Alien Rage
- Plataforma360PS3PC6
- GéneroAcción
- DesarrolladorCity Interactive
- Lanzamiento24/09/2013
- TextoAlemán, Español, Francés, Inglés, Italiano
- VocesInglés
Alien Rage
Acción interestelar, alienígenas muy cabreados y un hercúleo marine espacial a nuestro servicio; así es Alien Rage, un nuevo first person shooter futurista que llega a PC en formato descargable de la mano de City Interactive, aunque pronto llegará también a PlayStation 3 y Xbox 360. Repasemos las claves de este enésimo FPS en nuestro análisis.
Los first person shooter se está convirtiendo en el reclamo ideal para todo tipo de desarrolladoras, con títulos más o menos brillantes y con ambientaciones de lo más variadas, pero que acaban llegando a un buen número de usuarios en todo tipo de plataformas, logrando cifras de ventas ampliamente superiores a otros géneros. City Interactive ‒autores de la franquicia Sniper Ghost Warrior‒ ha querido aportar su granito de arena con un nuevo FPS futurista protagonizado por marines espaciales y alienígenas, demostrando muy poca originalidad aunque con una presentación audiovisual llamativa. Así, Alien Rage pretende convencer a los fans de los disparos y las explosiones con una historia y unas mecánicas que beben de títulos como Doom 3, Quake IV o incluso Bulletstorm, aunque a la práctica se queda a medio camino en todos y cada uno de sus aspectos destacables; repasemos las claves de un título que llega primero a PC pero que no tardará en llegar pronto a los bazares digitales de PlatStation 3 y Xbox 360.
Pero la humanidad no es la única especie interesada en tan prometedor elemento; el universo está lleno de vida y de culturas avanzadas, así que la raza Vorus aparece en escena para hacerse también con Prometheus. Al principio, ambas razas coexistieron en paz en dicho asteroide, trabajando conjuntamente en las minas; pero algo se torció. Alguien atentó contra los Vorus y no tardaron en tomar represalias enviando a sus fuerzas militares. Y es aquí cuando llega nuestro turno, tomando el control de un marine espacial ‒de aspecto bastante genérico, por cierto‒ que debe infiltrarse en las minas controladas por los Vorus para acabar con tan letal amenaza, enfrentándose a enemigos y jefes finales de todo tipo.
Alien Rage se vale de elementos old-school del género, como el propio diseño de los niveles ‒totalmente lineales‒, el aspecto de las armas e incluso de los personajes. Asimismo, las situaciones que viviremos nos recordarán irremediablemente a otros títulos consagrados, resultando en este sentido poco ambicioso y con una falta de originalidad manifiesta. Incluso recibiremos indicaciones vía radio de una voz femenina ‒una inteligencia artificial que nos ayudará en todo momento‒, deberemos recoger diarios perdidos a modo de objetos coleccionables y participaremos en secciones a bordo de una especie de mecha disparando a todo bicho que se cruce en nuestro camino, algo que ya hemos vivido en infinidad de títulos y que de nuevo regresan en esta nueva aventura futurista de City Interactive.
A pesar de tan manidos recursos, también nos encontraremos con elementos que demuestran cierta personalidad; así, en pantalla aparecerá un marcador de puntuación que irá aumentando según nuestras acciones. Los disparos en la cabeza, los combos mediante explosiones ‒de lo más espectaculares‒ y otras hazañas repercutirán en una mayor puntuación. El resto del interfaz gráfico en pantalla se reduce a una esfera que nos indicará la salud, el blindaje, los perks disponibles y la munición que nos queda; todo bastante limpio y minimalista, dejando todo el protagonismo a los escenarios y a la acción. Así, su sencilla historia se desarrollará a lo largo de 14 niveles que incluirán hasta 21 tipos de enemigos ‒incluyendo los final bosses‒ y 10 tipos de armas ‒cada una con disparo secundario‒, ya sean humanas o Vorus.
