Alemania necesita ganar, Croacia perder, y se enfrentan esta noche

El balonmano intenta ser lógico y para estar en los Juegos Olímpicos pretende que lleguen los mejores a la vez que cuenta con representación de todos los continentes, aunque el potencia auténtico esté en Europa. Luego llegan las matemáticas, y lo complican todo. Las casas de apuestas son las primeras que tiran de los números, y aunque hay alguna de ellas que hoy aún paga 1,1 al euro a que Alemania derrota a Croacia, otras directamente han retirado este encuentro de las posibles apuestas: los alemanes se juegan entrar en las semifinales, y los croatas tan sólo acabar quintos de grupo, pero de cara al futuro es mejor ser ¡sexto que quinto! de entrada.

Aunque los resultados de la tarde en Colonia podrían ofrecer un Alemania-Croacia sin interés real porque Alemania ya estuviese en las semifinales (si Islandia gana a Austria y Francia deja fuera a Hungría) y Croacia feliz e intentando despedirse a los grande ante un rival que estaría preparando la semifinal ante Dinamarca. Pero antes de que se juegue el primer choque, Alemania necesita ganar para ser segunda, y Croacia necesita perder para que los alemanes estén entre los cuatro primeros, y así correría el orden del Mundial y con el noveno puesto, y al margen de lo que haga Egipto en África, regresar a casa con el billetes a uno de los torneos clasificatorios para París.

Es decir, pase lo que pase, a Croacia le interesa que Austria no alcance las semifinales, porque podría optar a la plaza olímpica por el Europeo, y eso comprometería el interés de los croatas. Que se metiese Hungría (octava en el Mundial), por ejemplo, para estar entre los cuatro primeros con Dinamarca, Francia y Suecia, tampoco les incomodaría a Croacia para viajar al preolímpico.