Clippox Exodus
- PlataformaIPH7.5IPD7.5
- GéneroPlataformas
- DesarrolladorGametopia Games
- Lanzamiento22/03/2012
- TextoEspañol, Francés, Inglés
Clippox Exodus
El joven estudio español Gametopia Games se lanza a la aventura táctil con un plataformas que aúna una jugabilidad old-school y un aspecto visual completamente dibujado a mano; el resultado, una aventura muy creativa y grandes dosis de fantasía.
Clippox Exodus llega a la App Store como el proyecto de unos jóvenes creadores tras dos años de intenso desarrollo; tras los primeros minutos de juego, nos daremos cuenta de que estamos ante un juego con mucha personalidad, realizado con mucho esfuerzo y que nos transportará a otra época gracias a su propuesta jugable. Ligeros toques de acción con una atractiva base de plataformas, todo ello en un mundo en dos dimensiones lleno de fantasía; estas son las bases de un título desarrollado en nuestro país y que se desmarca del resto gracias a su originalidad. Tampoco podemos dejar de hablar de su aspecto visual, una auténtica maravilla dibujada totalmente a mano, además de su excelente banda sonora.
El inicio de un gran viaje
El argumento de Clippox Exodus nos traslada a un mundo fantástico donde unos pequeños seres viven en el Árbol Sagrado; a pesar de vivir rodeados de peligros, permanecen a salvo bajo la custodia del Chamán de la tribu. Una noche, los Clippox sufren los efectos de una devastadora tormenta y un rayo alcanza el Árbol Sagrado destrozándolo por completo. A partir de este suceso, el Chamán decide embarcarse en un peligroso periplo en busca de la tierra prometida y encontrar así un nuevo hogar para su pueblo. Será entonces cuando tomemos el control de nuestro heroico y peludo protagonista para afrontar una buena cantidad de niveles llenos de trampas, enemigos y puzles, en una aventura de acción y plataformas que no se olvida de ligeros toques roleros.
Una vez a los mandos, el título muestra tanto aspectos positivos como negativos, aunque en general no consiguen transmitir la seguridad necesaria al jugador; además el nivel de dificultad crece notablemente a partir de la segunda mitad de la aventura, lo que provocará momentos de marcada frustración a muchos jugadores. Pero antes de profundizar en este aspecto, repasemos las posibilidades del título a nivel de jugabilidad, que no son pocas. Para mover a nuestro pequeño héroe debemos pulsar dos flechas que se sitúan en la esquina inferior izquierda de la pantalla; una nos permitirá avanzar y otra retroceder. En la esquina opuesta se sitúa el botón de salto, de tamaño superior al resto. Justo encima de estos dos grupos se sitúan los botones de defensa y ataque, de nuevo, uno en cada esquina.
El poder de la magia
El botón de defensa –de color azul– permite crear una barrera mágica que nos protegerá durante unos instantes de los ataques de nuestros enemigos; por otro lado, con el botón de ataque –de color rojo– podremos atacar con nuestra lanza. Puesto que manejamos a un Chamán, también podremos usar hasta cuatro poderes mágicos que iremos desbloqueando a medida que avancemos en la aventura. Dichos poderes permiten usar el poder del fuego, del hielo, del rayo y de la tierra, obteniendo diferentes resultados según el botón que pulsemos; así, si pulsamos el botón del poder del hielo, congelaremos al enemigo más próximo, lo que nos dará cierta ventaja al tratar de golpearle. En cambio, si usamos el botón del rayo, haremos que unos de nuestros enemigos quede totalmente volatilizado.
A lo largo de los niveles nos encontraremos con diferentes mecanismos que deberemos activar para poder seguir adelante; para ello sólo tendremos que pulsar un icono contextual en la mitad baja de la pantalla. Asimismo tendremos dos barras: una de salud y otra de poder mágico. Para poder rellenarlas tendremos que recoger esferas verdes para la primera y esferas amarillas para la segunda. A nivel de respuesta de los controles táctiles, Clippox Exodus puede no convencer a todos los jugadores; si bien podremos terminar por adaptarnos a sus particularidades, en muchas ocasiones nos quedaremos vendidos ante situaciones que requieren de un control más preciso, con lo que nuestro protagonista perecerá más veces de las que nos gustaría. Además, la interfaz en pantalla resulta algo compleja, con una disposición de los botones cuanto menos discutible.
Por suerte, estos momentos dramáticos son poco numerosos, puesto que el ritmo de juego es pausado y tranquilo; nunca tendremos que afrontar combates con más de tres o cuatro enemigos a la vez. Los niveles están plagados de trampas, como fosos, afiladas puntas o agua, que deberemos esquivar para que evitar el fatídico Game Over. En estas situaciones, la falta de precisión en los controles nos jugará más de una mala pasada, aunque al morir, siempre empezaremos al inicio de ese mismo nivel, lo que favorecerá que no perdamos la paciencia. Por otro lado, la mezcla de plataformas con ligeros toques de rol y una ambientación más propia de los clásicos de antaño resulta muy atractiva y recomendable para jugadores de todas las edades.
Arte en movimiento
El apartado visual es tan sorprendente como llamativo; completamente dibujado a mano, los creadores del juego han querido desmarcarse con unos gráficos con mucha personalidad, toda una oda a la ilustración. Los escenarios están muy bien diseñados y nos regalan unos entornos vivos e ingeniosos, con unos fondos muy detallados –incluso con varias capas– y llenos de particularidades; eso sí, la experiencia mejora considerablemente en la versión para iPad. No podemos decir lo mismo de las animaciones de los personajes, algo limitadas y poco enérgicas. El apartado sonoro nos regala temas pausados y de corte tradicional que se adaptan perfectamente a la acción mostrada en pantalla; debemos destacar también la posibilidad de descargar la banda sonora de Clippox Exodus de manera gratuita desde la propia web del juego. Los efectos de sonido, en cambio, no pasan de testimoniales.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.