El mensaje de Yoko Taro a quienes se plantean el suicidio
La otra realidad que no se ve
La industria del videojuego no es un camino fácil paranadie. Desarrolladores de renombre, a pesar de su alto estatus dentro delmundillo, es a costa de muchas horas de sacrificioque afectan a sus vidas personales y a las de sus allegados. Eternas jornadasde trabajo; salarios que no se corresponden con ese esfuerzo; vacaciones quenunca llegan; o tiempos de entrega que ahogan. Incluso en sus vidas personales,después de tocar el éxito con las manos, algo falla. No es suficiente. ¿Por qué?
Para YokoTaro, excéntrico desarrollador japonés y recientemente consolidado dentrode los perfiles más ilustres del archipiélago nipón, esta historia es tambiéncercana. Ese padecimiento le ha llevado a la empatía, a querer hacer un gestode transparencia para con sus fans y transmitirle lo que siente y ha sentidodurante todo este tiempo.
Que ahora NieR:Automata sea unauténtico éxito a pesar de todo es motivode reflexión. Y es eso de lo que os venimos a hablar hoy, de latranscripción de laspalabras que ha emitido a su comunidad de seguidores que, como otrostantos, se plantearon el suicidio almenos una vez en sus vidas.
Un problema social; la otra realidad
“De un tiempo a esta parte, de vez en cuando recibía MDs enTwitter del estilo “estaba con depresión y con ganas de morir, pero pienso queme he salvado después de jugar a tus videojuegos”; o “siempre me he sentidoalgo extraño, sin encajar en la sociedad, pero ahora me entiendo a mí mismo””,comienza diciendo alegando que nunca ha sido su intención la de salvar la vidade la gente a través de sus obras. Se trata de una coincidencia que, porsupuesto, le hace feliz al saber que ha ayudado en cierto modo a la gente.
“Cuando me quedo mirando el timeline de Twitter cada noche,es habitual que vea en streamings mensajes de gente diciendo cosas como “quieromorirme” o “vivir es simplemente sufrimiento”. No sé si la gente que escribeesas cosas simplemente está perdiendo el tiempo o de verdad está sufriendo,pero tengo la sensación de que entre todos mis fans hay un alto porcentaje de personascon la autoestima muy baja”.
Para Taro esto essorprendente, pero no tanto. Él mismo reconoce sentir en ocasiones tener suautoestima por los suelos, que su vida tiene poco sentido; con la conclusión deque en ocasiones cuando alguien exterioriza ese sentir termina despertando elmismo estímulo en quienes están a su alrededor. Es decir, que cuando uno seabre lo hacen todos los demás y se destapa una triste realidad.
Su experiencia como joven aspirante a Namco
Cuando comenzó a sembrar sus primeras semillas comodesarrollador, Taro accedió a un programa de preparación para candidatos aocupar un puesto en Namco. Llegar a primera división. Parte de ese programaimplicaba estar hospedados en una suerte de campamento con instalaciones, lo cualimplica también convivencia con otros de su misma edad aunque con distintasmaneras de ver las cosas y de proceder. Ley de vida. Al principio todo era fantástico, era divertido: aprendía, crecía,maduraba, conoció a chicas.
Con el paso de los meses esas sonrisas de oreja a oreja empezaron a convertirse en rostros apagados,posturas alicaídas. Tristeza. “No sé para qué estoy viviendo”. “Estoy sufriendo”.“Quiero morir”. Literal.
“No sabía qué decir”, confiesa Taro. Tan solo tenían 22 años y se conocían de poco tiempo, así que lacomplicidad era mínima, lo que dificultaba una conversación más fluida entreellos para ayudarse en la medida de lo posible. Lo único que se le ocurría aTaro, algo más determinado que los demás según él mismo reconoce, eran cosasdel estilo “¡Tú puedes hacerlo!” o “¡No te rindas!”. Pero también se dio cuentaque por muy manida frase que fuera, lo mejor era decirles que se pusiesen enmanos de un profesional.
Después del periodo de preparación
Tres meses pasan muy rápido; más aún para ellos, en periodosde aprendizaje diario y desarrollo de habilidades. El trimestre de la preparatoriaen Namco terminó con una mala noticia: alguien se había suicidado. Todas esas palabras que se fundían enel silencio de la noche, aparentemente olvidadas en el amanecer, se tradujeron en la pérdida de una vida quedejó a todos sin palabras. Dolor, pena y compasión. Los compañeros dellugar estaban viviendo lo mismo, pero por algún motivo una persona no supohacer frente a sus problemas internos y decidió dejar de sufrir de la forma másradical e irremediable.
“No estábamos tan lejos de terminar así”, reconoce Taro. “Hicelo que pude para ayudar, así que no me sentí culpable después de todo”. Valora,eso sí, la libertad de acción de las personas para elegir el devenir de susvidas. Sea cual sea, aunque no está de acuerdo con aqullos que piensan que “seríamejor estar muerto”.
Lo que vino entonces: etapa adulta e Internet
Todavía hoy recuerdaesos días. Todavía hoy piensa en lo ocurrido y en cómo eso afectó a suspensamientos más frío. Más complicado todavía es ayudar a personas que sonsimplemente un pequeño icono delante de su pantalla. Cuando ve tanta gente enTwitter diciendo lo mismo que sus compañeros de la preparatoria, el sentimientoes todavía más complicado porque no está ni mucho menos cerca de ellos.
Ha sido tal el volumen de mensajes similares, tantos los tweets reflejando intentos desuicidio, que “mi corazón comienza a sentir dolor”. Se plantea por tanto sies mejor dejarles solos; si es mejor no intervenir. Al menos, dice, el hecho deque le sigan es que conocen un poco sobre él, así que siente la responsabilidadde transmitir un mensaje consciente y responsable.
Cansado de recomendar la visita a un perfil profesional quepueda salvarles, actualmente prefiere decir simplemente “me sentiría triste sifallecieses”.
“Quizá esas eran las palabras que algunos necesitabanaquellas noches de hace veinte años”, piensa. “No puedo recordar su nombre, porlo que hay cierto grado de hipocresía en esta reflexión. Y ahora, desde que tengo más de 100.000 seguidores en Twitter, esperoque esto pueda al menos ser de ayuda para una sola persona; que esta vez no seademasiado tarde”.
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NieR: Automata, desarrollado por Platinum Games y distribuido por Square Enix para PlayStation 4 y PC, es la secuela de Nier, un RPG de acción de la pasada generación ambientado en un mundo fantástico lleno de misterios.