Cozy Grove análisis, un simulador con muchas referencias

Cozy Grove, desarrollado por Spry Fox, es un juego de simulación de estilo de vida que fue lanzado a mediados de marzo para Apple Arcade y, tan solo unos días después, el 8 de abril ya lo podíamos disfrutar para PC, PlayStation 4, Xbox One y Nintendo Switch. En Cozy Grove nos convertiremos en un Spirit Scout con el desafío de ayudar a los espíritus de osos fallecidos a encontrar la paz. En un principio sentiremos estar en una isla abandonada y apenada por el recuerdo, pero con el paso de los días podremos hacer lucir su color, además de crear nuestro propio hogar. Es decir, podremos explorar la isla, aumentar su tamaño, recolectar recursos, cuidar animales, hacer bricolaje, pescar, entre otras actividades, pero teniendo en cuenta que la historia principal se basa en un calendario real. Esto último seguro que nos suena del título tan famoso Animal Crossing, y es que Cozy Grove es muy similar y te hace dudar en algunas ocasiones.

Consigue dar color a toda la isla

Cozy Grove se desarrolla en una isla encantada habitada por un grupo de criaturas caprichosas, muertas y parecidas a osos que han estado atrapadas allí durante un tiempo. Nosotros, un Spirit Scout con ganas de vivir una aventura, queremos coleccionar insignias para exhibirlas y ayudar en todas las tareas que nos propongan. Nuestro objetivo principal será cuidar la isla y a sus habitantes y les brindaremos todas las comodidades necesarias al mismo tiempo que ellos mismos construyen y mantienen las suyas propias. Una vez que hayamos logrado ayudar a esos osos fantasmales, nos darán una madera espiritual para quemar en una fogata sensible llamada Flamey y de esta manera continuar con la historia. Flamey revelará nuevas partes de la isla y nuevos espíritus, además de iluminar nuestro mundo, volviéndolo lleno de vida y fértil.

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Nuestros vecinos isleños tienen un desarrollo con una historia detrás, una narrativa y una personalidad que ayudará a conectar más con ellos, además de tener su propio protagonismo dentro de la historia. No obstante, no destacarán solo por esta historia si no por el rol que representan dentro de la isla, ya que tendremos un cartero, un herrero o un cocinero que iremos desbloqueando progresivamente y, es lo que nos ayudará a que nuestras acciones dentro de la isla comiencen a tener mayor sentido. Cada vecino tiene una serie de corazones sobre sus cabezas y cada uno se rellena a medida que completamos partes de su historia. Además de tener las solicitudes de los osos espectrales, también habrá diablillos en la isla que se disipan de manera fantasmal cuando nos acercamos, pero también nos piden un objeto que la mejor manera será lanzarlo y así obtener nuestra recompensa.

Al igual que Animal Crossing, en este simulador de vida hay muchas cosas que tendremos que hacer, pero no de manera inmediata. El juego no se podrá completar en un solo día porque cuenta con un reloj a tiempo real que permite que el juego se extienda a lo largo de algunas misiones para que coincida con la progresión del tiempo del mundo real. Esto hace que tengamos unos recados limitados a diario teniendo que esperar literalmente al día siguiente para continuar con la historia. Está claro que el propio desarrollador quiere maximizar nuestra experiencia y hacer que no todo lo veamos en un día, pero, por otro lado, es una jugabilidad que requiere de mucho contenido para atraer nuestra atención y mantenernos diariamente en su historia, cosa que particularmente Cozy Grove nos hará sentir como si estuviésemos atrapados en bucle del Día de la Marmota. Sin embargo, no hará falta dedicarle mucho tiempo a diario, ya que recolectar artículos y completar las misiones disponibles del día, equivale entorno a unos 30-40 minutos de juego.

