Ballistics
Rompe la velocidad del sonido
Faltan juegos que transmitan sensación de velocidad. Pero tranquilos, aquí llega Ballistics, un título para aquellos que quieren subir sus niveles de adrenalina en sangre. En este análisis se desvelan todas sus características.
Contados juegos son los que verdaderamente transmiten sensación de velocidad. Muchos de los simuladores automovilísticos actuales se centran más en mostrar fieles modelos de conducción antes que sorprendernos con aceleraciones imposibles, y eso es algo que muchos usuarios echamos de menos. Esperad... algo se acerca por el horizonte con rapidez asombrosa... ¿Wipeout? Casi. ¿Megarace 3? No, señores, otra vez no... En esta ocasión estamos hablando de una de las más sorprendentes y desconocidas sensaciones de la temporada. Ha llegado por la puerta de atrás, sin hacer ruido, pero ha llegado para quedarse. Señoras y señores, ante ustedes, el sin par BALLISTICS.
Carreras futuristas. Ya os veo imaginándolo... algo estilo Wipeout, Scars o F-Zero, ¿no? Pues no, Ballistics acoge un concepto de juego que, partiendo de las mismas premisas que sus "familiares", innova hasta el punto de parecer inventar otro género diferente. ¿Carreras entubadas?
Algo así se podría llamar. Pongámonos en situación: las más bellas ciudades en un futuro probablemente muy lejano, adornadas por unos curiosos tubos por los que transcurren las más inverosímiles carreras. A nuestro control tendremos unas sofisticadas motos capaces de romper la velocidad del sonido. Creedme... salirse de una curva a las imposibles velocidades que son capaces de alcanzar estos vehículos supondría prácticamente una desintegración. Por fortuna (o por desgracia, hay de todo en este mundo), las curvas no jugarán un papel demasiado importante en lo que a nuestra atención se refiere, ya que no nos será posible salirnos de los tubos que guían la carrera.
Entonces... ¿dónde está la gracia? ¿Cómo puede haber un juego de carreras en le que las curvas no jueguen un factor fundamental? Bueno, importantes sí que pueden llegar a ser, pero más que nada por cuestiones de visibilidad. Lo crucial en todo esto, y gracias a las corrientes magnéticas con las que circulamos, es que el desplazamiento de nuestra moto se hace girando por el tubo. O sea, que prácticamente no existirán para nosotros las paredes, techo o suelo, ya que toda la superficie jugará a nuestro favor. Y todo en pos de recoger los diferentes bonus, esquivar a nuestros rivales y, como no, evitar el comernos algún que otro mortal obstáculo.
En apariencia, una mecánica tan simple como la de avanzar mientras giramos por un conducto se complica hasta lo insospechado debido a las grandes velocidades que alcanzaremos. Ballistics es muy, muy rápido... tal vez el juego más rápido que he tenido el placer de echarme a la cara. Y desde luego, ni mencionar cuando accionamos el turbo y rompemos la velocidad del sonido. Ahí es cuando la obra de XICAT cobra su máxima espectacularidad, convirtiéndose lo que ya de por sí era frenético en una atracción brutal a la que sólo le falta que sintamos el peso de la inercia en nuestro sillón. Digno de ver y disfrutar.
Audio / Vídeo
El aspecto gráfico es llamativo como pocos. Ballistics es un juego un tanto oscuro, de acentuada belleza visual gracias entre otros detalles a los más que geniales efectos de luz y brillo que se les han aplicado a las texturas. Todos los materiales metálicos cobrarán vida gracias a unas impecables técnicas gráficas que alcanzarán su cenit en un PC con GeForce 3 en su interior, sin quitarle mérito al resto de configuraciones más inferiores, continuando siendo del todo impresionantes. Se nota que los ingenieros de Nvidia han colaborado con los programadores para optimizar al cien por cien los gráficos con su hardware. Aparte, todo el diseño destila elegancia por los cuatro costados, con unas motos tan bien elaboradas como correctamente integradas en el entorno. Incluso el HUD de nuestros trastos son una pasada, haciendo posible que los configuremos a nuestro gusto.
Los fondos no se limitarán a mostrar los interiores del tubo en el que circulamos. En muchas ocasiones, gracias a geniales cristaleras y ventanales, seremos testigos del decorado que acoge la carrera, pudiendo ser desde concurridas ciudades futuristas hasta los más inhóspitos terrenos selváticos... y eso que ya de por sí los tubos están estupendamente diseñados, consiguiendo un efecto de lo más sorprendente e hipnótico gracias a la abrumadora velocidad con la que se mueven.
