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GIRONA

Un mercado de invierno complejo

El Girona tiene todas las fichas ocupadas, hay cierto margen para fichar y cabe la posibilidad de que haya alguna venta importante

13/11/22 PARTIDO COPA DEL REY
PRIMERA RONDA 
QUINTANAR GIRONA 
MICHEL
Josema MorenoDiarioAS

No es ninguna novedad que Quique Cárcel, de hecho cualquier director deportivo, tenga que trabajar en estas fechas. Aún queda más de un mes para que se abra el mercado de fichajes de enero pero desde la planta noble de Montilivi ya se piensa en cómo retocar la plantilla de cara a la segunda parte del campeonato. No habrá ninguna revolución, ningún gran fichaje, pero siempre se pueden hacer retoques que mejoren las piezas que tiene Míchel a su disposición. Y en ello trabajan.

Este mercado, sin embargo, el director deportivo del Girona se encuentra con varios condicionantes. El primero, y evidente, es que la plantilla tiene todas las fichas cubiertas. Eso significa que para que llegue cualquier futbolista, a menos que tenga ficha del filial, tendrá que salir uno del primer equipo. Una situación que no está ni mucho menos descartada, pues en este tramo de competición ya se ha visto qué jugadores tienen más peso en la plantilla. Hombres como Samu Sáiz o Borja Garcia tienen un papel mucho más secundario que en otras temporadas y son, por ejemplo, dos de los que podrían salir. No significa ni mucho menos que tengan abierta la puerta de Montilivi, pero son el perfil de futbolista que el Girona podría estudiar dejar salir en enero.

También hay, sin embargo, otra opción que a priori es peor para los intereses del Girona: que un club grande venga a por uno de los futbolistas importantes. Cárcel no cerró la puerta a una venta importante, nunca lo ha hecho, pero evidentemente sería mucho más beneficioso para el Girona que esta ocurriera en verano, con la temporada concluida y mucho más tiempo para rehacer el equipo. En este apartado hay claramente dos nombres encima de la mesa: Arnau y Aleix Garcia. El primero es el gran activo del club y todos en Montilivi saben que, si sigue a este nivel, su futuro está lejos del Girona. Es evidente que el club catalán no está a la altura de los grandes equipos que le siguen de cerca y que su progresión apunta a convertirse en uno de los grandes laterales del panorama europeo. Hasta se ha hablado del interés del Barça. Su cláusula, de 20 millones, es tentadora para los grandes y supondría una inyección de dinero importantísima para el Girona. El caso de Aleix es parecido, pues pese a que tenga menor potencial a futuro está en un momento de juego y forma espléndido. Es su mejor temporada desde que está en la élite. El club no tiene ninguna necesidad de venderles, pero si llega una oferta en condiciones se estudiará.

Al margen de una posible pero improbable venta, el Girona tiene dinero en caja para reforzar el equipo. No para acometer una remodelación ni un gran fichaje, que no hace falta, pero si para traer alguna pieza que enriquezca la plantilla. Cárcel estudiará como siempre el mercado y está pendiente de cualquier oportunidad que pueda serle beneficiosa. No se esperan ni grandes ni muchas incorporaciones, pero sí algún “retoque”.