Análisis del teclado Vanguard 96, digno sucesor del K70 y lo mejor en calidad-precio que hemos probado

El tema de los teclados es un mundo. Algunos usuarios los quieren silenciosos, otros de membrana, otros compactos… Pero la mayoría estamos acostumbrados a periféricos baratos de no más de 20€ en la típica oficina media. Por eso cuando llegamos a casa queremos lo mejor y el Vanguard 96 es justo lo que necesitas. Corsair Gaming nos trae el sucesor espiritual del famoso K70 que promete lo mejor del mundo de los teclados de gama alta en un revolucionario 96%. Tenemos mucho que hablar de él, pero las sensaciones son extremadamente positivas, así que vamos al lío.

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No sabes que lo necesitas hasta que lo tienes

Empezaremos con lo más básico. El embalaje y cómo te encuentras el teclado al abrir la caja es una delicia y en cuanto enchufas el Vanguard 96 de Corsair Gaming a vuestro ordenador ya estará en funcionamiento. Simple. No hay que configurar nada y al segundo estáis disfrutando del tacto y sonido mecánico con el que nos deleita. Notas la calidad de su material gracias al interruptor mecánico CORSAIR MLX. Este switch es más silencioso que la mayoría que hemos probado gracias a cuatro capas amortiguadoras, lo cuál, para nosotros, es un punto extremadamente positivo. Además tiene compatibilidad con otros switch de 3 y 5 pines así como la posibilidad de cambiarlos en caliente, es decir, sin necesidad de soldar, así que tenéis teclado para muchos años. Quizás echamos en falta el efecto hall que sí tiene su versión Pro, pero aún así aseguran una durabilidad de más de 80 millones de pulsaciones.

Estructuralmente hablando resaltábamos ese poco ruido, pero a cambio hemos perdido algo de robustez. En la parte inferior tenemos las típicas pestañas de goma para alzar el teclado unos grados y una guía para sacar el cable USB (incluido) por los laterales o la parte superior del teclado. También tenemos una almohadilla magnética incluida con el Vanguard 96 que se adhiere con firmeza y protege con eficacia las muñecas. Sin embargo, lo que menos nos ha gustado es la posición de la pantalla LCD que lleva incorporada. Queda poco visible cuando estamos frente al ordenador con teclado en mano. Por lo demás consigue su objetivo de funcionar como un 100% prescindiendo del acceso directo a teclas como avanzar o retroceder página (disponibles en el teclado numérico).

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Un revolucionario 96% que funciona al 100%

A nivel de composición nos gusta esta mezcla entre compacto y completo que tiene este teclado. La distribución del 96% que tiene este Vanguard 96 de Corsair Gaming es un tanto extraña de primeras. Tal vez hemos tardado un par de horas en acostumbrarnos a la nueva posición de ciertas teclas, pero a nivel de escritura no requiere más de 10 minutos en acostumbrarte a su tamaño. De hecho todo este texto lo estamos escribiendo con él y la tasa de error será de un 2% principalmente por equivocaciones al apretar el F1 en vez del 1 o no dar con la tecla Enter en ciertos párrafos.

De hecho este es un párrafo que vamos a dejar tal cual estamos escribiendo para que veáis que la capacidad de escritura de este teclado se adapta rápodiamente (¡error!) a los que estamos acostumbrados a teclados del 100% (aquí hemos vuelto a pulsar el F1 accidentalmente). Será cuestión de acostumbrarse pero de momento os afirmamos que en menos de una semana con él la experiencia está siendo muy gratificante con errores apenas reseñables en cuanto a la escritura se refiere.

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Para los más exigentes el Vanguard 96 tiene entradas ultrasensibles de hasta 8000 Hz que dan una respuesta inmediata. No podemos echarle la culpa al teclado de absolutamente nada cuando estemos jugando porque es altamente personalizable. Podemos ajustar prácticamente cada parámetro a nuestro gusto. Tiene diferentes perfiles que podemos seleccionar dependiendo de si estamos jugando, escribiendo o editando un vídeo gracias al dial que incorpora junto a su pantalla LCD que indica qué perfil estamos usando en cada momento.

