El país que ha roto todos los récords de internet y es capaz de descargar el catálogo de Netflix al completo en un segundo
Japón supera todo un hito de las telecomunicaciones, transmitiendo 1,02 petabits de datos en un segundo a través de internet mediante cables de fibra óptica.


Desde hace varios años, Internet se ha convertido en una herramienta esencial para el día a día de muchas personas en las sociedades avanzadas. Lejos de ser un capricho o un hobby, miles de millones de personas lo utilizan a diario en todo el planeta de diferente forma. Japón, uno de los países a la vanguardia en el sector de las telecomunicaciones, ha dado un gran salto cualitativo en las comunicaciones a través de la red: en un experimento reciente, han logrado transmitir 1,02 petabits de datos en un segundo en una distancia de 1.808 kilómetros. Esto equivale aproximadamente a unas 10.000 películas en resolución 4K, o lo que es lo mismo: este experimento nipón permitiría transferir en un solo segundo el catálogo completo de Netflix entre dos dispositivos diferentes.
Japón rompe todos los récords de velocidad de transferencia de archivos a través de internet: más de un petabit por segundo
El Instituto Nacional de Información y Tecnologías de la Comunicación de Japón estableció en abril de 2025 un nuevo récord mundial en lo que a velocidad de transferencia de datos a través de internet respecta. En un experimento reciente, los responsables del estudio han llegado a la vertiginosa cifra de 1,02 petabits por segundo en una distancia de 1.808 kilómetros, que es aproximadamente la distancia que hay en línea recta entre Madrid y las Islas Canarias. Por poner esta desorbitada cifra en perspectiva, la velocidad del internet doméstico se suele medir en megabits por segundo, y un petabit son mil millones de megabits, por lo que la velocidad alcanzada es de 1.020.000.000 Mbps. Es decir, es más de mil millones de veces más rápido que una buena conexión de fibra de 1.000 Mbps.

Se estima que el catálogo completo de Netflix en España es de unos 7.500 títulos entre películas y series. Haciendo una estimación razonada, donde suponemos que una película o capítulo de una serie de dos horas de duración ocupa unos 12,5 GB en 4K HDR HEVC (entre 15 y 25 Mbps) sin compresión perceptible, tenemos como resultado que los 1,02 petabits por segundo permitirían transferir alrededor de 10.200 películas 4K, una cifra mayor que el catálogo de la plataforma en nuestro país, y con algo de margen sobrante para las series, que se componen de múltiples episodios. Por tanto, no es descabellado afirmar que esta velocidad de vértigo permitiría descargar en un segundo el catálogo de Netflix en su totalidad.
Y precisamente los tiros van un poco por aquí: no por Netflix en particular, sino por las necesidades crecientes por parte de los usuarios en lo que a tamaño de los archivos y velocidades de transferencia respecta. El propósito del experimento ha sido buscar nuevas soluciones para crear redes de telecomunicaciones de alta velocidad que puedan satisfacer la demanda que habrá en el futuro. Para este estudio concreto, se ha utilizado una solución compatible con la infraestructura ya presente: un cable de fibra óptica de 19 núcleos con un diámetro de 0,125 mm. Este tipo de cable permite usar 19 “caminos” diferentes para transferir la información en el mismo espacio físico que ocupan los cables de fibra óptica de un solo núcleo, por lo que se trata también de un nuevo diseño más eficiente y compacto.

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Aunque en 2023 ya se habían alcanzado velocidades superiores a 1,7 petabits por segundo, el experimento de abril de 2025 se considera un récord más relevante al lograr una velocidad de 1,02 Pb/s mantenida durante 1.808 km. Es esta combinación de rapidez y alcance lo que define el producto capacidad-distancia, que en esta ocasión alcanzó 1,86 exabit·km/s, marcando un nuevo récord mundial. En otras palabras: este estudio refleja no solo cómo de rápido puede transmitirse la información, sino también cuál es el límite práctico, en kilómetros, que tiene este tipo de red sin que se degrade o atenúe la señal o que incluso haya pérdida de paquetes.
En definitiva, mediante investigaciones de esta índole, Japón continúa consolidándose como una de las naciones más tecnológicamente avanzadas de nuestro planeta. La velocidad de transferencia de archivos tan elevada que han logrado con su experimento no solo abre nuevas posibilidades en el terreno del ocio electrónico como cine, series de televisión a la carta y videojuegos, sino que también puede ser un pilar fundamental dentro de campos como la propia investigación científica o los entornos empresariales, donde sea imprescindible contar con buenas velocidades de red para transferir grandes volúmenes de datos en el menor tiempo posible.
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