Company of Heroes 3
- PlataformaPS5XBSPC8.4
- GéneroEstrategia
- DesarrolladorRelic Entertainment
- Lanzamiento27/02/2023 (PC)30/05/2023 (PS5, XBS)
- TextoEspañol
- VocesInglés
- EditorSEGA
Análisis
Company of Heroes 3: espectacular, entretenido y bonito de ver
La nueva entrega de la saga bélica de Relic se centra en la campaña alemana del Norte de África durante la Segunda Guerra Mundial y la aliada en el frente de Italia.
La Segunda Guerra Mundial es, probablemente, el conflicto bélico más interesante de la historia, la enorme proporción y variedad de ejércitos enfrentados, los diferentes escenarios y el equilibrio entre las diferentes armas proporcionan un escenario ideal para desarrollar juegos que potencien y aprovechen determinados aspectos de la misma.
En el caso de Company of Heroes 3, los jugadores se van a enfrentar con un RTS de una profundidad estratégica aceptable, con algunas pequeñas lagunas, con ciertas licencias históricas y con dos campañas de desarrollo diferente que van a ofrecer muchas horas de entretenimiento. Los veteranos de la saga se van a encontrar luchando en terreno conocido, pues la mayoría de las mecánicas son las mismas del primer y segundo título. Para los novatos que lleguen al frente, la curva de aprendizaje será sencilla pues la IA no va a ofrecer mucha resistencia en el nivel normal.
La campaña de Italia
Es la gran novedad de la entrega. Al igual que en la saga Total War de Assembly, el usuario se mueve en esta en un doble plano. El primero es un gigantesco mapa de campaña en la que se disponen los distintos ejércitos, las carreteras, las ciudades, los puertos, los aeropuertos y distintas zonas de terreno. En cada turno habrá que tomar distintas decisiones estratégicas: mover y reclutar ejércitos, tomar objetivos y reforzar unidades. Es importante que el despliegue de las tropas sea el correcto para poder cumplir en tiempo las misiones que se van proponiendo a medida que se avanza en la campaña.
Aunque la idea es buena, ya que es el usuario quien decide con sus órdenes el rumbo de la guerra, hay dos factores que inciden negativamente en ella. El primero es la escasa iniciativa de los ejércitos rivales, que son incapaces de lanzar un contraataque a pesar de que se descuide un flanco, limitándose solo a movimientos defensivos tras sus líneas. La segunda es que el papel de la aviación y de la marina se reduce a testimonial. Probablemente en futuros DLC ambientados en la Operación Overlord o en el teatro del Pacífico sí cobren un protagonismo que ahora mismo se les ha negado.
Desde aquí también se administran los distintos ejércitos dotándolos de mejoras que resultan decisivas, quizá demasiado, en las batallas que habrán de librarse después. A cada ejército, dependiendo de sus características, que también varían en función de la nacionalidad, se le pueden dotar de regimientos que potencian determinadas áreas: tanques de apoyo, artillería, soporte de aviación, tropas especiales, transportes… A medida que estas se van incorporando y que se mejora la experiencia de las tropas los combates se vuelven más cómodos. El verdadero reto del juego está en las primeras horas: con unidades bisoñas y sin ayudas adicionales.
Misiones principales y refriegas
Son el corazón del juego, a medida que se avanza en el mapa irán descubriéndose objetivos primarios que habrá que solventar sí o sí y otros secundarios. Estos segundos incluyen toma de aeropuertos, puertos y ciudades, así como ciertas misiones de rescate o apoyo a unidades que se encuentran en apuros. En el caso de las misiones secundarias se puede optar también por una resolución automática, que suele elevar las pérdidas por parte del bando del jugador. En el caso de las refriegas y las principales esta opción no está presente.
Mediante las refriegas, que en su mayoría son tomas de pueblos y ciudades, el sistema de combate prima la rapidez de movimientos. Al principio de la batalla hay que tomar cuantos más objetivos se pueda ya que proporcionan los puntos necesarios para conseguir poner más unidades en el mapa. Luego basta con consolidar las posiciones y fortificarse para que los alemanes gasten sus puntos de refuerzo. En el 90% de los casos esta táctica simple funciona.
Los escenarios son variados, aunque después de 20 horas de partida comienzan a repetirse. Las victorias aquí proporcionan experiencia a las tropas y recursos que pueden ser empleados en el mapa general.
Las misiones principales están muy cuidadas, con escenarios muy amplios que permiten emplear diferentes tácticas de combate, aunque la combinación de artillería y carros de combate suele ser demoledora. Algunas de ellas están inspiradas en conocidas películas bélicas y, aunque se han tomado algunas licencias con el armamento presente, el grado de realismo es bastante elevado.