Y ahí está lo más espectacular de Ballistics, la velocidad. Será difícil volver a ver unos gráficos tan bien diseñados moviéndose con una rapidez tan pasmosa y una fluidez que quita el hipo. Y todo gracias al Diesel Engine, un nuevo motor gráfico capaz de mover cantidades industriales de polígonos con todo tipo de efectos visuales manteniendo un suave y constante frame rate. Verlo para creerlo...
El sonido... bueno, está ahí. Se deja notar más que nada en el zumbido de nuestro vehículo, porque el resto de fx son más bien discretitos. No se, me parece un poco vulgar el "clanc" de los choques. Eso sí, de lo más espectacular es el efecto sonoro de cuando rompemos la velocidad del sonido, parece que con sólo oírlo ya nos da sensación de inercia. Aparte, el acompañamiento musical apunta hacia el techno más frenético, ayudando sumamente con la ya de por sí fenomenal ambientación.
Guión
No hay mucho que contar, pero aún así hay cierto trasfondo argumental. La situación nos lleva al año 2090, y Ballistics es uno de tantos deportes extremos de la época. En concreto, es el sustituto de la Fórmula 1, convirtiéndose en el juego de moda y moviendo cantidades de dinero del todo desorbitadas. ¿Quién se apunta?
Jugabilidad
Otro de los apartados estrella de Ballistics. Lo atractivo de su desarrollo, unido a su facilidad de manejo son grandes ayudas para convertir este título en uno de los más adictivos del momento. Ofrece una jugabilidad totalmente arcade, en la que tenemos que preocuparnos prácticamente sólo de esquivar... y poco más. Detalles como controlar el calentamiento de nuestra moto, coger los objetos de bonus y administrar los turbos son sólo más alicientes a añadir a la excelente capacidad de diversión que atesora la obra de XICAT a través de sus siete escenarios.
Por otro lado, resulta muy curioso el no tener que preocuparnos por situaciones tan comunes en los juegos de carreras, como por ejemplo las curvas. El estar dentro de un tubo proporciona una jubabilidad bastante, por así decirlo, inédita en los juegos de ordenador actuales... y hay que reconocer que da resultado, centrándose totalmente en la salvaje velocidad. Esto es directamente proporcional a la concentración que requiere por parte del jugador, puesto que un golpe a la velocidad del sonido es bastante... doloroso. Y es que a la hora de jugarlo con siete compañeros más es de lo mejor ver a algún colega explotar después de haberse comido de lleno una pared a más de 900 kilómetros por hora.
También hay cierto componente estratégico, un tanto digamos de tuning. En las carreras, ya sea ganándolas o con ciertos movimientos "arriesgados", nos dan dinero que podemos invertir en nuevas mejoras para nuestros vehículos. Así que no sólo hay que ser un maestro en el arte de la conducción, sino que hay que saber administrar el capital para que tengamos la moto siempre a punto para cada carrera. De todos modos, lo complicado sigue siendo el mantenernos vivo en plena circuito.
Estrategia y trucos
Aprenderse el recorrido de los circuitos nunca está de más. Es bueno saber las zonas en las que no nos vamos a topar con ningún tipo de obstáculo... ¡Ahí será el momento justo para activar el impresionante turbo!
El uso del refrigerante hay que moderarlo con cierta inteligencia. A veces, usarlo como freno es un buen recurso... Hay que tener en cuenta que los accidentes calientan nuestro vehículo, y cuanto más bestia sea este, más grande será el calentón.
No gastes a lo loco el dinero obtenido en las carreras. Una buena inversión económica en mejorar nuestra moto será fundamental para ganar carreras e ir abriendo nuevos recorridos.
Comparándolo con...
Vaya, así de primeras se podría decir que es fácil compararlo con cualquier otro título de carreras futuristas... pero la verdad se que Ballistics no se parece a ningún WIPEOUT y similares. Su mecánica radica totalmente en el girar dentro del tubo, y eso ya le da una dimensión muy distinta del resto de juegos de su género. ¿Mejor, peor? A gusto del consumidor... eso sí, como opinión personal, os puedo decir que lo que Ballistics nos ofrece es tan innovador como genial.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.