Así es Francia, rival de España por el oro en fútbol masculino
La selección anfitriona es una de las favoritas desde el inicio del torneo. Henry ha tenido muchos problemas para hacer una convocatoria. Olise es la gran estrella.
Francia será el último obstáculo para España en la gran final del torneo masculino de fútbol de París 2024. A pesar de lo que ha sufrido para llegar hasta aquí, en unos intensos cuartos de final ante Argentina y una agónica remontada frente a Egipto, era una de las selecciones favoritas para luchar por las medallas desde el inicio del torneo. Los anfitriones no han decepcionado.
Precisamente, el hecho de que se juegue en su casa ha provocado que Thierry Henry tuviese más poder de convencimiento para muchos jugadores, aunque no ha conseguido a todos los que habría querido. Por edad (nacidos a partir del 1 de enero de 2001), podrían haber ido nombres de la talla de Camavinga, Saliba, Zaïre-Emery, Barcola, Leny Yoro, Khéphren Thuram... e incluso Mbappé, sobre el que se tanteó la posibilidad de que fuese uno de los tres jugadores mayores de 23 años permitidos.
No obstante, Francia ha presentado un equipo más que competitivo para este torneo. La gran figura de la plantilla de Henry es Michael Olise. El mediapunta francés (nacido en Londres), fichó a principios de julio por el Bayern de Múnich. El club alemán pagó 54 millones de euros al Crystal Palace por él, buena prueba del potencial de un chico que llevaba años explotando, pero que en la reciente temporada 2023-24 ha sido una de las estrellas de la Premier a pesar de las lesiones. En este torneo olímpico lleva seis asistencias y también de sus botas salió el centro que precedió el 2-1 definitivo ante Egipto. Ya en la segunda parte de la prórroga, sentenció con el 3-1. Un jugador dinámico, rapidísimo en sus arrancadas y con muchísima calidad en su zurda.
Parte de sus asistencias han sido a Mateta, su excompañero en el Crystal Palace y uno de los tres jugadores mayores de 23 años que se ha llevado Henry. Francia está en la final gracias a este corpulento delantero, que marcó el único tanto de los cuartos de final y los dos goles que sirvieron para remontar a Egipto en las semifinales. A él le acompaña Lacazette, otro de los veteranos y un jugador clave peleando en el área y estirando al equipo. El sevillista Badé es el tercer jugador que nació antes del 2001, aunque por edad (24 años) es prácticamente del grupo de sus compañeros.
Si bien es cierto que la pareja de centrales Lukeba-Badé es bastante temible, donde más talento individual tiene Henry es entre el centro del campo y la delantera. Más allá de los tres delanteros ya mencionados, los cuales se colocan en un 4-3-1-2 con Olise como mediapunta para generar situaciones favorables a sus dos puntas, hay otros jóvenes de calidad como Désiré Doué (deseado por el PSG) o Cherki (estrella en el Lyon) en el banquillo. También Akliouche o Millot son mediapuntas que pueden ser decisivos por sí mismos.
Un equipo con un físico espectacular, dos delanteros de mucha experiencia y una gran estrella como Olise que puede resolver el partido en una acción. Se apoyan en ellos ante los pocos recursos colectivos que tienen. En eso se parecen a la Absoluta. Henry tenía la difícil tarea de hacer congeniar a un equipo con varias novedades y, sobre todo, lidiar con la presión de unas altísimas expectativas por jugar en casa. Ya tienen aseguradas la medalla. Y ahora quieren negarle la de oro a España.
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