Arizona Sunshine, Análisis PlayStation VR

Zombies en VR

Sin duda alguna los juegos de zombies están de moda desde la generación de PlayStation 3 y Xbox 360, donde conocimos buenos títulos de no muertos como Dead Island, Dead Rising y muchos títulos repletos de acción, vísceras y sangre. Está claro que el boom de series televisivas como The Walking Dead impulsaron a las desarrolladoras a crear historias ambientadas en entornos post apocalípticos repletos de caminantes, corredores y gran multitud de enemigos distintos, y por supuesto la Realidad Virtual no se iba a quedar atrás.

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En esta ocasión aterriza en PlayStation VR Arizona Sunshine, un título de zombies que se desarrolla en el desierto de Arizona y donde tendremos que lidiar con un sinfín de enemigos no muertos con distintas armas y objetos. Una propuesta que bebe de muchos de los juegos anteriormente mencionados y que a simple vista llama la atención. Pero, ¿Realmente es lo que esperábamos? Vamos por partes.

Arizona Sunshine está adaptado para todo tipo de jugadores y periféricos del casco de RV de Sony

Antes de nada, vamos a aclarar un punto importante. Todos sabemos que los juegos de realidad virtual están un poco verdes. Actualmente el catálogo no es demasiado extenso y pocos juegos podemos encontrar que tengan un buen equilibrio entre duración, calidad gráfica y jugabilidad. Se nota que los desarrolladores trabajan cada vez más en realizar experiencias increíbles pero aún este territorio tiene mucho recorrido por realizar y para jugar juegos como Arizona Sunshine esto lo debemos tener muy claro.

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El juego que tenemos entre manos nos ofrece una campaña que podemos jugar solos o acompañados de otro jugador de manera cooperativa algo que se agradece en este tipo de títulos de realidad virtual. Pero no solo eso. También nos incluye un modo horda o supervivencia en el que podemos eliminar zombies junto con otros cuatro jugadores simultaneos. La campaña –que no nos durará más de cuatro o cinco horas- está dividida en escenarios muy diferenciados y una vez tenemos el control del protagonista podremos elegir la manera en la que podemos disfrutar la experiencia, si con Dualshock, con mandos de movimiento PlayStation Move, o con el nuevo e interesante Aim Controller el famoso mando pistola que salio a la venta junto con Farpoint. Dependiendo de cómo juguemos, la experiencia variará, por ejemplo si decidimos jugar con mandos de movimiento no podremos movernos de manera natural por el escenario sino que deberemos hacer pequeños teletransportes para llegar hasta nuestro objetivo,  algo que probablemente no sea del agrado de todo el mundo.

La exploración y la interacción con el escenario todo un acierto

Lo que es la experiencia de juego es bastante dinámica: podremos explorar el escenario y recoger los objetos que nos llamen la atención y en definitiva ser curiosos al igual que seríamos en la vida real. Podemos abrir coches y maleteros en busca de objetos útiles y otras armas, en general es un juego que invita al jugador a ser curioso y a explorar el escenario pudiendo interactuar con casi cualquier objeto que nos topemos. Nuestro inventario será nuestro cinturón en el que tendremos nuestras armas y nuestros objetos de un solo uso. Además dispondremos de un reloj para entrar en modo pausa y del que realizar distintas acciones, hasta ahí bien.

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Arizona Sunshine es un juego que enfoca todo su ser en la acción y disparos. Es decir, no busquéis ningún componente de terror porque no lo tiene. Quizás tiene varios escenarios que pueden ser algo más agobiantes que otros pero se echa en falta un componente de terror entre tanta violencia gratuita. Es un juego para eliminar enemigos y despejar una zona al completo muy al estilo de un House of the Dead solo que sin railes. Y para cumplir nuestra tarea dispondremos de un arsenal de armas que no es que sea demasiado grande pero que cumple su función. Tendremos granadas, pistolas, fusiles de francotirador y distintos objetos con los que defendernos ante hordas y hordas de enemigos y que hasta cierto momento puede ser divertido pero finalmente acaba resultando repetitivo e irá perdiendo su gracia por lo que recomendamos sesiones cortas para no llegar a aborrecer el título.

Algo que nos ha gustado mucho es que es un juego que puede disfrutar cualquiera, puesto que, no hay riesgo alguno de mareo con la configuración adecuada. El juego ofrece tantas maneras de jugarlo que no será difícil adaptarse al control y finalmente todo el mundo puede disfrutarlo sea de la manera que sea aunque no esté acostumbrado a jugar juegos de realidad virtual. Luego, el título luce bien gráficamente sin destacar demasiado, el sonido en el juego está bien recreado con multitud de efectos de sonidos para cada una de las armas y acciones que realizamos, aunque se echa en falta músicas algo más elaboradas y un empujoncito en general a lo que viene siendo todo el apartado técnico del juego. 

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El apartado técnico de Arizona Sunshine junto a su doblaje resta credibilidad a su ambientación

Las animaciones de los enemigos acaban siendo algo torpes y toscas lo que resta algo de credibilidad a la ambientación y debemos de tomárnoslo con humor. Sin embargo, el tracking de los mandos de movimiento y nuestras acciones en el juego están realmente bien y podríamos decir que la ambientación –ignorando estos pequeños errores anteriores-  en general llegaría a ser parcialmente buena, de no ser por un pequeño detalle que la arruina estrepitosamente: el doblaje al castellano.

Y es que el que escribe estas líneas no se había encontrado con un doblaje peor que el de Age of Pirates y su famoso “¿Me estás nombrando virreina?” hasta que probó este juego por primera vez con su localización al castellano. Señores, ¿Cómo es posible que esto haya salido a la venta con este doblaje? Realmente no os exageramos cuando os decimos que podríamos hacer un esfuerzo todo el mundo y doblar el juego y quedaría mucho mejor que el resultado final que nos han mostrado en Arizona Sunshine. Eso sí, para reírnos un rato sí que vale la pena escuchar aunque sea las primeras líneas de diálogo, pero luego descubrimos que el protagonista no se calla la boca en todo el juego y ya es cuando nos preguntamos verdaderamente si merece la pena seguir con esta tortura.