Voleibol oxidado

Mira que me gusta comentar juegos cuyos títulos rememoran tiempos pasados, donde el videojuego se entendía de otra forma, épocas cuyos juegos denominamos ahora como ‘retrogames'. Precisamente existe un título de Ocean llamado 'Beach Volley' para ordenadores de 8 y 16 bits, cuya temática era muy similar a la del juego del estudio Idoru que hoy analizamos, y que me dejó mucho mejor sabor de boca que el Beach Volley que distribuye Puntosoft en este país.

Aunque los separen quince años, tanto en un juego como en otro podremos practicar el noble deporte del voley-playa; esta modalidad deportiva es una variante del voleibol, en el cual dos equipos compuestos por dos jugadores cada uno se enfrentan entre sí. En esta ocasión, los chicos de Idoru se marcan como modelo el exitoso Dead Or Alive Xtreme Volleyball, donde las jugadoras niponas subían la temperatura y nos hacían preguntarnos el objetivo real del juego. Así, las grandes protagonistas de Beach Volley son las chicas. Al menos sobre el papel, puesto que el bajo nivel general del producto será lo que más recordemos de este juego. Y la verdad, para qué vamos a engañarnos… las deportistas de Beach Volley son mucho más feas.

Qué hacer mientras nos tostamos al sol

Ya que tenemos el juego instalado en nuestros discos duros, habrá que familiarizarse con las jugadoras de voley, aunque tengan más bien pinta de profesoras de Historia. Así pues, los distintos modos de juego que se nos ofrece se dividen en Exhibición, Eventos, Entrenamiento y Multijugador on-line, aparte de un Editor donde podremos modificar características de las jugadoras. Pero vayamos por partes.

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Exhibición, poco hay que contar: el típico partido amistoso. En él pueden jugar hasta cuatro jugadores en el mismo ordenador, combinando teclado y pads. En lo que respecta a los Eventos, la verdad que encontramos una amplia variedad de competiciones: torneo de 4 u 8 equipos, campeonato italiano de 12 equipos, campeonato directo a 2 partidos, playoffs con 8 equipos y final internacional.

Completar estos eventos nos reportará desbloquear ciertos ítems ocultos, como nuevos estadios y bikinis para personalizar a las jugadoras. Por otro lado, en el modo Entrenamiento podremos practicar las distintas suertes del juego, como el saque, la recepción, el remate o el bloqueo. En este modo he tenido algunos problemillas de vez en cuando que me lanzaban al escritorio. Parche habemus, supongo.

El apartado gráfico de Beach Volley parece diseñado para un juego de hace un par de años. El conjunto poligonal resulta bastante escaso; veremos a las jugadoras con texturas muy poco detalladas, que resultan aceptables para el cuerpo, pero francamente deficientes para el rostro de los modelos. Al menos, la animación no desentona demasiado, y aunque no existe demasiada variedad de movimientos, los que hay se pueden calificar como aceptables… excepto la escena de celebración de punto donde las jugadoras se abrazan como meros autómatas. Igual son androides y no nos hemos enterado, y de ahí la cara de cabreo que tienen.

Un juego que se desarrolla sobre superficies de arena resulta una buena oportunidad para exhibir efectos de partículas; sin embargo, el terreno de juego resulta bastante estático, no se modifica bajo los efectos de las pisadas de las jugadoras o del impacto del balón. De vez en cuando salpica un poco de arena pero de forma poco realista. En resumen, hay poca cosa que destacar en este apartado. Simplemente decir que hace dos o tres años podría ser un conjunto gráfico de aprobado, pero ahora suspende irremisiblemente.

En lo que respecta al apartado sonoro, la cosa no mejora. Tanto la música que suena en los menús como la que escucharemos en el transcurso del partido no merecen otro calificativo distinto de ‘machaconas'. Bastante repetitivas, la mejor opción parece ser optar por desactivarla.

Los efectos de sonido están al mismo nivel que los cortes musicales: un conjunto bastante reducido de samples, que al menos acompañan a la acción que se desarrolla en la arena, pero que nos cansaremos de escuchar. 

Guión

Una vez que hemos comprobado que el nivel audiovisual del juego no alcanza ni de lejos el nivel que esperamos, es hora de evaluar qué tal se maneja Beach Volley y si merece la pena jugarlo. Pues bien, el juego suspende también en esta faceta, siendo aún más importante que el suspenso técnico.

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En principio el control no parece complicado, puesto que tenemos tres teclas de acción principales de contacto con el balón y una cuarta tecla para prolongar el lanzamiento, valiendo también esta configuración para el saque. A la hora de recibir la pelota podemos hacer jugada para rematar posteriormente o para que remate nuestra compañera, o simplemente devolver la pelota al campo contrario. Cada opción se asocia a una de las teclas principales.

La mayor diversión la encontraremos en el multijugador… pero por desgracia, no se puede jugar vía internet. Todos estos aspectos restan mucho interés, con lo cual parece que Beach Volley durará en nuestro disco duro menos que lo que dura una vida en el modo difícil del Contra Shattered Soldier.

Estrategia y trucos

Para dominar la creación de la jugada y que ésta culmine con un mate en condiciones habrá que hacerse con los confusos controles que ofrece el juego. Si los llegamos a dominar, entonces te recomiendo que ejecutes el mate con prolongación pero con la barra de potencia sin rellenar del todo, para evitar lanzar el balón a la playa vecina.

Enlaces

Manual