Naturaleza
Así es el volcán que escupe lava azul en Indonesia
La seña de identidad que hace único al Kawah Ijen solo es visible durante la noche.
Cuando alguien habla de fuego, no es muy frecuente que una persona lo asocie al color azul. Eso es porque, probablemente, no sean muchos los que han tenido la oportunidad de ver en directo el volcán Kawah Ijen de Java, Indonesia. El país asiático cuenta con casi 150 volcanes activos, pero ninguno es tan especial como este. ¿El motivo? Nada más y nada menos que el hecho de que escupa lava azul.
En realidad, aunque el ojo humano lo ve claramente de color azul, dicha tonalidad es fruto de los gases sulfúricos que alberga, los cuales hacen combustión al entrar en contacto con el aire a una temperatura que a menudo supera los 360 grados centígrados (su punto de ignición). Hay ocasiones en las que la temperatura incluso sobre pasa los 600 grados centígrados.
En otras palabras, la lava que desciende por la ladera del Kawah Ijen es la misma —y del mismo color— que la de cualquier otro volcán, pero la reacción química que se produce entre el azufre y el oxígeno es la responsable de que se vea completamente azul. Eso sí, solo luce así durante la noche, ya que a plena luz del día sería idéntica a cualquiera otra fuente de lava.
En el volcán Kawah Iren trabajan centenares de mineros que se dedican a extraer bloques de azufre. Una tarea especialmente peligrosa, ya que las condiciones son extremas y el trabajo de los mineros pasa por ascender más de 200 metros cargados de azufre en cestas de bambú.
El agua del Lago Kawah Ijen también es especial
Si la lava se ve azul durante la noche, el agua del volcán Kawah Ijen también es muy especial, ya que muestra un color azul turquesa muy llamativo, similar al de algunos helados y productos de bollería. Esta apariencia se debe a que el agua también contiene elevadas cantidades tanto de ácido sulfúrico como de ácido clorhídrico. Por supuesto, este agua es muy tóxica y potencialmente mortal.