¡Desaparece!

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Casper vuelve a las pantallas, aunque no del cine. En esta ocasión el fantasma más famoso llega hasta GameCube tras su "sosegado" paseo en los circuitos de PS2. ¿De verdad valen la pena tantas apariciones fantasmales?

Lo cierto es que algunos creíamos habernos librado por fin de este desastroso personaje. Nunca me ha caído bien, lo reconozco, pero juegos como el que nos ocupa hacen un flaco favor a que mi opinión al respecto de este personajillo animado cambie a mejor... En fin, el trabajo es el trabajo y aquí tenemos una nueva encarnación del ente ectoplásmico más soso y aburrido de los que nos hemos topado a lo largo de nuestra pequeña vida jugona.

Casper, The Next Dimension es una conversión del título aparecido en Playstation 2 hace ya unos meses y que pasó sin pena ni gloria por el público de la máquina de Sony, pero sus creadores debieron pensar que el largo brazo de la "caspermania" debía cernirse también sobre GameCube. En esta ocasión la historia gira sobre el resurgimiento del malvado Kibosh, el fantasma con más mala baba de los que proliferan en el universo de los espíritus, con unas enormes ansias de hacerse con el poder absoluto, incluso del mundo de los mortales no contento con su propio reino. Para ello se ha hecho con el control de las puertas dimensionales, excepto una, y mantiene secuestrado a muchos habitantes inocentes. Casper tendrá que restablecer la normalidad, a pesar de que él mismo dude de sus capacidades (nosotros también lo haríamos), y ponerse en marcha. Para ello atravesará 4 mundos principales, cada uno de ellos compuesto a su vez por diferentes niveles, echando una manita a los que le pidan ayuda y enfrentándose finalmente al malvado Kibosh. ¿Suena sugerente, no? Ya, que nos vas a contar, ya nos lo imaginábamos...

g  r  á  f  i  c  o  s  :

Planos, escenarios bastante desiertos y una persistente niebla que ayuda tanto a dar atmósfera a los diferentes niveles como a esconder de forma sibilina el descarado popping del que adolece Casper. Si bien se ha utilizado el motor gráfico Renderware de Criterion, utilizado en títulos mucho mejor resueltos como el propio Burnout, Scooby Doo o MX SuperFly, parece que en las manos equivocadas, o en un uso algo descabellado y/o atolondrado, no ofrece la misma eficacia que en la mayoría de los juegos que lo implementan. En Casper nos toparemos con texturas blandas, poco definidas, que en ocasiones recuerdan más a las que vimos en Nintendo 64 y no son ni mucho menos merecedoras de un soporte como GameCube. Los efectos de luz brillan por su ausencia y el resto de efectos gráficos no son para echar cohetes. Ni siquiera la transparencia y el efecto "glow" del protagonista del juego da la talla. Hay otros efectos, en los disparos de nuestro fantasma, que han sido sin embargo mejor plasmados. No destacan ni pasarán a la historia pero por lo menos son eficientes y en cierto punto creíbles.

Un punto destacable es la capacidad de deambular por el escenario en cualquiera de sus direcciones. Podemos subir, bajar, arrastarnos por el suelo o entrar en casuchas o castillos a nuestro antojo. La libertad de movimientos propia del vuelo de un fantasma (o al menos de su recreación fantástica), obliga de vez en cuando al engine al uso y abuso de la niebla, pero por lo menos todo discurre a buena velocidad y no nos hemos topado con ninguna ralentización de interés.

Los personajes por su parte son un elenco de despropósitos. Empezando por el propio Casper, horrible en toda su extensión, con un parecido que raya lo ridículo con respecto a la imagen que tenemos de los dibujos y/o película, y con un movimiento limitado y carente de interés. El resto de personajes ofrecen desgraciadamente un aspecto semejante. Animaciones parcas y repetitivas, muy angulosos y planos. Tan sólo algunos enemigos como las gárgolas voladoras o los magos, han sido "bendecidos" con algo más de atención por parte de los animadores. Todo esto además se ve incrementado con unas pobres escenas cinemáticas.. Creadas también con el engine del juego se limitan a ser unos cambios de cámara entre los personajes que hablan y dan cuenta del diseño pobre y desangelado de los personajes en el juego.

m  ú  s  i  c  a  :

Empieza bien, bastante bien. Son arreglos orquestados que nos recuerdan en gran medida los compases de una banda sonora de una película cualquiera, ¿quizás la propia de Casper?, nunca lo sabré... El caso es que acompaña bastante bien durante nuestro viaje a través de los escenarios, y su aire misterioso y algo fantasmagórico encaja a la perfección con el protagonista y el mundo que le rodea. Sin embargo, y es que parece que siempre hay algo que objetar, la repetición casi enfermiza de los mismos cortes una y otra vez acaba cansando al jugador más consumado o al fan más acérrimo de este fantasma. En la mayoría de las veces tendremos que explorar los niveles de cabo a rabo, y si escuchamos la misma cancioncita 10 o 12 veces... Malo, malo...