Junto a esta pantalla encontramos el dial que por defecto podemos subir y bajar el volumen. Sin embargo, al apretar la tecla FN (función) en el Vanguard 96, podemos cambiar qué función darle al dial rápidamente, el perfil que queremos usar así como personalizar el teclado sin necesidad de instalar ningún programa. Esto último sí, es más tedioso hacerlo en el teclado, así que Corsair Gaming facilita este proceso con Corsair Web Hub, un gran avance en términos de personalización. Ya no necesitamos el iCUE. Lo podemos hacer absolutamente todo desde el navegador. Fantástico.

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Corsair Web Hub es justo lo que todos necesitábamos

Dentro del Corsair Web Hub cambiamos y personalizamos la animación que hacen los colores en el teclado (acuarela es nuestro favorito), modificamos las teclas, aumentamos o disminuimos el tiempo de respuesta o activamos el Flash Tap, una funcionalidad para ser aún más precisos con las órdenes que damos al teclado. Esta funcionalidad del Vanguard 96 consiste en elegir dos teclas y decidir si queremos que se anulen cuando pulsemos la contraria, que se activen ambas o que priorice la última (o la primera) que apretamos para evitar pulsaciones accidentales. En este vídeo lo entenderéis mejor.

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También podemos grabar una secuencia de pulsaciones para generar una macro y luego asignarse a una de las 6 teclas laterales personalizables. Esto para los videojuegos como World of Warcraft o League of Legends es una herramienta extremadamente útil. También los switch del Vanguard 96 pueden diferenciar entre la media pulsación y la pulsación completa. De esta manera podemos asignar distintas funciones a las teclas para variar dependiendo de lo fuerte que apretemos. Como os decimos, todo es personalizable y creemos que esto es una función dedicada a los profesionales del gaming, pero quién quiera coquetear con ella está ante una herramienta muy útil. La hemos probado en títulos como Battlefield 4 donde media pulsación en la W es caminar y completa es correr y os confirmamos que funciona con creces una vez te acostumbras a ella.

Por último podemos personalizar el dial, tanto las funciones que le asignamos (podemos añadir las que queramos aparte de las que vienen por defecto) y la pantalla. En nuestro caso, que también tenemos que editar video, poder usar el dial para desplazarnos con precisión por la timeline nos es realmente útil. En esta pequeña pantalla podemos cambiar el fondo para personalizar a nuestro gusto el Vanguard 96 para hacerlo más único aún. Podemos poner el logo de Meristation, una imagen de nuestro juego favorito o el gif de un gol inolvidable.

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Más que un teclado

Gracias a la funcionalidad directa con Stream Deck Virtual podemos asignar una tecla específica para poder abrirlo directamente sin necesidad de pasar por la aplicación. Nosotros por ejemplo hemos puesto los programas de edición, un acceso directo a la web de referencia de videojuegos (esta nuestra santa casa) y a Path of Exile 2 porque no hay nada más sano que unas partiditas antes de irte a dormir. Además que el Vanguard 96 de Corsair Gaming también es compatible con PS5, Xbox y Switch 2. Obviamente este menú es ampliable y tiene mil funcionalidades más como bajar o subir volumen, abrir una carpeta en concreto o crear una serie de comandos. Y sí, es compatible con todo tipo de teclados, solo que el Vanguard 96 tiene una tecla específica destinada a ello.

A nivel de utilidad y limpieza el Vanguard 96 de Corsair Gaming es bastante cómodo de mantener. Dentro del pack viene unas pinzas específicas con las que poder extraer tantos las teclas como los diferentes switch que tiene el teclado. La limpieza es rápida y la extracción de los switch es bastante delicada, pero es una alegría saber que dispondremos de la herramienta necesaria para llevar a cabo el mantenimiento anual para que no se acumule el polvo debajo de las teclas, algo que será bastante habitual dada la separación entre tecla y switch.

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Conclusiones finales

Os vamos a ser completamente sinceros cuando os decimos que el teclado mecánico Vanguard 96 en temas de calidad-precio es perfecto. La tecnología que lo compone, la distribución de teclas para conseguir ese 96% (y lo rápido que te adaptas a él), el material con el que está hecho, los extras que trae o la innovadora pantalla LCD que incorpora justifican que quién pague los 180€ no se arrepienta de su decisión. Si os gusta, que no os tiemble el pulso.

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