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DEPORTES DE INVIERNO

El snowboard tira del deporte de nieve en España con sus éxitos

La Copa del Mundo de Lucas Eguibar en cross y el subcampeonato mundial de Castellet en halfpipe, logros de un deporte con 84 federados en España.

Actualizado a
Lucas Eguibar, con su Globo de Cristal.
DANI SANCHEZDIARIO AS

Sólo hay 84 deportistas con licencia de snowboard en España. Representan el 2,7% de los 3.346 federados que tiene la Federación Española de Deportes de Invierno (RFEDI), donde los de esquí alpino representan más del 75%. Pero son los riders de la tabla los que tiran de los deportes de nieve. En este 2015, Queralt Castellet es subcampeona del mundo de halfpipe y Lucas Eguibar, ganador de la Copa del Mundo de snowboard cross, ambas modalidades olímpicas. “No podemos dejar de lado las otras disciplinas y sabemos que el tirón lo tiene el alpino, pero nuestro compromiso era que estas modalidades emergentes recibieran el apoyo que merecen”, apunta May Peus, presidente de la Federación desde hace seis meses.

En el caso del donostiarra Eguibar, reciente ganador con sólo 21 años de un Globo de Cristal histórico para esta federación, el apoyo fundamental llega del técnico Israel Planas y del skiman (una figura clave) Luca Trionte. “El skiman es como el mecánico en Fórmula 1. Hay 40 competidores en un segundo, su labor es casi el 50% del resultado”, relata Planas. Ambos viajan con el equipo que completan los riders Regino Hernández y Laro Herrero.

Los españoles se enfrentan a selecciones con mayores recursos. “En nuestro país no hay pista fija de snow cross, nos concentramos en los Alpes”, asegura Planas. “También es una forma de que entren en contacto con otros deportistas de élite. Sierra Nevada y La Molina son las instalaciones referencia del snow en España”, matiza Peus. De hecho, la estación andaluza será la sede del Mundial 2017 de la modalidad. Y La Molina cerró la Copa del Mundo este año.

Figuras como Eguibar aún no pueden vivir de esto si no fuera por las becas. La principal aportación de los patrocinadores es en material. El equipamiento para competir en la élite, incluida tabla a medida, puede costar 2.000 euros. Pero el interés es cada vez mayor, como acredita la incorporación de Oakley como marca que viste a la Selección.

Importante para una Federación que, con dos millones de presupuesto, cuenta con Audi y Powerade como patrocinadores principales y consigue generar el 35% en recursos propios. “Y para mayo tenemos novedades”, revela Peus. Crecimiento que tendría como gran premio una medalla olímpica en Pyeongchang 2018. Por ahora, el snowboard es su mejor opción.