‘All Star Superman’. Si hubiera que leer un solo cómic del Hombre de Acero, sería este

A principios de este siglo, las dos grandes editoriales del mundo del cómic, Marvel y DC, vieron la necesidad de sacudir unos universos que venían a la baja. La Casa de las Ideas optó por abrir una nueva línea, Ultimate Marvel (2002), que, de la mano del escocés Mark Millar, cambió para siempre la forma en la que se percibían los superhéroes clásicos: los guiones eran políticamente incorrectos, las tramas más complejas y los personajes más “humanos”. Salvando las distancias, se trataba de llevar el espíritu de Watchmen a la competencia. DC, que había estado en la vanguardia creativa con su sello Vértigo creado en 1993, perdía fuelle. Solo ‘100 balas’ y ‘Fábulas’ se mantenían al frente. Así que desde la cúpula se decidió dar una respuesta a la altura del nivel de la de Marvel; surgía de esta fomra la iniciativa All Star.

Se trataba de juntar a los mejores talentos del momento, darles absoluta libertad creativa y ofrecer historias fuera de la continuidad de las colecciones. En 2005, Frank Miller y Jim Lee inauguraron el proyecto con ‘All Star Batman y Robin’, una historia algo confusa que, tras la expectación inicial de ver cómo funcionaban dos genios juntos, creó más dudas que certezas. En 2006 salía a la luz una segunda miniserie, ‘All Star Superman’, y aquí sí se acertó de pleno, creando una de las obras más importantes y hermosas del cómic de superhéroes.

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Una vieja idea...

‘All Star Superman’ no nació en 2006; la idea había germinado mucho antes en la mente de Grant Morrison, uno de los mayores talentos del llamado desembarco británico. Durante los 90 se convirtió en un guionista estrella gracias a que subvirtió los pilares del género: ofrecía narrativas no lineales y estructuras experimentales, reinventó los géneros y personajes clásicos, introdujo temas filosóficos y esotéricos, rompía la cuarta pared... De esta etapa son: ‘Doom Patrol’ (1989–1993), ‘Animal Man’ (1988–1990), ‘Arkham Asylum: A Serious House on Serious Earth’ (1989), ‘Kill Your Boyfriend’ (1995), ‘Flex Mentallo’ (1996), ‘JLA’ (1997–2000), ‘The Invisibles’ (1994–2000).

En 1998 había presentado junto a Mark Millar un proyecto (Now) para cambiar el rumbo de la colección de Superman, que fue rechazado por la editorial. Así que en Marvel encontró sitio para dar rienda suelta a su imaginación y convirtió ‘New X-Men’ (2001–2004) en una colección de culto.

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Un amigo se sube al carro

Dan Didio, vicepresidente de DC, le llamó para que pusiera en marcha esa vieja idea de la mano de Jim Lee, pero no hubo forma de cuadrar los calendarios, así que propuso a su amigo y colaborador habitual, Frank Quitely, que se embarcara en la aventura.

Ambos se tomaron el trabajo con gran dedicación y estudiaron muchos de los cómics publicados de Superman para ser los más fieles al espíritu del personaje. El propio Morrison confiesa que en su Superman “no estaba pensando acerca de la Edad de Plata o la Edad Oscura, o cualquier cosa relacionada con los cómics que había leído, sino en la gran idea compartida de ‘Superman’ y ese logo en forma de ‘S’ que allá donde voy veo estampado en camisetas, de chicos y chicas”.

También cuenta que para su personaje fue inspirador un extraño encuentro en la Comic-Con de San Diego con un fan que iba disfrazado de Superman y cuyo parecido con él era asombroso. El visitante, abordado por Millar, charló con el escritor ofreciendo respuestas como si se tratara del famoso kriptoniano, material que luego emplearía en el moldeado de su Superman.

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Una matrioska

El gran impacto de ‘All Star Superman’ no se debe a que Morrison edifique una historia novedosa o que Quitely ofrezca un dibujo sobresaliente. Lo que hace inmortal a la obra es que ofrece muchos niveles de lectura; un cómic que enamora tanto a sus incondicionales como a aquellos que le descubran en las viñetas por primera vez.

Aunque libre de cualquier condicionamiento, Morrison aborda con respeto reverencial lo construido por todos los autores que tomaron el relevo a Jerry Siegel y Joe Shuster (Action Comics #1, 18 de abril de 1938). El guion de ‘All Star Superman’ es un repaso a casi 70 años de historia del personaje. Por sus viñetas desfilan los principales personajes: Lois Lane, Jimmy Olsen, Perry White, Jonathan Kent, Martha Kent, Krypto, Lex Luthor, Doomsday, Bizarro, Jor-El, Lana Lang...

También es un acercamiento filosófico al héroe. Por un lado, ofrece una visión kantiana del concepto del bien y, por otro, reflexiona sobre la muerte, la existencia y las motivaciones que sirven de motor al hombre. De nuevo, Grant mezcla filosofía, metafísica y crítica social en sus historias, pero de una forma que resulta comprensible a sus lectores.

Por último, hay una elaboración homérica del relato, introduciendo elementos de la mitología clásica para enfatizar su comparación del superhéroe con un dios moderno. Ahí están los 12 trabajos de Hércules, el robo del fuego de Prometeo, el mito de Ícaro...

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Un dibujante de primera

Aunque para DC Frank Quitely no fue la primera opción, su elección como dibujante resultó ser todo un acierto. Los dos escoceses se conocían desde hacía tiempo y habían llevado a cabo numerosos trabajos juntos: ‘Flex Mentallo’ (1996), ‘JLA: Earth 2’ (2000), ‘The Invisibles vol. 3 #1’ (2000), ‘New X-Men’ (2001–2003), ‘We3’ (2004–2005)...

Como el dibujante reconoce: “Me encanta trabajar con Grant, comprende qué hace funcionar a un cómic mejor que cualquier otro”.

Para la composición de las páginas, Quitely ha optado en esta obra por estructuras clásicas con viñetas rectangulares, sacrificando siempre su dibujo al relato. No obstante, luce todo su talento tanto en la elaboración de splash-pages como en el uso de ángulos de cámara inusuales y la combinación de distintos encuadres muy agresivos en una sola página. Cada viñeta está diseñada para ser perfectamente legible, con espacio suficiente para los textos y una disposición que respeta el orden natural de lectura.

Aunque trabaja con herramientas digitales en etapas posteriores, su proceso inicial es manual, lo que le dota a su obra de autenticidad. Su trazo fino y el uso equilibrado de sombras y luces confiere a su dibujo un toque elegante y realista. Esta combinación de técnica tradicional y moderna le confiere un estilo distintivo.

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Conclusión

‘All Star Superman’ es todo un lujo para inaugurar la nueva etapa de Panini al frente de DC, un relato delicioso tanto en lo narrativo como en lo visual que ofrece una visión 360 del superhéroe más grande de todos los tiempos. Una obra imprescindible en la que se desvelan nuevos secretos en cada relectura.

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