Cuidado si haces esto con tu televisión: usarlo mal podría terminar dañando el dispositivo o perdiendo información

En los últimos años, los televisores inteligentes han incorporado cada vez más funciones y entre ellas destaca la presencia de puertos USB. Gracias a ellos, podemos reproducir películas desde un pendrive, actualizar el software o alimentar pequeños accesorios. Sin embargo, muchos usuarios cometen el error de tratar este conector como si fuera un enchufe universal. Y ahí comienza el problema.

El puerto USB de tu Smart TV no está diseñado para cargar todo tipo de dispositivos ni para alimentar gadgets de gran consumo energético. Usarlo mal puede acarrear fallos en el sistema, pérdida de datos e incluso averías costosas tanto en el televisor como en los equipos conectados.

Lo que nunca deberías conectar

1. Memorias USB desconocidas. Conectar un pendrive de origen dudoso es un riesgo. Aunque un televisor no sea tan vulnerable como un ordenador, una unidad infectada puede ralentizar el sistema, bloquearlo o comprometer tu red doméstica.
2. Ventiladores o luces LED. Estos accesorios decorativos suelen demandar más energía de la que el televisor puede ofrecer. A corto plazo funcionan, pero a largo dañan la placa y el propio puerto.
3. Consolas retro. Las antiguas consolas de videojuegos requieren más corriente de la que el USB del televisor suministra. El resultado puede ser un fallo de arranque o, en el peor de los casos, daños internos en el televisor.
4. Smartphones y tabletas. Aunque parezca práctico cargarlos desde el televisor, lo cierto es que el puerto no está preparado para ello. La carga es lenta, intermitente y desgasta tanto el dispositivo como el televisor.
5. Discos duros externos de gran capacidad. Estos equipos necesitan más energía que la disponible. Usarlos puede provocar desconexiones repentinas, errores de lectura y un desgaste prematuro del disco.
6. Adaptadores HDMI de baja calidad. Algunos conversores baratos combinan señal de vídeo con alimentación por USB. No solo consumen más energía de la que deben, sino que generan señales inestables, cortes de audio y parpadeos en la pantalla.
7. Hubs o regletas USB. Multiplicar un puerto parece útil, pero forzar la salida eléctrica acaba en sobrecalentamientos y, en muchos casos, en la inutilización definitiva del puerto.
8. Cualquier dispositivo durante una tormenta eléctrica. Las subidas de tensión son un enemigo común de los electrónicos. Mantener periféricos conectados durante una tormenta incrementa el riesgo de daños irreversibles en tu Smart TV.

Para qué sí sirve

No todo son limitaciones. El puerto USB de tu televisor resulta muy útil dentro de su propósito original:

• Reproducir películas, fotos o música desde una memoria.
• Actualizar el software y el firmware.
• Alimentar pequeños accesorios de bajo consumo, como receptores de señal o dongles (como Chromecast o Amazon Fire TV Stick) diseñados para ello.

En definitiva, el secreto está en usarlo de manera consciente. El puerto USB del televisor no sustituye a un enchufe: es una herramienta práctica para tareas específicas. Si lo empleas bien, ganarás comodidad sin comprometer la vida útil de tu Smart TV.

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