s  o  n  i  d  o   F  X  :

Poco reseñable. Se reduce a efectos especiales para los disparos de Casper, explosiones, algún sonidillo ambiente perdido y a una desastrosa, si, desastrosa compresión de audio. No nos podemos creer que la calidad de las conversaciones entre los personajes haya caído tan bajo. No analizamos la interpretación de los dobladores, algunas mejores que otras, pero los samples resultantes parecen sacados de nuevo de un cartucho de Nintendo 64. Decepcionante a todas luces.

j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d  :

El control de Casper tiene sus más y sus menos. En primer lugar no alcanzamos a comprender como los desarrolladores no han contemplado la posibilidad de hacer "strafe" utilizando el stick C, el cual no se emplea para nada en el juego, ya que tener que apretar "R" cada vez que queramos entrar en este modo de control es cuanto menos, tedioso, y cuanto más, ridículo para un juego en el que tenemos que girar y desplazarnos en todos los ejes del espacio. Por otro lado contaremos con el stick analógico para controlar las idas y venidas del fantasma, con "A" podremos hacer uso de nuestros poderes, con "B" activaremos el escudo etéreo, que nos servirá para evitar ser dañado o para atravesar algunas ventanas, con "X" activaremos la velocidad especial de Casper (sin duda lo mejor del juego) y con "Y" nos moveremos hacia atrás. Hay algunos botones más del mando pero no haremos un copiado del manual, y baste saber lo esencial para imaginarte la situación de los controles. Lo peor es que no podremos "reseleccionar" las acciones a nuestro antojo, y sólo podremos escoger entre tres configuraciones del mando diferentes, a cada cual más terrible que la anterior.

En fin, con algo de atención y algunos minutos (u horas) de práctica, acabaréis por defenderos más o menos en este inhóspito universo, pero desde luego Lucky Chicken no ha contribuido en hacernos las cosas más fáciles.

La mecánica de Casper se basa por otra parte en cumplir las pequeñas misiones que nos van pidiendo los personajes con los que nos encontramos a lo largo y ancho de 4 mundos principales y 16 subniveles. Tendremos que encontrar los cachos perdidos de la armadura de un caballero medieval, convertir a una rana de labios verdosos en una hermosa princesa o echarle una mano a una especie de arlequín al que le toman en exceso el pelo. Si cumplimos con lo que nos piden seremos recompensado de varias formas. O bien nos darán alguna parte de las llaves necesarias para continuar hasta la Guarida del Dragón, o bien nos ofrecerán mejorar nuestras capacidades armamentísticas, velocidad o resistencia a los ataques enemigos. Tú eliges.

Los mundos en los que se divide Casper son cuatro, tal y como te adelantábamos anteriormente. A saber:

La dificultad para atravesar los diferentes niveles está medida, pero en ocasiones resulta algo excesiva teniendo en cuenta sobre todo hacia que sector va dirigido el juego. En determinadas situaciones daremos vueltas eternas tratando de encontrar ese objeto que nos falta, o los secuaces de Kibosh nos acribillarán desde todos los puntos posibles sin que sepamos realmente de donde provienen los disparos. Todo ello se ve paliado en cierta forma gracias a los poderes de Casper y al aumento de fuerza, velocidad o energía que podemos acumular gracias a los objetivos cumplidos, pero aún así no es una tarea sencilla de realizar.

Peor aún es que si conseguimos por ejemplo 4 de las 5 partes que nos pide el caballero para su armadura y decidimos entrar en algún otro nivel, al volver veremos con incredulidad como ya no mantendremos ninguna de esas partes y tendremos que empezar de nuevo, de cero, incluso hemos de hablar con el personaje como si no nos conociera de nada...

c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n  :

Con una factura técnica mediocre, en todos sus aspectos, y una jugabilidad puesta en duda, lo único que salva a Casper de la quema directa es su mecánica añeja, algo clásica, y la dificultad de la que hace gala. No sabemos bien si Luck Chicken ha calculado bien al jugador objetivo de este juego (o es que quizás estemos subestimando a las nuevas generaciones), pero lo cierto es que en muchas ocasiones nos atascaremos por no encontrar determinados items, o seremos machacados sin compasión por una auténtica horda de gárgolas y magos sin más posibilidad que reintentarlo una y otra vez hasta que lo consigamos.

Destinado, en principio, para los más jóvenes de la casa, o para los acérrimos seguidores del "asabanado" protagonista, Casper no deja de ser un relleno en el catálogo de GameCube, que trata de jugar a las aventuras y a los juegos de acción pero que se queda a medias en ambos casos y que además está dotado de una pésima realización a nivel gráfico y sonoro.