Combates
El sistema de partida es el clásico de un RTS por un lado hay una base (en la mayoría de los mapas) donde se generan unidades de capacidad destructiva creciente a medida que se desbloquean nuevas instalaciones y por otro se dispone de un número limitado de unidades que hay que mover con tiento por el escenario, aprovechando todo tipo de ventajas tácticas: edificios, trincheras o zonas elevadas. Una de los grande aciertos de CoH 3 es que casi todos los elementos presentes en el escenario son susceptibles de ser destruidos, incluidas las casas, que pueden pasar de bastiones defensivos a trampas mortales si la artillería o los tanques enemigos se ceban con ellos.
Las unidades de infantería son muy variadas y están personalizadas para cada uno de los ejércitos, lo mismo ocurre para los vehículos, los tanques y la artillería. En las misiones principales la cantidad de unidades a manejar es muy amplia y como la acción se desarrolla de manera simultánea en zonas muy distantes es necesario el uso de la “pausa táctica” que permite para la refriega en cualquier momento y dar órdenes a cada uno de los pelotones o vehículos.
Las situaciones que presenta el juego son muy diversas y requieren del uso adecuado de una unidad en un momento determinado, el problema es que hay algunas de ellas, como los comandos o los francotiradores, que tienen tal potencial que desequilibran la partida y eliminan parte del desafío que presentan los escenarios más complejos. La IA enemiga tampoco contribuye a crear una atmósfera de riesgo y el jugador tiene la sensación de que la paciencia más que la inteligencia es la clave de la victoria.
Norte de África
Aquí el jugador toma el mando del Afrika Korps de Rommel en una campaña clásica del CoH en la que habrá que ir superando uno detrás de otro los ocho escenarios de los que consta. Está ambientada en Libia y tiene armamento propio respecto a la campaña más amplia. Las misiones son muy divertidas ya que presentan situaciones muy diversas y los mapas están muy bien equilibrados. Se pone en valor la movilidad de las fuerzas de Rommel en clara inferioridad numérica respecto a los ejércitos aliados: encontrar combustible, conservar tropas y dar golpes de mano son los ejes sobre los que se mueve la campaña.
La pena es que el número de blindados es muy escaso e impide desarrollar algunas de las maniobras que el general alemán empleó durante la guerra en el desierto, tampoco hay zonas vacías que permitan movimientos de flanqueo tras las líneas enemigas.
Gráficos
Para ser un juego de estrategia el apartado gráfico de CoH 3 es más que sobresaliente, los mapas están llenos de detalles: árboles, rocas, alambradas, bunkers, trincheras, edificios de diversa índole, muros, vallas, ríos… Todos ellos son susceptibles de ser empleados de manera estratégica y la gran mayoría pueden ser destruidos, bien por la artillería, bien por unidades especializadas en esos menesteres. La recreación de unidades y vehículos está hecha con esmero y refleja con bastante fidelidad las que se midieron en los combates reales, además su personalización las hace fácilmente distinguibles en pleno campo de batalla. Detalles como el daño en el blindaje de los tanques o en los edificios contribuyen a aumentar la sensación de verosimilitud que transmite todo el juego.
Los menús son accesibles y ofrecen mucha información en pantalla sin ocupar apenas espacio, de todas formas, la pausa táctica permite entrar en detalle sobre cualquier factor sin penalizar el resultado de la batalla.
Para analizar CoH 3 hemos utilizado un Legion 5i Pro de 7ª generación (Intel Core i7-12700H de Alder Lake con 20MB de caché, con una tarjeta gráfica Nvidia RTX 3070 Laptop (140W y dos módulos de memoria DDR5 de 8GB a 4800 MHz). No hemos sufrido ningún tipo de ralentización ni de bug.
Multijugador
CoH 3 ofrece diversos modos tanto en cooperativo como en PvP, además en aquellas partidas donde participen varios contendientes y el número de humanos no sea el suficiente se pueden completar con bots de IA regulable. Hay 14 mapas disponibles que incluyen todo tipo de terreno, algunos favorecen el uso de la infantería (zonas urbanas) mientras que otros están pensados para los movimientos rápidos de las unidades mecanizadas (campo abierto). Las refriegas permiten partidas rápidas y con un nivel de entretenimiento notable.
Conclusión
Company of Heroes 3 es contuinista a cuanto mecánicas de juego en las misiones, pero presenta una nueva campaña dinámica que proporciona un enorme salto de calidad a la saga. La recreación de unidades y vehículos está hecha con gran detalle y fidelidad histórica, algo que se traslada también a los escenarios que están llenos de objetos y accidentes geográficos que favorecen el aprovechamiento táctico de los mismos. La IA no es todo lo beligerante que debiera y se favorece la prudencia frente a la movilidad y el riesgo. Como en muchos RTS basta producir una determinada unidad que esté balanceada muy por encima de su nivel para decidir situaciones que de otra manera supondrían todo un desafío.
Lo mejor
- La campaña dinámica en Italia
- Mapas variados y desafiantes
- La recreación de unidades
- Las gran variedad de opciones tácticas para completar las misiones
- Que casi todos los objetos del escenario puedan ser destruidos
Lo peor
- El poco uso de la aviación y la marina
- Una IA un tanto timorata
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.