Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA
Betech
Ciencia y tecnología

Inteligencia artificial

La IA y chats como ChatGPT superan a los propios humanos a la hora de desmontar teorías de la conspiración

Un nuevo estudio de la revista Science demuestra cómo la IA puede ser una gran aliada a la hora de combatir bulos y desinformación.

homeland claire danes mandy patinkin

ChatGPT, uno de los modelos de chatbot impulsados por inteligencia artificial más populares de la actualidad, está demostrando ser una valiosa herramienta en la lucha contra las teorías de la conspiración. Entre sus virtudes como su facilidad de uso o su inmediatez ahora se cuenta una mayor tasa de éxito que la de los propios humanos a la hora de convencer a teóricos de la conspiración de que sus creencias son erradas, por lo que se trata de una gran herramienta en la lucha contra la desinformación.

La inteligencia artificial es una pieza clave para combatir los bulos y la desinformación según un nuevo estudio

Un nuevo estudio publicado en la revista Science revela que una inteligencia artificial interactiva como los modelos de chat avanzados es más efectiva y considerada una fuente más fidedigna que un humano a la hora de charlar con teóricos de la conspiración para demostrarles que sus creencias son falsas. Jan-Willem van Prooijen, experto en ciencia del comportamiento en la Universidad de Amsterdam, considera que este hallazgo es un hito histórico y de algo muy prometedor que puede dar pie a que la IA se utilice para combatir la desinformación rampante en la actualidad.

Cómo aprender inteligencia artificial
Ampliar
Chatbots potenciados por IA como ChatGPT tienen un gran potencial a la hora de combatir bulos y desinformación

Muchos psicólogos consideran que las personas que se aferran a las teorías de la conspiración —como que nunca se aterrizó en la Luna o que en el Área 51 estadounidense se ocultan cuerpos de extraterrestres y platillos volanteslo hacen por una necesidad intrínseca de encontrar explicaciones simples al complejo mundo que les rodea. No obstante, las evidencias halladas en este nuevo estudio pueden demostrar que esta explicación puede no ser del todo precisa.

A grandes rasgos, el estudio ha consistido en escoger a 2.000 voluntarios que creen al menos en una teoría de la conspiración, y les hicieron conversar con un chatbot llamado Debunkbot, de un funcionamiento similar a ChatGPT. Cada invididuo compartía con la IA cuál es la teoría de la conspiración en la que creía junto con las supuestas pruebas que respaldaban dichas creencias. Como respuesta, la inteligencia artificial fue echando por tierra cada afirmación utilizando información pública extraída de libros, foros de internet y otras fuentes. El estudio concluyó que un 20% de los participantes redujeron su confianza en las creencias que tenían tras las interacciones con el chatbot.

¿Por qué es superior una inteligencia artificial a una persona a la hora de debatir con conspiracionistas?

Una de las tácticas habituales por los conspiracionistas al debatir con otros es abrumar a sus oponentes con una gran cantidad de argumentos a favor de su visión del mundo. Se trata de una estrategia de manipulación conocida como la “técnica del tanque de peces”. Básicamente consiste en inundar un discurso con una avalancha de ideas extravagantes con tal de que quienes intenten refutarlas se vean desbordados y solo se enfoquen en las más absurdas, comúnmente obviando las más peligrosas y dañinas.

Elon Musk and the famous AI chatbot ChatGPT
Ampliar
Las inteligencias artificiales pueden ser muy útiles a la hora de acercar posturas en debates sobre materia sensible y presentar evidencias basadas en hechosDENIS BALIBOUSEREUTERS

No obstante, modelos de IA avanzados como GPT-4 Turbo poseen la capacidad para contraargumentar este enorme volumen de ideas estrafalarias, lo cual supera la capacidad argumentativa de muchos seres humanos y es un factor clave a la hora de hacer que los teóricos de la conspiración abandonen dichas ideas al presentarles gran cantidad de evidencias razonadas.

Otro de los motivos por los que se cree que la IA es más útil que una persona a la hora de debatir contra un teórico de la conspiración es el hecho de que entre dos personas, cuando se debate sobre una materia sensible, hay cierta propensión a que los ánimos se caldeen e incluso se llegue a insultar, con lo cual el objetivo del debate —acercar posturas— queda invalidado. También está presente el factor prejuicios; los conspiracionistas que se prestaron a participar en este experimento afirman que al comunicarse con una IA lo hicieron sin inhibirse, algo que no sería posible al hablar de las mismas cuestiones con amigos, familiares y conocidos debido a que podría cambiar la imagen que tenían de ellos.

Normas