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BARCELONA

Presión para Ferran y Ansu

Malestar en el Barcelona por el inmovilismo de ambos jugadores a salir del club: no han aceptado ninguna de las propuestas recibidas.

Actualizado a
Ferran Torres y Ansu Fati, antes de un partido con el Barça.

El FC Barcelona necesita urgentemente empezar a cerrar las carpetas de salidas si quiere reforzarse con nuevos jugadores de cara a la próxima temporada. Por ahora, todos los intentos del club en este sentido han sido fallidos, hasta tal punto que, según reconocen a AS, se encuentran en una situación de bloqueo absoluto. No se puede concretar ninguna de las operaciones cerradas hasta que se empiece a soltar lastre en la plantilla.

De los jugadores descartados por los técnicos, sólo hay uno que se ha mostrado abierto a negociar una salida: el marfileño Franck Kessié. El centrocampista no ha puesto ningún impedimento y se ha mostrado comprensivo sobre las necesidades del club. Lo cierto es que su gran mercado en el Calcio facilita, y mucho, las posibilidades de encontrarle una salida atractiva. En este sentido, el Inter de Milán es uno de los clubes que más interés han mostrado por el blaugrana. En el Barcelona verían con muy buenos ojos la opción de un trueque con Marcelo Brozovic, jugador deseado por la secretaría técnica para ocupar la plaza dejada vacante por Sergio Busquets en el pivote defensivo.

Muy diferente están siendo los otros dos casos abiertos por el club. Y es que ni Ferran Torres ni Ansu Fati están dando ningún tipo de facilidades. El primero, con contrato hasta el 2027, está cerrado en banda a escuchar ninguna oferta. Ni tan siquiera el hecho de no asegurarle la continuidad está siendo suficiente argumento para que replantee su situación. Además, en su caso, existe el ‘handicap’ añadido que el club difícilmente amortizaría la operación -faltan todavía unos 60 millones-, por lo que su marcha sólo aligerará la masa salarial en parte, ya que acabaría computando como deuda en el balance de la temporada a medio plazo.

Con Fati sí que la operación sería redonda a todas luces, ya que los ingresos por su traspaso llegarían al club limpios de polvo y paja, además de adelgazar una cantidad muy relevante en la masa salarial. Sin embargo, el joven delantero se ha mostrado muy reacio a escuchar cualquier oferta, rechazando en su día una propuesta del Wolverhampton inglés.

En el club están muy decepcionados por la actitud de ambos jugadores que, pese a ser conscientes que no van a tener minutos de forma regular, siguen empeñados en seguir.

Con este panorama tan desolador, el Barcelona está buscando otras soluciones para empezar a aligerar la masa salarial de manera urgente. Una de ellas es la resolución por la vía rápida de algunos cedidos que se irían con la carta de libertad como Clement Lenglet y Samuel Umtiti. También está abierta la carpeta Eric Garcia, un jugador que tampoco cuenta para los técnicos, y menos ahora con la llegada del central vasco Iñigo Martínez. Y la cesión asimismo de Pablo Torre, aunque en este caso la cantidad que se libera en la masa salarial es prácticamente irrisoria.