Atari Masterpieces Vol. 2

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Tras una primera entrega bastante irregular y que no valoramos excesivamente bien N-Gage recibe la correspondiente y anunciada segunda entrega de un buen puñado de clásicos de Atari, aquellos títulos que marcaron la juventud de los que ahora rondamos la treintena. Sobra decir que como recopilación histórica y además de bolsillo, su valor es el que le da la suma de nuestros sentimientos y la nostalgia que se pueda sentir por aquellos primeros pasos de esta industria que tanto ha evolucionado.

En estos tiempos de revoluciones, trescientos sesenta y PS3s, juegos como Centipede o Pong parecen totalmente prehistóricos, anacrónicos en muchos sentidos, pero con una jugabilidad y un cierto gustillo que aún levanta pasiones entre bastantes aficionados. Para ellos, esta recopilación será todo un acierto; sin embargo, para el resto de usuarios que no han vivido la época de jugar por batir tu propio récord, puede parecer absolutamente innecesaria.

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Dicho esto, vayamos uno a uno y diseccionemos los juegos incluidos en esta conversión píxel perfect de las obras maestras de Atari:

- Asteroids Deluxe: una versión remozada de Asteroids en la que además de destruir los asteroides que tratan de impactar contra nuestra aeronave, debemos protegernos con un escudo y acabar con algún que otro OVNI despistado que nos disparará desde los oscuros espacios de los videojuegos. Entretenido aún ahora, aunque muy limitado técnicamente en estos tiempos que corren.

- Centipede: el retorno del temido ciempiés que va descendiendo por la pantalla intentando acabar con nuestras escasas vidas. Las únicas armas de las que disponemos son la rapidez pulsando la tecla 5 y la capacidad para intuir por dónde se desviará en su descenso. Al nivel de Asteroids, un clásico entretenido aunque se vea seriamente afectado por el paso del tiempo.

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- Crystal Castles: tal vez uno de los títulos menos conocidos de los primeros tiempos de Atari, aclaremos que es del año 83, pero un auténtico revolucionario que mezcla dosis de comecocos con un ligero toque de plataformas. Sencillo de controlar y bastante rápido en su desarrollo, su nivel de dificultad te pondrá a prueba como el que más. Pero no es suficiente con ser veloz, también hay que saber planificar la mejor ruta para evitar a los enemigos. Todo un acierto en la recopilación.

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- Liberator: en cada esquina de la pantalla disponemos de un lanzamisiles con el que debemos destruir bases alienígenas, naves y los misiles que nos lanzan sin descanso. Cada vez que una de sus balas impacta contra uno de nuestros lanzamisiles lo perdemos, con lo que la cosa se complica bastante. Probablemente uno de los nombres más flojos de la recopilación.

- Pong: qué se puede decir de Pong que no se haya dicho ya; el inicio de los videojuegos, esos pads de control con forma de ruedecilla que hicieron soñar a toda una generación de niños que llegaron un poquito antes de la democracia. La sensibilidad de la cruceta de N-Gage no le hace ningún favor y aunque en su día fue el hito que marcó una época, hoy por hoy y con una conversión píxel perfect en la que además estamos obligados a jugar contra la CPU, pierde todo su encanto.

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- Space duel: una variación de Asteroids donde entra en juego la inercia. A diferencia del primer título de esta recopilación donde la nave se mantiene en una posición fija y tan solo se mueve si es desplazada por cierto tipo de enemigos, en Space Duel tenemos propulsión trasera que nos permite desplazarnos por la pantalla para evitar a los rivales. Divertido.

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- Tempest: otra de las más flojas inclusiones de la recopilación y nuevamente, un clásico de disparos. Manejamos una especie de nave que dispara a los enemigos que suben hacia allá a través de una especie de telaraña. El tamaño de la pantalla de N-Gage no sirve de ayuda para ver a los enemigos, minúsculos en la lejanía, lo que eleva bastante un nivel de dificultad bastante exigente por sí solo.

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- Warlords: en cada esquina de la pantalla hay una especie de castillo con su princesa dentro y en la pantalla van saliendo una especie de bolas de fuego que rebotan como en el Arkanoid. El objetivo es derribar los castillos de los rivales antes de que ellos hagan lo propio con el nuestro y terminar con sus reinas. Una pena que no disponga opciones multijugador con la conexión bluetooth porque habría resultado bastante entretenido.

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Debemos añadir que en todos los juegos podemos seleccionar el nivel de dificultad, elevadísimo en el nivel que viene por defecto en estos tiempos en los que ya todos estamos acostumbrados a terminarnos los juegos que compramos. En aquellos inicios un nivel de dificultad alto y creciente, en esa época sin finales pero con game overs recurrentes, era la única manera de mantenerte pegado a la recreativa o el televisor e incitarte a jugar partida tras partida.

La recopilación y conversión llevada a cabo por uno de los estudios de desarrollo de Backbone Entertainment ofrece además cuatro valiosos extras en forma de cartuchos de Atari 2600. Cuatro clásicos de salón que podemos desbloquear alcanzando unos records asequibles, aunque no sin cierto mérito, en diferentes juegos de las masterpieces. Sus nombres: Air-Sea Battle 2600 (un clásico de disparos, donde debemos torpedear o atacar con un avión las bases enemigas), Canyon Bomber 2600 (muy similar al anterior, debemos bombardear a los enemigos controlando un avión), Miniature Golf 2600 (un juego de ¿golf? que se remonta al año 79) y Video Checkers 2600 (las damas de toda la vida).

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Colorido simple, gráficos vectoriales en su mayoría, simpleza técnica y artística... Para amantes de lo retro y para quienes puedan superar que no se incluyan sombras en tiempo real, para los que no se fijen sólo en la primera impresión, podrán comprobar que a pesar de su anacronismo son más que suficientes para entretenernos, incluso para desatar la nostalgia acumulada por el paso de los años.

Como N-Gage dispone de servicio online, las puntuaciones pueden ser subidas a un ranking global, con lo que la motivación que puede suponer verse como el mejor jugador de Centipede puede resultar bastante atractiva. Como extras se puede añadir que vuelven a incluirse unos videos del CEO de Atari, el señor Nollan, que en un perfecto inglés sin subtítulos habla sobre la Atari 2600 y Pong.

Si sois amantes de lo retro y del espíritu clásico, su compra es muy aconsejable. Pero solamente en ese caso. Tal vez se le pueda encontrar otro atractivo en su sencillez de control y en su facilidad para echarnos una partida rápida durante un viaje corto. Más allá de eso, no hay mucho más que podamos añadir. Es más, si tuviera que recomendar uno de los dos volúmenes del recopilatorio, optaría por el primero, bastante más equilibrado en cuanto a géneros que el que hoy hemos analizado. Tal vez sea hora de que los clásicos de Atari se actualicen si quieren sorprendernos, aunque mucho nos tememos que en seguiremos teniendo la correspondiente versión de Asteroids y demás obras a todos los sistemas de entretenimiento que vayan saliendo en el mercado.

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