo que hay. Eso sí, se nos ofrece a un precio más que ajustado: 9'99 euros. Así que, si buscas un buen shooter multijugador, divertido y desenfrenado a la par que sencillo de controlar y jugar, Crash Commando será sin duda una compra más que acertada. Su relación calidad-precio es además la ideal para lo que el juego nos ofrece.

-Acción constante y desenfrenada, de fácil acceso y agradable sencillez

-Mecánica al más puro estilo old school, gracias a su perspectiva lateral y desarrollo 2D, algo nada habitual en un shooter online

-Un sistema de control que permite completa flexibilidad tanto a la hora de apuntar como de movernos por el escenario

-Excelente relación calidad-precio