‘El desembarco de Alhucemas’. El último coletazo del imperio español

‘El desembarco de Alhucemas’ es un cómic histórico que narra una de las operaciones más brillantes y arriesgadas de la historia del ejército español. Más allá del relato de los hechos su autor, Rafael Jiménez, hace un retrato de la sociedad española del primer cuarto del siglo XX: una nación en decadencia, un rey cuestionado, los militares cogiendo cada más poder y un pueblo empobrecido y sometido a los designios de una clase dirigente privilegiada.

El álbum se inicia con un repaso al fracaso de la campaña africana contra Abd el Krim, líder de las cabilas rifeñas. Solo en el desastre del monte Arruit 3.000 soldados perdieron la vida, muchos de ellos torturados después de rendirse. Ante esta situación, los mandos del ejército deciden, tras hablar con las autoridades francesas, lanzar una operación anfibia contra el centro del poder de la rebelión.

Era la primera vez que se intentaba algo de tal envergadura y más teniendo en cuenta el desastroso precedente de Galípoli en la I Guerra Mundial. De hecho, algunas de las lecciones aprendidas en esta operación fueron la base del plan de desembarco del Día D en junio del 44.

Ampliar

Un cómic en tres actos

La primera parte de ‘El desembarco de Alhucemas’ se centra en presentar la situación política, militar y social del momento. Aparecen ya por las viñetas personajes relevantes como Primo de Rivera o Francisco Franco, entonces coronel de la legión. Rafael Jiménez no tiene reparos en descubrir las verdaderas motivaciones de los militares que intentaban sujetar a un régimen que hacía aguas por todos los lados y que se había desconectado del pueblo.

Ampliar

Los preparativos

El lado humano del relato lo pone, Celestino, un joven campesino sin recursos que ve como de la noche a la mañana es llamado a filas y sin casi tiempo para la instrucción se ve en mitad de una terrible batalla.

En su historia se refleja la de todo un pueblo que, sin decantarse políticamente por un lado u otro, se ve obligado a tomar las armas, a marchar a tierra extraña y a privar a sus padres del único sustento que tienen.

Ampliar

La batalla

El último tercio del libro es un cómic bélico al uso, con una buena descripción de las diferentes maniobras que se ejecutaron y con una serie de pequeñas anécdotas que dan un toque más humano a los enfrentamientos entre españoles y marroquíes. Se hace hincapié tanto al culto a la muerte de la Legión como a la ferocidad con la que combatían los rifeños.

En esta zona se prescinden de las didascalias para que el peso del relato lo lleven tanto los diálogos, muchos de ellos canciones o gritos de guerra, como los dibujos.

Ampliar

El dibujo

Iván Luna es el encargado de poner los lápices al álbum, un dibujo clásico con un buen dominio de las escenas de acción. Se nota que detrás hay una excelente documentación por el gran trabajo que se ha hecho en recrear uniformes, armas y armamento. Emplea estructuras muy sencillas que favorecen la lectura y solo un par de veces se permite viñetas a gran tamaño, que cumplen con la función de demostrar la enorme dimensión del operativo. A destacar también el buen hacer de David Fernández con el color, que cambia en función de la situación geográfica de la acción.

Ampliar

Conclusión

‘Desembarco de Alhucemas’ funciona bien tanto como cómic histórico como bélico. Aunque en un principio puede parecer una oda al militarismo de unas figuras que fueron más adelante los cabecillas del golpe de Estado contra la República en el 36, la presencia de Celestino y una magnífica página final ambientada en la Guerra Civil despejan cualquier duda.

Ampliar

Ampliar

Ficha

Sigue el canal de MeriStation en Twitter. Tu web de videojuegos y de entretenimiento, para conocer todas las noticias, novedades y última hora sobre el mundo del videojuego, cine, series, manga y anime. Avances, análisis, entrevistas, tráileres, gameplays, podcasts y mucho más. ¡Suscríbete!