Ser perseguidos en plena calle por la policía como auténticos forajidos mientras llevamos unos cascos con música hip-hop y funky a todo trapo, escuchar la doctrina callejera de la emisora pirata Jet Set, crear auténticas obras de arte en los muros de tiendas, bares ó callejones, echar unos bailes en el suelo haciendo nuestro cuerpo rotar 360º...