El problema es que una vez en pleno combate, la variedad brillará por su ausencia, planteando una y otra vez las mismas situaciones con los mismos enemigos. En este sentido, Alien Rage no está muy bien equilibrado. Su curva de dificultad resulta extraña y frustrante. Tanto es así que al principio será incluso difícil, mientras que una vez avanzada la historia, podremos superar los enfrentamientos con relativa facilidad. En ello tiene mucho que ver el sistema de perks implementado, mal equilibrado y poco inspirado, que iremos desbloqueando a medida que logremos mejores puntuaciones; eso sí, su desarrollo es frenético y animado, aunque poco a poco se volverá monótono y repetitivo, sin nada nuevo que aportar hasta el final de la aventura.
Y es que la línea que separa una experiencia desafiante de otra frustrante es muy fina; en Alien Rage, por desgracia, moriremos más de los que nos gustaría, y no por nuestra culpa precisamente. El control sufre de ciertas imprecisiones ‒algo achacable a su espíritu old-school‒ pero decepcionante al fin y al cabo, además de una disposición de los checkpoints desesperante. Nuestro héroe podrá desplazarse con facilidad; esprintar, saltar, agacharse, apuntar mediante la mirilla del arma equipada, cambiar de armas de una forma rápida y cómoda y realizar golpes cuerpo a cuerpo. Aunque todo ello estará condicionado por una serie de decisiones que no acompañan como deberían a la experiencia de juego.
Más allá del nivel de dificultad elegido ‒entre tres posibilidades‒, los enemigos son difíciles de eliminar ‒y no por su más que dudosa inteligencia artificial‒ y apuntar con precisión se convertirá en una sucesión de disparos aleatorios, características clave de todo FPS que en este caso perjudican la experiencia de juego. Por otro lado, su puesta en escena cumple con su cometido, sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de un juego descargable a 20 euros en el momento de su lanzamiento. Recurre al Unreal Engine 3 y hace buen uso de un motor muy exprimido a estas alturas pero que ofrece muy buenos resultados sin necesitar de equipos especialmente potentes. Aun así presenta los inconvenientes por todos conocidos ‒como la carga lenta de texturas‒, aunque a nivel global es más que satisfactorio. Mientras que su diseño artístico no sorprende en absoluto, sí destaca por un juego de luces y varios efectos sorprendentes.
Además, gracias a la facilidad para destruir ciertos elementos de nuestro entorno ‒normalmente destacados con colores cálidos, opuestos a la paleta fría escogida para la ocasión‒, seremos testigos de escenas bastante espectaculares en las que acabaremos con un buen número de enemigos logrando grandes combos de puntuación, eso sí, todo diseñado bajo scripts más que predecibles. A nivel sonoro no destaca especialmente, resultando bastante genérico tanto en las melodías como en los efectos de sonido. La ambientación está conseguida, sí, pero no es algo que no hayamos visto con anterioridad en títulos similares, resultando demasiado previsible en todos y cada uno de sus aspectos.
Más allá de una campaña bastante repetitiva, podemos disfrutar de un modo multijugador a la vieja usanza, simple pero adictivo, aunque con apenas dos modos de juego: Deathmatch y Team Deathmatch. Todos contra todos, ya sea en solitario o por equipos tomando el rol de ambos bandos, humanos ‒en azul‒ y aliens ‒en rojo‒, a lo largo de tan sólo cuatro mapas, un contenido bastante limitado; como decimos, es un modo secundario y que no aporta mucho más que unas cuantas partidas rápidas si la campaña se vuelve algo tediosa, algo bastante probable. Alien Rage llega con las voces en inglés aunque con subtítulos en castellano, lo que nos ayudará a seguir con más garantías un guión muy convencional. Además, los amantes de los logros de Steam podrán desbloquear un buen número de ellos a medida que avancen en la campaña, que durará unas 8 o 10 horas dependiendo de la habilidad del jugador; todo por 19,99 euros, un precio ajustado si tenemos en cuenta el acabado y el contenido de lo nuevo de City Interactive.
Correcto
No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.