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Un día rutinario en Cozy Grove

En un principio podremos sentir que estamos muy solos o que no sabemos por dónde empezar para lograr un buen hogar, pero conforme avanzamos en la historia, todo cobra sentido. Como comentábamos anteriormente, cada vecino coge un rol dentro de la isla y será de utilidad para muchas ocasiones, pero todo requerirá de este tiempo real para desbloquearlo. Aparecerá la tienda del Sr.Kit., una especie de zorro que nos estará esperando para venderle y comprarle cosas, además de mejorar su tienda por suficiente dinero, ¿Qué si tenemos dinero? Si claro, tendremos unas monedas que se buscan por la isla todos los días, también completando misiones e insignias, otorgando más luz a los árboles frutales para aumentar su rendimiento o donando artículos a nuestro vecino playero. Este último vecino nos animará a donar a su colección diferentes elementos desde comidas, hasta peces e incluso conchas.

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Puede que nos suene un poco de New Horizons, pero en Cozy Grove tendremos que aprender recetas si queremos usar el banco de herramientas y crear cualquier tipo de objeto, aunque en esta ocasión tendremos que hablar con el herrero para que nos permita dicha creación. Las recetas podremos ganarlas bien completando misiones, pescándolas, excavando algún agujero o recibiendo cartas de nuestro querido cartero. Y es que también tendremos correspondencia dentro de la isla y a lo largo de la historia recibiremos alguna gratificación a través de ellas.

Nuestro día a día dentro de la isla en Cozy Grove será una rutina repetitiva con pequeñas pinceladas de ‘innovación’ para recolectar recursos adicionales: cosechar árboles, minar, pescar, excavar e incluso cocinar, además de limpiar nuestro campamento o ir agregando nuevas decoraciones a nuestro menú de recetas. Tendremos diferentes herramientas que harán posible todo esto como son la caña de pescar, el machete, el pico o la pala (todas ellas con durabilidad limitada), aunque en ocasiones el entorno se siente tan abrumador que cuesta localizar un punto para utilizar dichas herramientas, salvo en la pesca. La sombra de un pez, una referencia que os puede sonar, será el causante de que nos llame la atención para lograr conseguirlo, pero ¿es fácil? No, el control de la caña de pescar es impreciso y la barra de fuerza utilizada con teclado y ratón es muy torpe.

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Todo lo que recolectemos acudirá a nuestro inventario, un inventario limitado y típico de este género de juegos, aunque podremos dejar algunos objetos en nuestra tienda de campaña que utilizaremos como almacén (el cuál se podrá mejorar) o vendiendo en la tienda. Visiblemente podremos ver los últimos 3 objetos obtenidos y el que llevemos equipado, apareciendo su icono encima de nuestra cabeza. Es cierto que cualquier objeto en Cozy Grove sirve, ya sea para cocinar, quemar, vender y ganar monedas, donar o decorar, pero es posible que tengas la tentación de pensar si realmente merece la pena seguir farmeando o esperarte al día siguiente. Al igual que el manejo de la caña de pescar es torpe, el modo decoración es muy poco atractivo e intentar colocar un mueble justo en el lugar que quieres puede llegar a ser un reto. No percibes exactamente dónde se va a colocar, además de que el juego no permite moverlos, solo rotar o recoger.

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Estilo visual hermoso, pero abrumador

Cozy Grove destaca bastante por su estilo artístico hermoso y encantador con unos dibujos realizados a mano. En un principio, las imágenes son de un color apagado y nuestra isla se sentirá aislada y bastante triste. Sin embargo, una vez que desentrañamos los recuerdos de sus habitantes y luzca su color, cobrará vida y será un regalo para la vista. Pese a lo anterior, su mundo es bastante abrumador y desordenado con multitud de objetos dibujados, mezclando decenas de detalles que logra que sea a veces imposible distinguir un objeto de misión con atrezo. Además, la perspectiva de nuestro personaje nos permitirá pasar por detrás de objetos haciendo que estos aparezcan ‘invisibles’ y de esta manera descubrir algún secreto, pero hasta que punto serás capaz de adivinarlo. Junto a su característico estilo visual también destacar su banda sonora, perfecta para el juego que es, transmitiendo paz y tranquilidad y sabiendo acompañar perfectamente.

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